Bienvenidos a Brugmansia

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Deyna y sus nuevas amigas se dirigían hacia la cafetería de la universidad, era muy grande y contaba con instalaciones casi nuevas, se sentía cómoda y sobretodo Yesenia le había hecho que se interesara en el hospital psiquiátrico, al llegar a la cafetería se formaron en la fila para ordenar, la cafetería era muy grande y sus paredes blancas y con algunos detalles en color azul con reconocimientos e incluso fotos de la escuela la hacían ver mucho más acogedora, pero algo capto la atención de Deyna, un ventanal donde se podía observar la fachada de Brugmansia, se perdió por completo unos segundos hasta que la voz de Aline la trajo al mundo real.

-Deyna, ¿Qué es lo que vas a ordenar? –Aline estaba observando el menú que se podía ver en la pared frente a ellas. –no lo sé, tal vez una hamburguesa con papas –se encogió de hombros pidió su comida; después de unos cuantos minutos las cuatro tenían su comida, buscaron una mesa para sentarse y por fin disfrutar sus alimentos.

Aline y Alison estaban platicando sobre la fiesta que tendría lugar en la noche, Deyna solo comía y las escuchaba, Yesenia saco uno de los folletos que se les dio al medio día, mientras lo leía comía sus papas a la francesa. –¿Ya vieron todas las reglas absurdas que hay? Parece que estoy en una prisión, además la universidad es para disfrutar de nuevos amigos, no para estar de presos –termino de hablar y en seguida se escucharon las risas de las otras chicas –valla al fin tengo a alguien que me entiende –dijo Deyna dándole una mordida a su hamburguesa- estoy de acuerdo –se escuchó la voz de un chico, se sentó a lado de Yesenia y la saludo de beso en la frente- hola, disculpen por sentarme sin permiso, soy Sergio, el novio de Yesenia –nos sonrió y comio una papa a la francesa –ellas son mis nuevas amigas –Yesenia iba presentando a cada una de las chicas, ellas solo saludaban amablemente –oye ¿Si vamos a ir a investigar en la noche? –volteo a ver a la chica de lentes y ella solo asintió- por supuesto, tengo muchísima curiosidad.

Después de unos minutos y que todos terminaron de comer, se acercaron dos chicos más, saludaron a las chicas –oye Sergio, ya está todo listo para la noche, los veremos en la reja abierta –se fueron, Deyna volteo a ver a Yesenia, ya que tenía un pequeño presentimiento –¿Irán a Brugmansia? –trato de hablar lo más bajo que podía, ya que no quería arruinar los planes de su nueva amiga y de los demás chicos, Yesenia la volteo a ver y con el mismo tono de voz le contesto –así es, ¿Te gustaría venir? –aunque ya sabía la respuesta, claramente en sus ojos se podía ver la curiosidad por ese lugar –claro, me encantaría.

Después de la comida todos se fueron a sus respectivas habitaciones, Deyna y Yesenia ya se habían puesto de acuerdo a qué hora verse para ir al "lugar prohibido" según la universidad, ambas sabían que estarían rompiendo algunas reglas, pero eso poco les importaba, su alma de aventureras era mucho más fuerte que ellas, además no estarían solas, estarían con tres chicos que seguro las protegerían ante cualquier peligro, solo había un pequeño problema, Aline y Alison no estaban enteradas de su pequeña aventura, no las querían involucrar ya que ambas chicas eran becadas por poseer un promedio excelente.

Eran las nueve de la noche, Aline y Alison se adelantaron a la fiesta de bienvenida que se realizaría en el auditorio de la universidad, Deyna y Yesenia las "alcanzarían" más tarde, Yesenia ya tenía prepara una pequeña mochila con todo lo necesario para su "gran" aventura, agarro sus cosas y salió en busca de Deyna, ella ya la estaba esperando en la recepción del edificio –hola Deyna ¿Lista? –Sonrió y ella solo asintió, salieron lo más discretamente posible hasta llegar a la reja, en ese lugar ya se encontraban los 3 chicos de la tarde, uno por uno fueron saliendo, Yesenia le dio una linterna a Deyna, el hospital psiquiátrico no estaba tan lejos, caminaron por un par de minutos, en medio del bosque que rodeaba al hospital, finalmente después de caminar unos cuantos metros llegaron al tétrico hospital, en la entrada había varios carteles que decían "Prohibido el paso" "Propiedad privada" o incluso "obra en construcción" pero más que darles miedo, eso hizo que se intensificara su deseo de pasar, la parte que se había demolido era la sección de dormitorios, pero algo que a los 5 chicos se les hizo extraño, era que la maquinaria para la construcción y demolición parecía que se había abandonado repentinamente, ya que se podía observar como el cemento, varillas, permisos, ladrillos, etc. seguía en ese lugar, como si el tiempo se hubiera detenido.

Los 5 chicos cruzaron la reja, que se encontraba oxidada por el paso del tiempo, cada uno tenía su linterna, teniendo cuidado por donde pisaban, ya que había demasiadas cosas tiradas en el piso, Deyna camino hasta el interior del majestuoso hospital, seguida de Yesenia y los chicos, al momento de mover su linterna, le dio la impresión de ver como una de las viejas puertas se cerraba, pero no le dio importancia ya que el viento soplaba fuerte esa noche.

-Chicos, ¡vengan! –esa era la voz de Yesenia, quien había entrado a lo que parecía ser la oficina principal, ya que en ella se encontraba un viejo escritorio con una máquina de escribir, la cual tenía una hoja, por el paso del tiempo estaba cubierta de polvo, Sergio agarro la hoja y soplo en ella, era la hoja de ingreso de una persona que al parecer padecía esquizofrenia, su nombre no era muy legible, pero su apellido sí, era "Algora", tenía un número de paciente 6607, su edad, era algo joven para estar en un hospital, ya que solo contaba con 10 años y tenía un número telefónico para emergencias el cual terminaba en 4114, Yesenia saco su teléfono celular y le tomo una foto a aquella hoja; siguieron revisando algunos libros, hasta que el sonido del celular de Deyna los hizo detener todos sus movimientos, ya que dicho sonido resonó en cada rincón de aquel edificio, provocando un eco espeluznante.

-Chicos, ¡vengan! –esa era la voz de Yesenia, quien había entrado a lo que parecía ser la oficina principal, ya que en ella se encontraba un viejo escritorio con una máquina de escribir, la cual tenía una hoja, por el paso del tiempo estaba cubier...

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