𝐁𝐀𝐓𝐓𝐄𝐑𝐄𝐃 ♥︎ 𝐌𝐈𝐍𝐒𝐔𝐍𝐆 [RESUBIENDO]

𝐞𝐥𝐞𝐯𝐞𝐧

¡ hola, espero te guste !

no apto para personas homofobicas y que no shippean minsung (づ◡﹏◡)づ.

si no te gusta, ¡ por favor no ofendas a la autora !

ella se ha esforzado mucho para crear este pequeñito espacio y lograr entretenerte (≧◡≦) ♡.

¡ si no te gusta algo puedes comentarlo de manera tranquila y no hiriente !

no copies contenido que no es tuyo, es de mala educación y a la autora le cuesta mucho trabajo idear y redactar sus ideas (╥﹏╥).

si te gustaría hacer una adaptación o algo puedes hablarlo con ella y pueden llegar a un acuerdo.

disfruta tu lectura, recuerda poner la pantalla con descanso visual para que no molesten tus ojitos ('｡• ᵕ •｡') ♡.

sin más, ¡ empecemos ! (⌒ω⌒)ﾉ.

si bien minho siempre parecía estar feliz, no era así la mayor parte del tiempo, había tenido una infancia difícil.

en sus primeros 5 años de edad, fue prácticamente criado por sus tíos, ya que sus padres acababan de iniciar su empresa y necesitaban tiempo para estabilizar su inversión.

este fue el motivo de que minho fuera expuesto a cosas que ningún niño debería ser expuesto. esa casa era un inferno para él.

el matrimonio de sus tíos no daba más, todos los días eran gritos, peleas y golpes; minho no entendía bien qué pasaba, y no estaba seguro de que eso fuera malo, así que no le tomó la suficiente importancia.

lo cuál lo llevo a su terrible destino, venía de jugar con el hijo del vecino cuando llegó al hogar, siendo recibido por un rotundo silencio.

se extrañó, en esa casa había todo menos tranquilidad. buscó a su tía por todas partes, la cocina, la sala, el baño, pero no estaba.

subió las escaleras para llegar a la habitación de la mayor, y así contarle a qué había jugado ese día. pero la encontró, encontró a su tía tirada en el piso con una gran mancha de sangre, no había rastro de su tío pero sabía que había sido él.

corrió, corrió hasta que sus piernas ardían, no podía ser, ¿verdad?, su tía estaba bien...

al borde del río, llevó sus manos a sus ojos de los cuales caían muchas lágrimas, se detuvo a vomitar un momento, se le había quitado el apetito y sentía su estómago apretarle.

luego de tranquilizarse, caminó lentamente a la estación de policía, le contó lo que había visto al primer oficial que vio y luego lo llevaron a su casa, a su verdadera casa, con sus padres.