CAPITULO 4

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No, muchas gracias.
Estoy bien con el burrito.

¡Ay!
No es para que se enoje. Sólo la estaba protegiendo.
-Dijo dando una gran mordida al burrito.

No estoy enojada.

Bueno, como usted diga.

¿Falta mucho para llegar?
-Pregunté.

Lamentablemente, si.

¡Ahg!
-Dije rodando los ojos.
Nunca me había topado con un tipo tan bonito pero tan aburrido.

¿Cuál es su color favorito?
-Pregunta Luis.
¿Este hombre no encuentra que hablar?
¡Jajaja!
Para que ustedes vean, al principio era yo que buscaba tema y ahora es él.
¡RICO TODO!

Color mierda.
-Dije sonriendo.

Que grosera...

Yo grosera y tú un espanta hombres.
-Dije.

Ah, aún está dolida con eso. Tranquila, aquí me tiene.

En ningún momento dije que lo quería a usted, pero gracias.
-Dije con cara de asco aunque no me causa asco, al contrario, me gusta mucho su físico pero me hizo enojar.

Ya cierro la boca, creo que usted no está por hablar.
-Dijo subiendo un poco la música.

¡Al fin!
Se dio cuenta de lo que le quería dejar dicho con las indirectas.
-Dije volteando a ver por la ventana.
En una de esas nos quedamos parados al frente del semáforo que se encontraba en rojo.

Yo veía a los diferentes tipos de personas que habían por aquí.
Habían unos tipos que yo hasta quería salir del auto para ir a hablar con ellos pero el idiota de Luis le tenía seguro
(No pregunten como me di cuenta) ...
Pero bueno, hay una linda vista. Yo solo sé que estoy en Madrid, después de nombre de calle y eso no sé ni mierda.

.......

Ya llegamos.
-Dijo Luis parqueando el auto enfrente de una casota.
Tenía un color café, muy lindo.

Salgo de aquel auto y me quedó mirando el lugar... Porque hay que analizar y pensar en cuales sitios se puede tener sexo.
Mis amigas se buscan su dinero bien con sus SUGAR DADDYS.

No esperé al loco de Luis y fui directo a la puerta para tocar el timbre. Una vez hice esto de inmediato abrieron la puerta, pero no fue ninguna de mis amigas sino un muchacho.

Buenos días, mi nombre es Alicia Steff.
¿Se encuentran las hermanas Wester? -Dije pareciendo niña seria.

Muy buenos días, soy Jesús, un gusto.. Si, ellas se encuentran. Puede pasar. -Dijo el tipo sonriéndome...
No se ve nada mal jajaja.

Bueno, pues pasé y tomé asiento en un mueble que había en la sala. Es muy bella esta casa en verdad, tienen buen gusto con la pintura.... Y digo que la pintura porque me recuerda a una casa que visite en.... Okay, Okay bastante información...

¡Uf! Señorita
¿¡Y que fue lo que usted echó en esas maletas!?
Me van a matar de tanto que pesan. -Dijo Luis entrando a la casa bien sudado y con mis maletas casi cayéndose.

Alicia en la casa del sexo 2 (EDITANDO) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora