Los rizos rubios de la pequeña estaban desarreglados, sus ojos verdes reflejaban cansancio y terror, arrastraba su osito de peluche que le había regalado su abuela Amy hacía la habitación de sus padres, quienes no dormían, por que los señores del Tiempo no duermen, abrió la puerta y vio a sus padres actualizando sus diarios para evitar Spoilers, el nacimiento de su hija los había vuelto más unidos pero el destino de River seguía siendo ir a esa biblioteca, también se notaban lo cansados que estaban, pero lo valía, eran unos exelentes padres para su pequeña niña de 4 años llamada Melody, como River, el Doctor estuvo muy nervioso el día de su nacimiento, caminaba por el hospital de punta a punta, ni Clara, su actual acompañante, podia tranquilizarlo, ni los Pond, que con ayuda de River y algunos movimientos de la TARDIS con el manipulador del vórtice, volvieron a su epoca real.
-Mels-dijo River acercandose a ella-¿Qué pasó?-
-Tuve un sueño feo-dijo ella abrazando a su osito-¿Me cuentan una historia?
River miró al Doctor, quien sonreia, tenia la historia perfecta, cargó a su hija, vio a River con su mirada de "Yo me encargo", la rubia asintió antes de darle un beso en la frente a su hija y uno en la mejilla a su esposo.
-Haber Mels, voy a contarte una historia-empezó el castaño al acostar a Melody en la cama-trata de un hombre muy viejo que tuvo miedo muchas veces, pero te diré algo:el miedo es un superpoder. Te hace mas fuerte, mas rapido, mas hagil, el señor del tiempo tuvo que hacer una decisión dificil, pero tuvo compañia, nunca estuvo solo, los Daleks le temian-habia agarrado una TARDIS de juguete y un Dalek de juguete y los empezaba a mover haciendo que Melody riera-ves, ya te hice reir, ¿Te sientes mejor?-
-Sip-dijo ella con una sonrisita, el también sonrió y la ayudó a arroparse.
-buenas noches, mi pequeña estrella-dijo el dandole un beso en la frente
-buenas noches papi-susurró Melody antes de quedarse dormida abrazando a su oso de peluche.
El Doctor sonrió y volteó para salir, pero para su sorpresa, hay estaba River, con una sonrisa de lado.
-Eres muy buen padre-dijo la rubia abrazandolo por el cuello
-tu padre me dio unos consejos, me dijo que no queria que su nieta estuviera loca-respondió el sonriendo y tomandola de la cintura. Ambos miraron a Melody, quien seguia durmiendo y sonrieron melancolicamente, luego se separaron y el Doctor apago la luz.