La cafetera estaba prendida y el olor a café inundaba la cocina. Le di una calada al cigarillo y luego lo apagué contra el cenicero. En la madrugada me fumé un paquete entero y aún tenía esa ansiedad en mi mente.
Me acerqué a la cafetera y me serví el café en una de mis tazas favoritas, luego le eché un poco de crema en el borde._¡Te has levantado temprano, que rico huele eso!_ Escuché exclamar a Jessica y me volteé para verla justo en ropa interior y una blusa apretada.
Quité mi mirada cuando ella se dio cuenta que le vi todo y se sirvió café mientras sonreía.
_ ¿Y hace cuánto estas con mi hermano?_ Preguntó acercándose y me limité a suspirar.
_Somos mejores amigos y pues surgieron sentimientos ¿sabes?, pero aveces hay discusiones que no me agradan en absoluto_ Respondí sincerándome por primera vez y enmudecí cuando se me acercó demasiado.
_Veo como me miras, me has comido con la mirada desde que bajé de mi camioneta y no veo la hora de probar esos labios_Susurró de cerca mientras respiraba sobre mi cuello y la alejé poniendo las manos en sus hombros.
_Por favor.....esto no es correcto, eres linda pero no tengo ganas de llevarlo a lo sexual. Estoy pasando por un momento dificil_Dije en voz baja y ella asintió mientras se pasaba una mano por el cabello.
_Una semana....solo eso_ Dijo divertida mientras se alejaba por el pasillo.Tragué saliva y luego seguí tomando de mi café que aún no se entibiaba. Admiré el caminar perezoso de Cristian y me sonrió cuando me vio en la cocina. Se acercó y me besó para luego verlo arrugar la nariz.
_¿Estuviste fumando?, se te huele horrible_ Soltó con enojo y me rasqué la frente al mismo tiempo que cerraba los ojos.
_Cristian hazme el favor de no malograr mi mañana, se me parte la cabeza_ Respondí nerviosa y me senté en una silla cercana.De pronto vi como se acercaba Jessica sosteniendo una lata de pintura y al tropezarse con uno de sus zapatos dejó caer el contenido por todo el piso. Era pintura roja y mi respiración se atoró mientras mis ojos se desorbitaban.
Recordé la sangre, mis manos pegajosas, el dolor y las sábanas que luego Cristian enrolló para tirar._Ay lo siento, no fue mi intención. Solo quise saber en donde podría poner la lata, creo que alguien la abrió_Jessica habló algo apenada e hice una mueca de disgusto mientras me ponía una mano en la cara.
Cristian se acercó y luego se agachó para buscar mi mirada que la tenía en mis manos que se frotaban en mi pantalón, casi por si solas. Miedo, estaba sintiendo cosas malas, y no entendía lo que él me estaba diciendo. Solo me concentraba en el movimiento de sus labios, de sus ojos llenarse de lágrimas y de pronto me puse de pie.
Mis puños fueron apretados y miré a Jessica con una furia incalculable. Me acerqué y le quité el pote de las manos._¡Vete de aquí!_Grité entre sollozos y ella parpadeó mientras veía hacia su hermano.
Me arrodillé y empecé a intentar poner la pintura dentro del pote. Pero era algo imposible y me largue a llorar con mucho dolor. Ella se puso a mi lado y paró mis manos mientras que levantaba mi mirada y me perdía en los suyos.
_Shh todo va a salir bien, tranquila, respira hondo_ Dijo en tono angustiado y sollocé mientras apretaba sus manos que estaban sobre mis hombros.
Empecé a respirar agitada y me llevé dos dedos al pulso. Mi cuerpo comenzó a temblar y comencé a ver borroso.
_¡Llama a emergencias Cristian!_ Escuché que gritó nuestra invitada y luego no recuerdo más.
...
Abrí mis ojos lentamente y quien estaba en la habitación era Jessica, me sostenía la mano con fuerza y se encontraba viéndome fijamente. Toqué mis labios y me quejé del dolor.
_Te ha agarrado un ataque y te mordiste fuerte los labios al punto de que sangraran y..._ Empezó a decir mientras se pasaba una mano por la frente_ No sé si lo recuerdas, pero tomaste un trozo de cerámica que se había roto e intentaste cortarte. Pero te detuve ¿sabes?.
Miré hacia la ventana y me quedé pensativa un momento, realmente me sentía perdida y que no estuviera la persona que necesito a mi lado hace que piense que soy solo basura en su día.
_Lo extraño, porque era parte de mi y lamento tener que sufrir todo esto_Comencé a decir angustiada y mi cuerpo tembló_ Quiero a mi bebé.
Sollocé y ella me miró también angustiada, me abrazó y escondí mi rostro en su cuello.Sentí su mano pasar por mi cabeza y luego la quedé mirando, sus ojos brillaban y me sonrió para darme ánimos.
Me acerqué a su boca y levanté la mirada, luego cerré los ojos y nos besamos con ternura, mis manos tomaron su rostro y luego me quedo viendo.Apreté mi frente con la de ella y sonreí levemente, sintiendo su respiración un poco trabajosa y me alejé cuando oímos que abrían la puerta.
Cristian estaba de pie, viendo todo algo desconcertado y bajó el ramo de flores._¿Qué pasa aquí?_ Preguntó molesto y me froté el mentón.
_Tu hermana se dignó en venir temprano, mientras no sabia que diablos estabas haciendo. Eres una persona muy reservada y me molesta_ Respondí en tono molesto.Él se rió en mi cara y dejó el ramo sobre la cama, miró su reloj de muñeca y luego suspiró.
_No fui yo el que se quiso cortar las venas_ Comentó burlándose y mis mejillas ardieron.
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La chica del bar 4
RomanceCinco años habían pasado y mi amor por ella continuó intacto. Tuve que seguir con mi vida lo mejor posible y supe en el mismo instante que la vi que todo iba a mejorar entre nosotras. Sus manos se entrelazaban con las mías y tiraban de vez en cuando...