Capítulo 7

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Quiero irme de aquí, quiero largarme y hacer mi vida como lo hacen las personas normales, no tener que pertenecer a nadie y sin siquiera dudarlo no tener una pareja por un buen tiempo. Quizás debería ir a terapia, no quiero volverme loco porque no es normal todo esto, joder, no sabes cuanto te odio maldito Jungkook. Y sinceramente Seokjin no me ayuda para nada, ya..., ya pagué todo sobrandome dos días exactos, lo que significa que ya no estaré en este lugar, pero a lo que voy es que Seokjin no quiere que me vaya, lo cual es muy confuso.

Estando todo ya pagado, sin nada que hacer, ahora podía ser libre y salirse de todo esto. Sin embargo, Seokjin al anterarse no dijo palabra alguna, y Seokjin era el boleto de salida.

Suspiré intranquilo abriendo la maldita puerta de la habitación de Jungkook, vaya, de verdad que no lo habia visto durante mucho tiempo. Estaba hecho mierda.

Al verme abre aún más sus ojos.

—Oh, Yoongi...— pronunciaba.

De verdad que quería aplastarle la cara.

—¿Es en serio?, ¿"Oh, Yoongi"?, ¿No quieres decirme nada mas? — me cruzo de brazos.

Mis dientes se apretaban al ver que Jungkook no dice nada manteniendo su postura derecha como si nada, era el puto colmo.

Rápidamente me dirijo hacia él echando humo por las orejas, y una vez que lo tengo lo suficientemente cerca lo tomo de su camisa.

—¿Eres un desgraciado, ¿lo sabias, no? —mi puño estampa su mejilla, pero él seguía sin decir una palabra.

Jungkook estaba en el suelo con su mejilla lastimada totalmente ido.

De verdad, tenía que ser una maldita broma.

—¡tsk!, no sé porqué me molesto en hablar, solo eres un egoísta que piensa en sí mismo... — camina hacia la puerta dispuesto a irse. —Terminamos, Jungkook.—

Y en esos momentos Taehyung salió de su escondite corriendo hacia Jungkook abrazándolo de inmediato.

—hey, hey..., Ya kookie, no tienes que sentirte mal.— consolaba Tae acariciando la nuca de aquel que rompía llanto.

—p-pero tiene razón, soy una mierda, una mierda sin corazón...—

[...]

—¡que ya voy!— gritaba Seokjin caminando a paso rápido ya que tocaban y tocaban la puerta de su oficina. —¿qui-

Se quedó callado al ver a Yoongi ahí, con la cabeza gacha y sus manos hechos puños. Parecía furioso.

—¿hmm?, hey, cariño, ¿estás bien?, ¿ya viste a Jungkook?— preguntaba Seokjin acomodando su corbata.

Yoongi alzó su vista, oh, sus ojos no tenían ni una pizca de brillo, o que estuvieran vivos siquiera. Estaban cristalizados.

Empuja a Seokjin adentro de la oficina atrapando esos belfos grandes contra los suyos con desesperación, sorprendiendo al mayor, haciendo que caigan en uno de los sillones del mayor, Yoongi encima de su mayor rozando peligrosamente sus miembros. Totalmente apresado a la trampa de Yoongi.

Seokjin logra separarse con dificultad tomando de la cintura al pálido.

—tranquilo, ¿me dirás que sucedió?— preguntaba nuevamente con la respiración entre cortada.

El menor rueda los ojos volviendo a besar a ese mafioso con locura desabotonando la costosa camisa de Seokjin con rapidez.

Dios, esto se sentía bien, tan bien que estaba mal. Seokjin no se permitía que jugazen con él, pero Yoongi tenía alguna clase de hechizo que hacía que su excitacion subiese a niveles peligrosos, mierda, no.

—Yoongi, basta. No haremos nada hasta que me cuentes que demonios pasó con Jungkook.— derrotado dice sosteniendo su rostro y viéndolo fijamente.

El menor otra vez no dice nada.

Pero no para sus movimientos tratando de sacarle el cinturón a Seokjin.

—No quiero hablar de él.— fríamente contestó.

Seokjin suspira rendido, acercando el rostro de Yoongi al suyo con suavidad fundiendose en un beso profundo que podía demostrar tantas cosas, maldición. Se supone que lo estaba consolando, ¿no?

Pero no quería pensar en sus sentimientos por Yoongi, solo quería ayudarlo, por ahora no haría nada hasta que Yoongi se logre tranquilizar.

Si, definitivamente se había enamorado de este chico.















































Estamos cerca del final,,

CRIMINAL || 💉|| K.S.J × M.Y.GDonde viven las historias. Descúbrelo ahora