CRIMINAL || 💉|| K.S.J × M.Y.G

Capítulo 4

Seokjin estaba entrenando en su gimnasio privado, parecía que quería romper el saco de boxeo. Se encontraba sin polera dejando mostrar su tan fuerte espalda y abdomen, solo con su short deportivo que le llegaba hasta las rodillas. No paraba de pensar el candente beso que se había dado con Yoongi y en los toqueteos que se habían hecho inconscientemente, de verdad que eso fue tan excitante para Seokjin que lo que hace era quitar la calentura golpeando el saco, tratando de controlarse.

—te ves tenso seokjin.— dijo una voz detrás de él bastante conocida.

Seokjin se dio vuelta y con una mirada neutral lo mira de mala gana al darse cuanta de la voz, ahora tenía que soportar a este tipo un buen rato.

—¿qué haces aquí, Ken?— preguntaba usando el apodo que le había dado años atrás, continua entrenado, el saco recibía todo de él.

—solo venia a verte jinnie.— confesaba.

—no me llames por ese estúpido apodo.— dijo sin darse vuelta y continuando con lo suyo. —dime la verdad Ken, ¿a que Vienes?—

El tipo apodado Ken ríe un poco.

—quería preguntarte sobre el chico.—

—¿el chico?, ¿Hablas de yoongi?— dice mientras se da vuelta camino a las duchas.

—si, ¿qué hace contigo?—

—él me va a pagar la cuenta de jungkook, lo uso para que el idiota de kook sufra por su noviecito.—

—tan cruel, ¿no eran trescientos millones?— preguntaba.

__exacto. — afirmaba.

—¿cómo piensas que te pagará esa cantidad en solo un mes?—

—se las arreglará, es su problema si no quiere morir.— toma su toalla.

Ken se le queda viendo con una mirada de deseo en sus ojos.

—¿me puedo duchar contigo, Jinnie?—

Jin para en seco, se queda un rato en silencio para luego contestar.

—vete al diablo.— dijo en un ensamblante serio.

—oh vamos jinnie, te extraño.— puchereaba.

—dije que no, no seas infantil.—

Dicho eso se fue azotando la puerta.

Ken se quedó ahí parado.

—sigue siendo difícil...—

[...]

—mierda...— decía entre el beso Yoongi mientras se sostenía de los fuertes hombros que portaba Seokjin.

Si, se estaban volviendo a besar a pesar de que Yoongi había elegido los tres meses, pero Yoongi se dejaba ahora, se dejaba besar con ese hambre que caracterizaba a Seokjin.

¿Por qué?, solo Yoongi tenía una respuesta para eso.

Seokjin necesitaba con desesperación esto, sus labios sobre los de Yoongi era una maldita delicia que quería repetir una y otra vez, ya que, no estaba siendo para nada gentil con su boca, le estaba follando la boca con hambre, tiraba algunas veces del sensible labio inferior del pálido sacándole jadeos divinos al oído de Seokjin.

Las ganas no le faltaron a Seokjin, porque mientras distraía a Yoongi con fuertes besos, sus manos descendían por la cintura del pálido hasta sus caderas apretandolas un poco y apegandolo más a él.

Yoongi había soltado sin querer un gemido.

—tan jodidamente sexy...— susurraba en sus labios chocando sus frentes.