Pᴏᴛᴀᴛᴏ Cʀɪsᴘs 「ʰᵃⁿ ʲⁱˢᵘⁿᵍ」

Fancy

Seungmin terminó yéndose algo tarde.
Muerta de sueño, fui hacia mi cama y prácticamente me tiré en ella.
Luego de muchas horas, cuando desperté, vi que era casi la 13:00 y tenía como 12 llamadas de Minho, "corrí" se queda corto.
Salí lo más rápido que pude para ir hasta la plazuela donde nos solemos ver.
Me coloco a su lado, cansada después de correr, cosa que nunca hago.
Sentía que me iba a morir.

-Ho...hola - me voy a morir aquí mismo.

-Hasta que llegas, llevo 20 minutos esperándote.

-Sí, bueno, me dormí, y cu-cuando desperté y vi tus llamadas... - mátenme - Vine lo más...rápido que pude - se cortaba mi respiración, lo cual odio.

-Te entiendo, Sunny. Venga, siéntate un rato que te veo cansada.

Te amo Minho.
Luego de eso me acerca a una banca cercana y me entrega una botella con agua.

-¿Ya te dije que te amo?

-Todo el tiempo - hace una sonrisa de medio lado.

Su ego es impresionante.
Luego de calmarme, él empieza a contarme su plan para hoy.

-Bueno, ahora muévete y vamos allá.

-Vale...

Prácticamente Minho me lleva a rastras.
Después de un buen rato caminando, llegamos a ese dichoso centro comercial.
A los dos nos entra el hambre, así que nos dirigimos a la comida saludable de Mc Donalds.
Pedimos por la pantalla, pagamos, y esperamos en una mesa.

-Bueno, bueno, traidora ¿Cómo te fue ayer con tu amiguito? - hace énfasis en "amiguito" tratando de fingir celos.

-Muy bien, para tu información. Es un amiguito muy agradable - le vacilé.

-¿Ahora me piensas cambiar por alguien que acabas de conocer?

-¿¡Yo cuándo dije eso!?

-Lo insinuaste.

-No insinué nada.

-Ajá, ahora llama y dile a tu amiguito que te pague la comida.

-Agh - pensé por un momento lo que dijo - ¿No te iba a pagar yo la comida?

-No estás como para hacer tantos gastos, Sun, yo lo pago... Pero de todas maneras me comprarás alguna prenda para demostrar que sientes el haberme abandonado.

¿Por qué es tan bueno?
No puedo evitar abrazarle, y obviamente él me corresponde.

-¿No que no te gustaban los abrazos?

-La gente a veces...cambia de opinión.

-Sonríe, y nos separamos - Lástima que ya no podré molestarte con eso.

-¿Sabes lo mucho que te odio?

-¿Y lo que te odio yo a ti?

Reímos levemente.
Nos llaman para que recojamos nuestro pedido.
Yo me quedo a guardar la mesa.
Cuando vuelve, coloca la bandeja y se sienta a mi lado.
Agarro una patata, le pongo salsa y me la como.

-Por cierto ¿Tienes novio?

¿Qué? Él no suele preguntarme esas cosas.
-¿Por qué?

-¿Sí o no?

-...No.

-¿Segura? Tu "amigo" de ayer no...

-¿Qué? ¡No!

-Ah, es que Jia me dijo que...

La odio.
-Mira, lo que sea que te haya dicho, es mentira.

-¿Es mentira el que se acercó él primero?