Detrás de una mentira (Millie, Finn, Gaten, Noah,Caleb y Sadie)

Cap.9

*Narra Rous*
Tenía el brazo roto, pero nada más, me lo vendaron y empezaron a preguntarme por el número de mis padres para avisarlos y aunque yo no quería interrumpir su viaje ellos insistieron en que tenía que llamarlos.
Les di el número de mis padres y por fin me dejaron en paz, me dirigí hacia Noah y lo abracé fuertemente, el me respondió con un abrazo.
— Gracias por salvarme la vida, te quiero.— Dije mientras lo abrazaba.
— De nada, veo que te has roto el brazo.— Dijo mirando mi brazo preocupado.
— Si, pero en 1 mes me lo quitan, no tienes por qué preocuparte.— Contesté con una gran sonrisa.
— He llamado a Finn, a Sadie, a Caleb, a Gaten y a Alice y les he contado lo que ha sucedido, me han dicho que iban a venir y que nos iríamos a comer, ¿te apetece?
— ¡Si, claro! Así puedo quitarme el susto.—Respondí.
— Finn va a traer a 2 amigos suyos que son de New York, si te caen bien... ya tienes gente con la que quedar.
— Yo contigo estoy bien.— Sonreí.
— Pero, nosotros tendremos que volver a nuestras casas y no quiero dejarte sola.— Dijo acariciando mi hombro.
— Es cierto.— Contesté con tristeza.— por cierto, siento mucho haberte tratado como te traté ayer, solo que no quiero ir rápido contigo, quiero que lo nuestro sea bonito... y lo bonito va despacio.
— No te preocupes, pero... en la vida hay excepciones y a veces el amor de verdad va rápido.— Contestó sonriéndome.— Mira... te quiero mucho... y se que nos conocemos desde hace poco pero... me gustaría besarte sin que me rechazaras y me gustaría ir a dar un paseo de la mano y decirnos cosas bonitas todos los días, pero se que es pronto, igual demasiado...— Confesó.
Yo pase mis brazos por su cuello y baje su cabeza hasta mi cara, ya que el era más alto que yo, el bajó sus brazos dejándolos en mi cadera, quité mis brazos de su cuello y puse mis manos en su cara.
— ¿No te arrepentirás esta vez?— Preguntó el preocupado.
— Calla tonto.— Reí.
Y yo lo besé.
*Narra Alice*
Habíamos llegado con los chicos al instituto y fuimos corriendo donde había pasado todo, nos llevamos una sorpresa cuando vimos a Noah y a Rous... ¡BESÁNDOSE!
— ¡Oh my good! ¡Te dije que acabarían juntos!— Me dijo Finn saltando de alegría.
Finn y yo nos abrazamos de la felicidad porque si.
— ¿Ella es Rous?— Preguntó Jack, el mejor amigo de Finn.
— Si, es ella.— Le Contestó Finn.
— Hombre, desde que se fueron a hablar a solas yo ya sabía que algo pasaría entre estos 2.— Confesó Sadie.
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Pasaron unos cuantos minutos y los 2 chicos terminaron de besarse y los dos vinieron hacia nosotros.
— Rous, ¿estás bien?— Pregunté.
— Si, estoy bien, si no hubiera sido por Noah igual estaría muerta.— Contestó Rous mirando a Noah.
— ¿¡Qué hace mi hija esposada!?— Preguntó alarmado el padre de Glory.
— Señor, su hija intentó matar a una chica.— Contestó el policía.
— ¿¡Qué chica!?— Volvió a preguntar de la misma forma.
— Aquella de allí, la que tiene el brazo vendado.— Señaló a Rous un chico.
Rous se giró y empezó a mirarme alarmada.
— Vámonos Rous.— Contesté al ver la reacción de mi amiga.
*Narra Rous*
Todos nos fuimos del instituto, ya que al pasar esto no habría más hasta el siguiente día, es decir, hasta mañana.
Íbamos caminando y me paró alguien, me di la vuelta y era el padre de Glory.
— Por tú culpa, ahora mi hija no puede ir más al instituto, ¡la van a llevar a un centro de menores! Y todo por tu culpa pedazo de zorra.
— ¡Oye suéltala!— Contestó malhumorado Finn.
— ¿¡Y que me vais a hacer panda de inútiles!?— Dijo el mayor mirando a todos mis amigos.
— Acabas de insultar a una menor, ¿sabes que eso es denunciable?— Informó Sadie.
Alice y Noah se acercaron a mi y el hombre los empujó haciéndolos caer.
— Ella no tiene la culpa de que tu hija y más gente la acosen y suban vídeos a las redes pegándole e incluso apunto de matarla.— Dijo Caleb.
— ¡Exacto! Suéltala, no merece la pena.— Contestó Gaten.
— ¿Y qué ganó yo dejándola libre?— Preguntó el señor.
— No denunciarlo, porque ya tenemos razones para hacerlo, has insultado a una menor y has empujado a dos.— Contestó un chico que no conocía.
El hombre me soltó, pero me cogió del cuello para luego empujarme y hacerme caer al lado del chico que no conocía. El padre se fue de allí y ese chico me ayudó a levantarme.
— ¿Estás bien? Ese gorila no tiene educación.— Me dijo el chico.
— Si estoy bien, ¿quién eres?— Pregunté con intriga.
— Soy Jack, el amigo de Finn.— Dijo sonriéndome.
— Yo soy Rous, encantada.— Le sonreí.
— Yo soy Jaeden, también soy amigo de Finn.— Se presentó un chico que estaba al lado de Jack.
— Hola Jaeden.— Sonreí.
— Bueno, ¿nos vamos a comer?— Preguntó Finn.
— ¿Quieres comer a las 11:00 de la mañana?— Preguntó Noah extrañado.
— ¿Y si vamos a desayunar?— Preguntaron Sadie y Alice al unísono.
Todos asentimos y nos dirigimos hacia Starbucks's a desayunar obviamente xd.
— ¿Qué vas a pedir?— Me preguntó Noah
— ¡Eso mismo le iba a preguntar yo!— Ríe
Yo reí también, pero Noah no.
— Pues, un frappe de unicornio, desde siempre quise probarlos, pero desde que lo sacaron, no volví a venir.— Contesté.— ¿Y vosotros?
— Yo me voy a pedir un café descafeinado con nata por encima.— Me dijo con cara de gustarle mucho lo que iba a tomar.
Yo me reí y luego miré a Noah, que este tenía una cara de asco increíble, yo lo abracé y le sonreí.
— ¿Y tú Schnapp?— Le dije mirándolo con cariño.
— Creo que lo mismo que tú, yo también adoro los unicornios.— Me respondió con una sonrisa.
— Y también te encanta la comida, ¡eres perfecto para mi!— Grité.
— Shh.— Rió.— Nos está mirando todo el mundo.— Siguió riendo.
— ¡Hola chicos! ¿Cómo te está cayendo Jack?— Preguntó Finn, que estaba con Alice.
— Bastante bien.— Sonreí mirando a Jack.
— A mi también me cae bien Rous.— Sonrió Jack.
— ¿Dónde estará Jaeden?— Preguntó Finn buscándolo con la mirada.
— ¿Alguien ha dicho mi nombre?— Preguntó Jaeden que estaba detrás de Finn.
— ¡Aaa! Hola Jaeden, ¿conoces a Rous? Os podríais llevar bien.
— ¡Hola Rous!
— ¡Hola!
— ¿Te ha dicho Jack que somos de New York? Podríamos ser amigos y podríamos presentarte a nuestros demás amigos.— Propuso Jaeden.
— Eso sería genial.— Sonreí.
— Nos mantenemos en contacto.— Sonrió Jack.
Pedimos nuestras bebidas y perdí a Noah de vista.
— ¿Dónde está Noah?— Pregunté al darme cuenta de su ausencia.
— No lo se.— Respondió Jack.
— Se ha ido con Caleb y con Gaten.— Informó Jaeden.
— Okey, ¡gracias! Jack, ¿puedes recoger mi pedido? Tengo que hablar con Noah.— Le pedí a Jack.
— ¡Si, claro! Yo te lo recojo.— Sonrió Jack.
Yo le respondí con una sonrisa y empecé a buscar a Noah, buscaba y buscaba y no miraba por donde caminaba y me tropecé con Sadie.
— ¡Cuidado amiga! ¿Buscas a alguien?— Me preguntó la pelirroja.
— Si, estoy buscando a Noah, ¿lo has visto?
— Si, está sentado con Caleb y con Gaten en aquella mesa de allí.— Señaló el lugar.
Le agradecí que me lo dijera y me acerqué a donde estaba.
— Noah, ¿por qué te has ido?— Pregunté.
Todos me miraron y Noah procedió a responder.
— Yo también quiero estar con mis amigos.— Me sonrió falsamente.
— Quiero decir, deberías haberme avisado de que te ibas, me has asustado.— Explique.
— Yo también me asuste cuando estabas apunto de morir y estuve allí para salvarte.— Dijo serio.
— ¿Qué te pasa?— Pregunté fastidiada.
— ¿Qué te pasa a ti con Jack?— Preguntó enfadado.
— ¡No me pasa nada! ¡Solo somos amigos! ¿Qué te pasa con Millie?— Pregunté amenazante.
— ¡Solo somos amigos!— Contestó levantándose.
— ¡Pues lo mismo con Jack y yo!— Le plante cara.
— Rous, ya están los batidos, ¿vas a sentarte con nosotros?— Preguntó Jack con las bandejas.
— Si Jack, dame mi batido.— Respondí neutra cogiendo la bandeja sin dejar de mirar a Noah, que este ya se había sentado pero seguía mirándome con odio.
Me fui de allí con los chicos y me senté en una mesa, luego empezamos a contarnos nuestra vida y la verdad es que me sentía bien.
                     *Narra Noah*
Ya habíamos terminado todos de desayunar y fuimos a avisar a los chicos de que ya nos íbamos, vi que Rous estaba muy contenta hablando con Jaeden y con Jack y yo me puse muy nervioso, ¿podría decir celoso? Lo más seguro...
— Aham.— Tosí falsamente.— Ya nos vamos.— Informé mirando mal a Rous.
Ella me devolvió la mirada.
— ¡Okey! Vámonos.— Contestó Jaeden levantándose.
Ella solo se levantó y se fue con los chicos delante de mi y de Finn y Alice.
                           *Narra Rous*
— ¿Vamos a las recreativas?— Preguntó Gaten eufórico.
Todos asentimos y fuimos corriendo a la sala de recreativos.
Entre pasos y pasos, Noah se me acercó.
— Siento mucho haberte tratado así Rous...— Imploró perdón Noah.
— No importa... pero, no deberías ser tan celoso, ellos solo son mis amigos.— Contesté aún sería.
— Lo siento, ¿vale? Es que a veces pienso que eres mía y me entran los celos.— Contestó el.
— Y lo seré, al igual que tú serás mío, pero aparte de eso, deberías controlar tus celos.— Advertí sin parar de andar.
— Está bien, ¿me perdonas?— Dijo poniéndome voz de bebé.
Yo reí y lo perdoné.
— ¿Me regalas un besito?— Me preguntó parándome.
— Está bien.— Sonreí.
El sonrió y yo le di un beso en la comisura de sus labios y el puso cara de decepción.
— Yo quiero un beso en los labios.— Hizo un puchero.
— Ahí está bien.— Respondí riendo.
— ¿Si me duele algo tú me curarías?— Preguntó Noah.
— Si, obvio.— Respondí con obviedad.
— Pues... ¡Qué casualidad que me han empezado a doler los labios! Igual con un besito se me cura.
Yo sonreí y le besé esta vez en los labios, pero, cuando iba a parar, Noah me abrazo y me besó y nos quedamos un rato así, hasta que paramos por falta de aire y entramos en las recreativas.
                          ~Fin~

1686 palabras... Espero que os haya gustado y gracias por leerlo y votar y nos vemos en el próximo capítulo, bye ❤️❤️