cuatro

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Estrés y frustración. Esas son las dos únicas cosas que Taehyung había sentido el resto de la noche. Él y Jungkook habían decidido reunirse a la una y media de la tarde en un parque cerca de la casa de Taehyung, y no podía estar más nervioso.

Al igual que para el meet and great, buscó en su armario pero no encontró nada. Miró a través de la ropa una y otra vez, antes de finalmente darse por vencido y decidirse por un pantalón de vestir negro y una camisa azul con líneas blancas. La camisa hacía que sus músculos fueran muy fáciles de ver, y se sintió contento con la elección.

La duda aún permanecía en su mente mientras caminaba por la calle hacia el parque. Pasó casa tras casa, su ansiedad crecía cada segundo que pasaba. "Cálmate Tae, estás bien". Murmuró para sí mismo, tratando de relajarse.

Corrió por la calle y entró en el pequeño parque, lleno de bancos y un pequeño parque infantil en el extremo opuesto. Recordó que Jungkook dijo que lo esperara en un banco, y que él estaría allí en breve. El castaño se sentó en una gran mesa de picnic cerca de un pequeño jardín lleno de diferentes tipos de flores.

Se quedó mirando las flores, examinando cada una cuidadosamente. La mayoría de las flores eran pequeñas y amarillas, pero había algunas azules que llamaron su atención. Se preguntó cómo llegaron allí, ya que solo había unas dos azules dentro de los probablemente cientos de otras flores amarillas.

"Oye." Una voz habló, haciendo que Taehyung se diera la vuelta rápidamente. Conoció esa voz al instante, estaba impresa en su cerebro. Se volvió y, efectivamente, era él. Jeon Jungkook.

El chico sonrió brillantemente cuando Taehyung dio unas palmaditas en el asiento a su lado. Se sentó y se volvió hacia Taehyung, que lo miraba fijamente.

"Entonces, hola. Soy Jungkook". Taehyung se rió entre dientes y asintió. "Wow, ¿en serio? No lo sabía. Soy Taehyung". Se burló, haciendo reír al chico más joven.

"Realmente estás aquí". Taehyung exhaló, su voz ronca de asombro. Jungkook levantó una ceja y ladeó la cabeza hacia un lado.

"¿Pensaste que no lo mostraría?" Él hizo un puchero después. Taehyung se rió entre dientes y sonrió, mirándolo con cariño. "Bueno, eres súper famoso". Taehyung señaló, lo que hizo que Jungkook asintiera con la cabeza.

"No demasiado famoso para no tener una cita contigo". Jungkook volvió a sonreír, mostrando sus dientes de conejo. Taehyung se sonrojó un poco, pero rápidamente lo ocultó, no queriendo mostrar su afecto todavía.

"Te ves aún más guapo que antes". Dijo Jungkook, sonriendo al chico mayor. Taehyung sonrió ampliamente ante el cumplido y se dio la vuelta, mirando hacia el patio de recreo frente al parque.

"Gracias-" Se detuvo, notando a una anciana que lo estaba mirando. La mujer tenía una expresión de confusión mezclada con disgusto en su rostro. Taehyung no sabía qué hacer, así que solo le devolvió la mirada. Los ojos de la mujer se abrieron una vez que hizo contacto visual. Después de un par de momentos incómodos, comenzó a caminar nuevamente por el camino empedrado del parque.

"Eso fue raro." Taehyung murmuró, sacudiéndose la intensa mirada que le había dado. Jungkook se volvió y miró a la mujer que ahora estaba casi cerca del patio de recreo. Levantó las cejas antes de volverse hacia el niño mayor.

"¿Qué quieres hacer?" Preguntó con una linda voz, haciendo que el otro chico sonriera. Taehyung se mordió el labio por un momento, con los ojos vagando por el parque mientras pensaba. "Hay una panadería en la calle, ¿quieres ir?"

Jungkook se rió y asintió. "¡Amo las cosas dulces!" Se levantó de un salto, claramente emocionado. Taehyung se rió entre dientes mientras comenzaba a caminar, el chico más joven lo seguía. "Lo sé." Taehyung se encogió cuando las palabras escaparon de su boca, no quiso decirlo. Afortunadamente, Jungkook solo se rió y no respondió.

Pronto llegaron a la pequeña panadería. La habitación estaba llena del suave aroma a chocolate mezclado con pan recién horneado. Taehyung cerró los ojos mientras olfateaba el aire, sonriendo contento. Se acercó al mostrador, donde había magdalenas y donas en exhibición.

"¿Qué quieres?" Taehyung le preguntó al chico vertiginoso, que estaba saltando arriba y abajo en su lugar. Jungkook entrecerró los ojos mientras miraba el menú. "¡Un muffin de chocolate!" Él chilló, su voz se rompió en la palabra 'muffin'. Se cubrió la boca con las manos y abrió los ojos con vergüenza.

Taehyung se rió entre dientes, murmurando un tranquilo "qué lindo" antes de caminar hacia el hombre detrás del mostrador. "Oye, ¿puedo comprar dos magdalenas de chocolate, por favor? Una para mí, otra para mi cita". Taehyung sonrió mientras señalaba al todavía sonrojado Jungkook detrás de él.

El cajero, que estaba mirando hacia abajo, asintió y escribió la orden. "Serán las cinco con cincuenta..." La voz del cajero se apagó cuando levantó la vista. Taehyung frunció las cejas al hombre de mediana edad. El cajero miró a Taehyung, luego a Jungkook (a quien Taehyung todavía señalaba) y luego a Taehyung.

"Cinco cincuenta." Terminó su oración, su voz ahora sonaba mucho más molesta. Taehyung levantó una ceja antes de agarrar su billetera y sacar el dinero. Cambió su dinero por la bolsa de magdalenas. Sin embargo, antes de que pudiera agarrar la bolsa, el cajero la dejó caer y cayó al suelo.

"Monstruo." El cajero susurró cuando Taehyung recogió la bolsa. Taehyung frunció las cejas al hombre, pero pronto sacudió la cabeza y se dio la vuelta. "Comamos." Le dijo a Jungkook, que lo estaba mirando con una cara confundida.

Se dirigieron a una pequeña mesa en la esquina de la tienda y se sentaron uno frente al otro. "Me pregunto cuál fue el problema de ese tipo". Taehyung murmuró mientras sacaba las dos magdalenas. "Es porque ambos somos tipos y dijiste que soy tu cita". Jungkook dijo con voz monótona.

Taehyung lo miró y suspiró. "Tienes razón. Idiota homofóbico". Puso los ojos en blanco antes de entregarle a Jungkook su panecillo. Jungkook aceptó el panecillo con una sonrisa, antes de morderlo.

Los dos muchachos hablaron de cosas aleatorias mientras comían, y de vez en cuando miraban para ver al cajero que les daba una mirada mortal. Pronto terminaron y Jungkook le dijo a Taehyung que lo acompañaría a su casa porque era un caballero. (También porque su manager aún necesitaba recogerlo).

"Así que." Taehyung comenzó mientras se acercaban a su puerta principal. "Esta es mi casa." Jungkook se rió y miró al chico más alto. "Entonces mi trabajo aquí está hecho". Él sonrió antes de estirar los brazos y preguntarle a Taehyung con los ojos. El niño mayor sonrió y lo abrazó con fuerza, oliendo la colonia que llevaba puesta. Taehyung decidió que sería su nuevo aroma favorito.

Los dos chicos terminaron el abrazo y se sonrieron el uno al otro. "Esto fue increíble. ¿Me enviarás un mensaje de texto cuando llegues a casa?" Preguntó Taehyung, abriendo su puerta ligeramente. Jungkook sonrió ampliamente y asintió, antes de despedirse. Taehyung le devolvió el saludo antes de entrar a su casa y cerrar la puerta.

Suspiró contento y se apoyó contra la puerta. En toda su vida, nunca había esperado tener un día perfecto. Un día donde todo salió bien y cayó en su lugar. Bueno, hoy había demostrado que estaba equivocado. Fue más que perfecto, más allá de lo que Taehyung podría haber imaginado.

Podía sentir algo creciendo dentro de él que nunca antes había sentido. Se sacudió, suponiendo que solo eran mariposas. Buscó en su mente, buscando la palabra que describía la situación actual. Después de unos momentos, pensó en una palabra que había escuchado mucho recientemente, pero se sacudió porque no le quedaba bien. La palabra permaneció en su mente por el resto del día, incluso justo antes de irse a dormir.

La palabra era demasiado espeluznante, lo hacía sonar como un bicho raro. Taehyung no era un acosador, solo un chico enamorado. Un chico que no aceptaría que la palabra en la que estaba pensando describía lo que tenía perfectamente, hasta el núcleo.

Se negó a creer que tenía una obsesión.

Infatuation; TaeKookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora