Mi vecino •{Wos}•

Capítulo 8 "Enfermo"

Me desperté y eran las 09:07hs a.m. Mateo seguía dormido.
Bajé a la cocina a prepararme unas tostadas con paté y unos mates (obvio que a Mateo no le voy a dar. Igual está dormido así que no va poder comer dormido jsjsjsjs).
Subí con MI desayuno a mi pieza. Me siento en mi cama, cuando voy a comer una tostada Mateo se despierta.
-- Buen día... que rico olor. ¿Qué es? -- dijo Mateo metiéndo la mano en MÍ desayuno.
-- Es MI -- énfasis en el mi -- desayuno... vos no vas a comer nada. ¿Me escuchaste? Na-da 
--¿Por?
--¿Vos me estás jodiendo Mateo...? -- le dije media alterada --. Porque anoche te vomitaste hasta lo que no te comiste.
-- Pero tengo hambre.
--¿Y cómo no? Si te vomitaste todo bobo... hace el favor se irte a bañar ¡ya! Porque tenes un olor a vómito -- Me tape la nariz -- que se huele de acá a la china.
--¿Y mi remera?
--Anoche la puse para lavar, así que se debe estar sacando.
-- Okey. Me voy a bañar.

***

Mateo salió de bañarse.
-- Mateo debo llevarte a tu casa. Así que ¡vamos! ¡Arriba! No te acuestes.
--Dejame en paz. Me siento mal. Quiero dormir... ¡Dejame!
--Vas a tu casa y dormís allá. ¿Entendido? ¡Vamos!
--No. Afuera hace frío.
-- Mateo afuera hace 20 grados.
--¡Hace frío!
Estaba preocupada. Ya no se que hacer. ¿Ahora como sacó a este marmota de mi casa...? ¡Ignacio! Si. El me va a ayudar a llevarme a este.
Prendí mi teléfono y le marqué.
-- Okey. Enseguida voy.

10 minutos después

--Hola Lola. ¿Y...? ¿Cómo esta?
-- Bueno em... él --. Ambos miramos a Mateo.
-- Me muero. Me voy a morir. Si. Ya lo creo...
--¿Está enfermo o delirante?
--Ambos --. Dije yo.
--...estoy enfermo y me tratan de psicópata. Nadie me comprende. Soy un nene incomprendido. ¡Ayuda! Me muero.
Miré a Ignacio. Ninguno de los dos podía creer lo que Mateo decía.
-- Okey ya. Vamos Mateo arriba. Si. Vamos. ¡Levantate!
--¡Noo! Dejame dormir tranquilo --. E hizo puchero.
--Escuchame cara de perrito mojado, ese puchero dejaselos a tu vieja. A mi no me vas a convencer así que te levantas antes de que te dé una para da en culo que llegues volando a tu casa. ¿Me escuchás?
-- Si...
--Asi que levantate, lavarte la cara, abrígate y vamos.
Mateo sin ganas se levantó de la cama y se fue al baño.
--¿Cómo...? ¿Cómo hiciste eso?
--Tengo experiencia...
--Gracias...
--Todavía no me lo agradezcas. Todavía no vino la peor parte.
--¡¿Qué?!
-- Si. Esperá a que salga de tu casa... Ahí si que lo vas a querer tirar de un puente.
--¿Joda?
El se acercó a la ventana y la abrió.
--¡¿Qué haces pelotudo?! ¡Hace frío! ¡Cerra la ventana! ¿Me escuchas? Cerra ma ventana, tarado --. Mateo refunfuneó y casi arrastrado los pies cerró la ventana.
--Uff... -- Dije yo.
--¡¿Uff qué?! -- Dijo Mateo.
Miré a Ignacio, y él movió la cabeza diciendo "así es Mateo enfermo".
La verdad yo, nunca ví como era Mateo enfermo. Siempre me dijeron no te junte que te vas a enfermar así que sólo le mandaba mensajes. Pero ahora entiendo que no era que yo me iba a enfermar, sino que no querían que yo presenciara como es este de enfermo.
--¡Ya estoy! -- Dijo Mateo.
--Bueno... vamos.

Salimos de mi casa y fuimos a la parada del colectivo.
--¿Qué? ¿Vamos en colectivo? ¿Por qué no en taxi?
--¡Por que soy pobre boludo! -- Dijo Ignacio.
Me reí.
--¿Y vos no tenes plata?
--¿Vos no pensad que si yo tuviera plata no iríamos en un taxi o en un remis, bobo?
El refunfuneó.
Subimos al colectivo, y Mateo se sentó en esos asientos de uno, pero en el fondo. Y yo en los asientos que son 5. Pero con Ignacio así que sólo ocupamos 2, ahre.
Yo estaba sentada del lado de la ventanilla.
--¿Falta mucho?
--Uy Mateo recién subimos al colectivo. Deja de hincarme las pelotas.
-- No tenes. Vos sos mujer.
-- Pero vos me las creas y las rompes.
El se calló y se puso a ver para la ventana.
--¿El te inventa las pelotas? -- Me dijo Ignacio riéndose.
--Calla --. Le dije riendome.
El paso su brazo alredor mío.
--¿Te molesta?
-- No --. Y apoye mi cabeza sobre su brazo.

15 minutos después

-- Mateo vamos que hay que bajar --. Le dije.
--¡Por fin!
Bajamos del colectivo y caminamos dos cuadras y llegamos a su casa.
Toqué el timbre y Pedro me abrió la puerta.
--Hola Ped... -- Empecé a decir.
--Papá ellos son malos conmigo. Me tratan mal.
--¡Ay Mateo no me rompas los huevos! Andá a la cama que ya voy.
--¡Papá! -- Y se fue.
--Em... Hola y gracias.
--Hola y denada -- Dije.
--Pido perdón por Mateo si los molestó. A veces apreciará que tuviera 3 años el pibe.
--Ni me lo digas --. Dijimos Ignacio y yo al unísono.
-- Bueno... ¿Quieren pasar?
--No, no. Perdón pero ya nos íbamos --. Dijo Ignacio.
--Ah bueno. Chau.
--Chau --. Dijimos y nos fuimos.
--¿Y ahora? ¿A dónde vamos? -- Preguntó Ignacio.
--¿A mi casa?
--Dale.
Nos tomamos devuelta en colectivo.

15 minutos después

Bajamos y caminamos una cuadra y media y llegamos.

Llegamos a mi casa y subimos a mi habitación.

-- Gracias Nacho...
-- No fue nada.
--No encerio. Tenías razón es insoportable Mateo --. Dije parandome en frente de él.
El se rió.
--Igual no fue nada. Sie.ore vas a contar con mi ayuda --. Y me sonrió.
--Gra-gracias...
El se acercó a mi y puso su mano en MÍ mejilla y colocó mi pelo detrás de mi oreja.
--...Eres muy linda --. Me dijo.
Me quedé mirándolo.
--Encerio, lo sos --. Y se acercó a mi casa vez más.
-- Yo... em... --. No se que decir. Esto. Esto es raro. Jamás él me había dicho eso.
Estábamos tan cerca que podía sentir su reputación pero depronto mi hermana abre la puerta, y nosotros nos corrimos para atrás.
--Mamá me pide que te diga que el almuerzo ya está listo.
--Bueno...
--Tambien me dijo que me preguntó ¿si querés que te lo traiga o que vas a bajar?
--Em... que, que. Decile que vamos a comer acá.
-- Okey --. Y se fue cerrando de un portazo la puerta.
-- Que simpática --. Dijo Ignacio.
--Mi hermana es así. Nada simpática, cerrada, poco charlatana, en realidad nunca habla es muy poco lo que dice cuando habla, y bueno. No se... no parece mi hermana.
El sólo asintió con la cabeza.
--...Es cierto --. Dijo Ignacio --. Todo lo.que dije es cierto. Sos muy linda, inteligente, valiente, sos... sos perfecta...
Me ruborizé.
El volvió a poner su mano en mí mejilla y nos acercamos.
--Acá tienen --. Dijo mi hermana dejando un plato con dos sándwiches de milanesa.
Se fue cerrando otro portazo.
-- Me va a romper la puerta --. Dije.
Ambos nos reímos.
Nos quedamos mirando e Ignacio volvió a hablar.
-- Me gustas Lola. Mucho. Me gustas muchísimo... -- con sus dedos revolvió su pelo --. Te lo hago más fácil. Estas muy buena y quiero estar con vos. Me gustas desde... desde siempre, por eso siempre te defendí de Valentín, por eso siempre te ayudé y, por eso es que quiero salir con vos. Te amo... ¿Querés ser mi novia?

Bueno... el mundo se acaba de detener ¿no? Esto es imposible. Literalmente esto es imposible.

--¿Querés si o no?
Me acerqué a él y puse mi mano en su cachete. Le acaricié y dije.
--Si. Si quiero. Vos también me gustas mucho.
Y nos besamos.

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Espero que les guste!!
❤❤❤❤

~MoonyMendes❤☄