Cielo Rojo || México || Countryhumans|| [Hiatus].

🍀~ONU~🍀

Como todas las reuniones su transcurso era normal o eso pensaba el americano, sin duda tenía que hablar y solucionar ciertos problemas con algunos países. Cabe decir que se encontraba cansado, no había dormido para nada, problemas por aquí y por allá, su misión era buscar una solución para todos aquellos problemas que amenazaban por todo el mundo.

Era sin duda agotador, sentía que en cualquier momento se podía dormir, pero intentaría no hacerlo. Sin más escucho todo lo que tenían que decir los países, tomando de vez en cuando alguna nota.

De la mesa agarró su vaso de café que parecía estar muy caliente ante el pequeño vapor que emitía este, pero sin dudar lo bebió, como si nada. Volvió a dejar el vaso de café en la mesa, se levantó tomando unas hojas de la mesa para después repartirlos.

—Así damos por concluida la reunión pueden retirarse, menos México, Corea del norte y China—dijo con seriedad que siempre le caracterizaba, mientras recogía varias carpetas.

Sin espera alguna la mayoría de países ya se había retirado del lugar, mientras los antes nombrados se dedicaron a quedarse sentados.

—Chales—murmuró por lo baja el tricolor para después volver hablar —Argie nos vemos en tu casa güey—gritó el mexicano a su amigo el argentino que salía de la sala de reuniones, que solo se limitó asentir.

El coreano se notaba muy molesto, se notaba a leguas que podría asesinar al chino tan solo con su mirada, el choqué de miradas entre ellos era mortal, México sin duda se sentía intimidado entre ellos.

Hasta le pareció ver que los ojos avellana del coreano cambiaron a rojizos. Pero eso era imposible, ¿cierto?

No le tomo mucha importancia, tal vez fue su imaginación.

Onu miro aburrido la situación entre ambos países, chasqueo los dedos llamando rápido la atención de ellos, sus miradas que dejaron de reflejar odio, ahora lo veían expectante, solo se limitó hacer un ademán con la mano para que los siguieran.

Caminó hacia la salida, mientras que los asiáticos lo seguían sin chistar y sin agredirse verbalmente entre ellos. Antes de irse Onu, se detuvo miró hacia atrás, viendo como el mexicano ladeaba la cabeza con duda.

—México, podrías esperar unos minutos aquí en lo que terminó con ellos—habló con suavidad acompañada de una leve sonrisa, en sus ojos pudo ver como le suplicó que esperará y no se fuera.

Notó las ojeras del americano, al igual que su mirada cansada y esa pequeña sonrisa, sintió un poco de culpa.

—Si, no hay ningún problema Onu—respondió de manera automática ver el estado de la organización, sonriendo como de costumbre.

Onu simplemente sonrió y salió del lugar cerrando la puerta, se encaminó con los dos países hacia su despacho. México sintió como una parte de su corazón se ablando con el americano, no podía odiarlo después todo.