Al día siguiente Camila se despertó sola en la habitación de Lauren
-¿Dónde estás, Lauren?
Y de pronto, mágicamente Lauren apareció por aquella puerta con una rosa roja
-Buenos días, niña bonita
-Buenos días Lauren
-¿Llevas mucho tiempo despierta?
-De echo, recién me desperté
-Menos mal, traje esto para ti, pequeña -Dijo entregándole la rosa-
-Es muy linda Lauren, gracias
-No agradezcas, por cierto, mi mamá me pidió que la disculparas pero le salió una emergencia en su trabajo y tuvo que ir
-Yo amo a tu mamá
-Y yo las amo a ambas -Dijo para comenzar a besarla-
Ya se estaban acostumbrando a que cada vez que se besaban alguien los interrumpiera, esta vez alguna persona inuportuna llamo a la puerta
-Voy -Grito cerca de la salida abrio la puerta y se llevo una gran sorpresa-
-¿Tú?
-¿No te da gusto verme?
-Claro que me da gusto verte, es solo que no te esperaba
-De eso se trataba
-¿Cómo supiste donde vivo?
-Me encontré a tu madre hace unos días y me dio su dirección para que viniera a visitarlas
-Claro, que grosera soy, por favor pasa
-Gracias
De lo que ambas chicas no se dieron cuenta fue que Camila se encontraba en las escaleras presenciando la esena, y no es necesario decir que estaba mucho más que celosa, esa chica Kassandra, no le agrada en absoluto, así que decidio hacer acto de presencia
-Lauren, amor, ¿Dónde estás? Te estuve esperando en la habitación
-Camila, lo siento, vino una amiga a visitar
-No te disculpes amor -Dijo mientras besaba sus labios rápidamente-
-Hola, disculpa no te había visto, Kassandra, verdad?
-Así es, Camila
-Lauren, vine a ver si querías salir conmigo
-En serio me gustaría pero hoy estare con Camila –Comentó mirando a la más joven, quien se encontraba con una sonrisa en la cara-
-No te preocupes, entonces ¿Que tal mañana?
-Lo siento, pero Lauren va a estar ocupada toda la semana conmigo, tenemos un proyecto juntas
-Bueno, entonces será después -Se acerco a Lauren dejando un beso en la conmisura de sus labios-
-No te preocupes Lauren, yo entiendo -Comentó sonriendo mientras acariciaba su mejilla- Camila estaba vuelta loca
-Gracias por entender Kassandra, ya sabes que tener novia no es sencillo
-¿Que, tienes novia?
-Por supuesto, Camila es mi novia, lamento haberte engañado, pero no me sentía lista para contártelo
-No pasa nada, me tengo que ir, es tardísimo, le dices a tu mamá que paso después a saludarla, hasta luego -Y salió de la casa dejando solas a las dos chicas-
-¿Por que dijiste que soy tu novia? -Preguntó curiosa-
-Noté que estabas incomoda ante la presencia de Kassandra, por eso lo dije, pero si te molesta no lo vuelvo a hacer
-Lo único que me molesta en estos momentos es no haber desayunado
-Eso lo arreglamos fácil -Dijo comenzando a caminar-
-Ven conmigo
Estuvieron juntas todo el día, pero lamentablemente llego la noche, Camila debía ir a casa, así que decidio llamar a su chofer para que pasara por ella, ambas chicas se encontraban afuera de la casa de Lauren, esperando a la persona que pasaría por la más joven
-Camz, me has hecho la chica más feliz del mundo en estos días y te prometo, no, te juro que hare todo lo posible por que esto no se termine nunca
-Y yo te juro que hare todo lo posible por cumplir mi promesa -Dijo y la beso-
Unos minutos después Camila se fue, dejando a Lauren con una duda ¿A que promesa se refería?
Decidio entrar a su casa a esperar a su madre y poder dormir, es lo que Lauren hacía todas las noches, siempre esperaba a que su madre llegara y después se dirigía a dormir, cuando su madre llego, decidio acompañarla a cenar y después fue a dormir, se encontraba ansiosa por ver de nuevo a Camila, quien iba a pensar que a pesar de todo ellas estarían juntas, quizá no con un titulo oficial, pero estaban juntas y estaban felices, era lo único que les interesaba a ambas.