Propuesta

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Me despierto con un terrible dolor de cabeza, el solo acto de abrir los ojos es un trabajo duro, me cuesta poder siquiera intentarlo, me siento desastrosa, pero derrepente siento llegar vagos recuerdos del fieston que me mandé anoche, la pasé de maravilla y eso me motiva un poco para tomar fuerzas y levantarme.

- ¿james, estás? Dime que ya se te pasó lo papá protector, por favor- no obtengo respuesta de él, debe estar durmiendo aún, me escabullo en si habitación para despertarlo, pero no lo veo por ninguna parte, asi que lo busco en todo el departamento, y nada
- demonios, este hombre es el drama en persona, desaparece solo para hacerme sentir culpable por abandonarlo ayer, es un llorón.
Entre mi discusión interna, se escucha cómo se encaja la llave en la cerradura de la puerta principal, y me apresuro a ver si es james o su hermano
-oh hola, isa la fiestera, ¿cómo está la resaca? Espero te duela cada fibra de tu cuerpo, por inconsciente, debes relajarte, aprovechar las vacaciones y por eso te tengo una propuesta... Así dejarás esa vida tan destructiva y aprovecharemos el tiempo para pasarla juntos y dejar de parar en los mismos antros y si quieres buscarle otro lado positivo podrías considerar que podrías seguir conociendo otros hombres, otros aires... ¿Qué dices isa?

-¡Aventura! Claro que sí! Pero y el ¿dienero para trasladarnos? ¿Cómo sobreviviremos? ¿Qué comeremos? ¿Cuándo nos iremos? - suelto todas las inseguridades

-a eso iba isa, te propongo solo gastar dinero en comida y alojamiento, porque el traslado será MOCHILEANDO! La pasaremos genial, isa. Piénsalo - se nota super entusiasmado, y siento como me contagia su felicidad y me atrevo

- vamos! Me convenciste, hagamoslo!! Vamos a mochilear, vamos a recorrer el país y a disfrutar de los hombres! Digo digo de la aventura... - siento como james me mira intenso y divertido
- entonces¿ qué esperamos? Alista tu mochila yo ire a poner nuestros pasaportes al día, nos vamos maña al medio día isa- lo escucho como se aleja a la puerta, pero sin dejar de sonreír

AbyssumDonde viven las historias. Descúbrelo ahora