Un golpe de amor

Capitulo 1: Antes

¡Hola! Soy Olivia pero casi todos me llaman Via, mi madre se llama Gillian y tengo un hermano pequeño que se llama Rory.

Quiero entrar en esta universidad porque quiero ser cardiologa, en verano hice prácticas en la mejor universidad de la ciudad, tengo un nivel alto de ingles, un...

 -Señor Adler: Alto, Alto, Alto, Via... ¿que es esto?

-Via: Em... es mi carta para la universidad ¿recuerda?

-Señor Adler: si, no me refería a eso Via...

-Via: Y entonces... -antes de que pudiera terminar la frase el señor Adler continuo y dijo: Via eres una chica muy lista y se que puedes dar mas que esto y contar algo que no sean todos tus logros, deberías... Sinceramente es lo único que recuerdo de todo lo que dijo, el señor Adler habla mucho y confía en mi aunque a veces preferiría que no lo hiciera tanto, así al menos me ahorraría unas cuantas charlas. No lo entiendo, cuando leí la carta en casa me parecía perfecta y ahora ni siquiera me había dejado terminar de leerla, no me había dado tiempo a llegar al segundo párrafo donde mencionaba mi buen nivel de francés, y todo lo que habia investigado sobre la universidad y sus instalaciones. ¿Tal vez debería escribir de otras cosas como dice el señor Adler? es decir siempre me dice que debo escribir mi historia y descubrir quien soy fuera de mis sueños de estudiar en el extranjero o de ser cardiologa, pero sigo sin terminar de entender como podría eso servir de referencia en mi carta de ingreso. Siempre he tenido las cosas claras y hace años que descubrí donde y que quería estudiar, mi familia lo sabe bien. Era algo que estaba destinado a ser y que "incontrolablemente" sucede, o al menos eso es lo que dice mi madre pero lo cierto es que yo no creo en esas cosas, no como mi madre, que sigue esperando que mi padre vuelva en su caballo blanco con una brillante armadura y pollo frito para que los 4 juntos cenemos y vivamos felices para siempre. Pienso en ello como algo tonto e ingenuo. Creo en la ciencia y en los sentimientos de amor pero no en el amor pegajoso y "real" de las películas que supuestamente durara "para siempre" porque se que no es así. No me malinterpretéis no soy una roca sin emociones es solo que no creo que alguien pueda querer a alguien tanto como en la tele, sinceramente parecen hechas para que la gente no quiera amar porque saben que siempre va a ser menos que el amor de Titanic por ejemplo. No entiendo como podría llegar a sentir que podría dar la vida por alguien que no sean mi madre, mi hermano y mi mejor amiga.

Tras la habitual charla con el señor Adler, me despedí con dos besos como era normal entre nosotros, y es que ese hombre es uno de los pocos profesores decentes del instituto, junto con la profesora de biología. Salí de su despacho en dirección a mi taquilla, mientras pensaba en nuestra "pequeña" charla. Se habían acabado las clases y solo me quedaba recoger algunos libros e ir como siempre a la panadería de enfrente donde mi mejor amiga Charity me esperaba con un bocadillo de atún en la mano para compartir medio camino juntas. Y digo medio camino porque no es que nuestras madres se lleven muy bien que digamos. Siempre se han llevado mal, afortunadamente yo tengo mi propio criterio en cuanto a las personas y decidí darle una oportunidad, y resulto ser un encanto, un poco fantasiosa y con la cabeza en las nubes pero un encanto, y mi mejor amiga desde sexto de primaria.

Mientras caminábamos le conté mi charla con el señor Adler y otra vez como siempre llegamos a la conclusión de que el señor Adler tenia razón, bueno mas bien ella llego a la conclusión. Creo que es lo único que pueden tener en común un hombre de cuarenta y tantos profesor de literatura y una adolescente de 18 sobresaliente en siestas de primera durante la clase de literatura.

-Charity: bueno, aqui nos separamos y recuerda escuchar al cara sardina jajaja

-Via: ya te he dicho que no lo llames el cara sardina, se llama víctor...

-Ambas: Victor Adler...

-Charity: vale,vale bueno yo me voy.- la abraza- cuidate, hasta mañana
-Via: ¡hasta mañana!
De verdad que no aguanto cuando me dan la charla y menos aun si es una detrás de otra. En cualquier caso tengo que centrarme en que tengo que llegar a casa y rehacer por cuarta vez la carta para la universidad y terminar los deberes de matemáticas y de física. Iba tan ensimismada en mis pensamientos que ni siquiera me di cuenta de como habia acabado chocando con alguien. Lo siguiente que vi fue un chico que me miraba divertido desde... ¡encima mia!