Capítulo Único

64 12 30
                                    

Jooheon había conocido a Changkyun en nada más y nada menos que un Starbucks. Él solo pedía su orden y no se sacaba de su mente lo hermoso y adorable que se veía el cajero. Para hacerlo mejor, estaba con su amigo Kihyun y este lo - prácticamente - forzó a hablar con el extraño para ver si tenía oportunidades con él. Al fin el trato quedó en que si le hablaba y lo conseguía entonces Kihyun le pagaría la cita el mismo; y si no lo conseguía pues irían a comer helado para calmar las penas.

Jooheon lo seguía pensando, pero el tiempo se agotaba. Vio por su reojo a este recogiendo sus cosas y despidiéndose de otros trabajadores indicado que su turno había terminado.

No lo podía perder.

Ya fuera de la tienda, Changkyun se dirigía al auto de su padre para recogerlo, pero Jooheon interrumpió sus planes con solo un pequeño toque en su hombro.

—¿Humm? ¿Necesita algo?—. Le preguntó Changkyun al extraño notando que este estaba un poco... ¿tenso? ¿quizás nervioso? Lo que importaba era que no estaba seguro en esos momento y le causaba mucha duda. Jooheon trataba de armarse de valentía y pedirle a salir a un extraño.

—Hola. Yo- umm... Voy seguido a Starbucks y creo que eres muy lindo y... pensaba si me podías dar tu número y conocernos...

Esa expresión, Changkyun cambió su expresión por completo a una seria. Ya pareciera que se iba a comer a Jooheon en cualquier momento. Sus ojos estaban vacíos, sólo le dio miedo al mayor y oraba en su mente esperando que no la haya cagado.

De la nada Changkyun dio un suspiró y una carcajada, como si hubiese procesado todo.

—Claro, ¿por qué no? Mi número es....—. Jooheon sacó su celular y lo anotó inmediatamente para asegurarse de guardar el número en sus contactos.

—Gracias, Changkyun—. El mayor recordó el nombre que estaba en la placa del contrario.

—De nada, Jooheon—. Le respondió al recordar esas veces que escribió su nombre en su café latte como de costumbre.

Changkyun terminó por ir a donde estaba su padre con una sonrisa. El amor no se planea después de todo y Jooheon parecía ser un chico lindo.

Al llegar a su casa, Jooheon le había texteado. El menor no se esperaba que fuera tan rápido, pero agradeció que no dio su número para nada.

Así fue su primera cita. Dónde comenzó todo.

Unos días después de darle vueltas a la cita por texto, fueron a un restaurante nuevo al aire libre. Era un poco caro, pero muy agradable. Hablaron de sus vidas y sus gustos, Changkyun reveló que estudiaba lenguajes y turismo, su sueño era ser azafato. Le gustaba eso de servir a lo demás, ya empezó con un Starbucks, y era lo mismo lo único que en un espacio más cerrado, caminando por uos pasillos y volando por los aires. Bueno... era diferente a la tienda, pero todavía le encantaba.

Jooheon encontró esto adorable. Era bueno que pudiera seguir sus sueños y sin duda no a todos les gusta los aviones. En cambio, él tenía otros planes para su vida. Quería ser abogado criminalista. Odiaba saber que habían personas tan malas ahí fuera y familias sin justicia, le daba rabia esas noticias. No era que le pasó algo en su infancia ni cerca de él, solo era ese deseo de defender a los inocentes. Para Changkyun fue como un lado protector de él y eso le gustaba. Alguien decidido y dispuesto a pelear.

Al menos darse cuenta ya habían terminado con sus platillos, pero siguieron hablando de lo suyo. Todo fue perfecto.

—Ah, quiero que sepas algo antes de seguir...—. Le dijo Jooheon luego de una leve risa de parte de Changkyun.

It's Not Me | Monsta X OS |Donde viven las historias. Descúbrelo ahora