Dos Bladers Enamorados [Free De La Hoya x Tú]

♦12♦

Título:
Declaración
*•*•*

Narra Martina

Free: Recuerda, no me vencerás siendo el Blader que eres

Y se fue...

Martina: Shu, ¿Est- (fui interrumpida)

Shu: Vete Martina

Martina: Pero Sh-

Shu:¡Dije que te vallas Martina! Quiero estar solo

Martina: Está bien (dije, y me fui)

Narro yo

Shu aún seguía en el suelo pensando en cómo pudo vencerlo de un solo golpe, ¿Tan débil era? Pues, eso era lo que él pensaba

Llego el dueño de los Ranging Bulls, Theodore Glass, y se posó a un costado del albino. El tricolor le preguntó

Theodore: ¿Quieres volverte un Blader más fuerte?

Shu: ¿Tu qué crees?

Theodore: Hay un grupo de Bladers en México llamados "Snake Pit" ahí los Bladers se vuelven mucho más fuertes ¿Quieres ir?

Shu: ¿Me darás la autorización?

Theodore: Claro, si tú quieres ir, ve

Shu: De acuerdo, pero antes, ¿Puedo llevarme a alguien?

Theodore: ¿Puedo saber quién es ese alguien?

Shu: Ese alguien es Martina Cejas

Theodore: Claro, llévala

Shu: De acuerdo, iré a empacar

Theodore: Ve

El albino subió a la habitación donde el dormía, hizo las maletas y le fue a avisar a Martina

Subió al otro piso y fue a la habitación de la peli-celeste, por suerte para el, el rubio no tenía condiciones en el grupo, eso quiere decir que tiene su propio entrenamiento y no estaba en la habitación. Tocó la puerta y luego de escuchar un "pase" abrió la puerta y entró

Narra Shu

Martina: Shu ¿Que sucede?

Shu: Martina, siento haberte tratado así, estaba confundido

Martina: Si, debiste haberlo estado, ser derrotado por un solo golpe es algo raro tratándose de ti

Shu: Si... Martina

Martina: ¿Si?

Shu: Iremos a México a un grupo llamado Snake Pit, así nos volveremos más fuertes

Martina: ¿Por qué no me preguntaste? Yo aún no decidí nada, además le tengo que preguntar a Theodore

Shu: yo ya le pregunté y me autorizó a poder llevarte, ¿Quieres que haga tus maletas?

Martina: Si, pero ¿Y Free?

Shu: ¿Y por qué te importa?

Martina: Solo digo, ya estábamos haciéndonos amigos (dijo en un tono decaído que enseguida noté)

Shu: ¿Por qué?¿No estás contenta Martina?

Martina: ¿Eh? ¿De qué hablas? (Dijo, fingiendo una sonrisa que se notaba a kilómetros que era falsa)

Shu: Ah, bueno ¿Hacemos tus maletas?

Martina: Tu ve a hacer las tuyas y yo hago las mías

Shu: Yo a las mías ya las hice