Shiro The Anormal Monster

Capitulo 23

Capitulo 23

Los gritos de la tribu Haulia hicieron eco dentro del Gran cañón Raisen...

Las figuras de los hombresconejo desesperados mientras corrían para ocultarse detrás de las rocas podían verse. Si mirabas alrededor, podías ver 20 hombresconejo ocultándose. Si lo combinabas con los que ya estaban ocultos, había alrededor de 40.

En el cielo, bestias demoniacas voladoras (Que eran raras incluso dentro del abismo) miraban a la tribu de hombresconejo asustados. Si se preguntara, su apariencia era similar a la de esos monstruos llamados Wyvern. Tiene un largo de alrededor de 3-5 metros, garras agudas y colmillos, además de una lanza aguda que se extiende desde sus largas colas similares a la estrella de la mañana.

—H-Hyveria...

Sobre su hombro, la voz temblorosa de Shia podía escucharse. Parecía que esas criaturas como Wyvern eran llamadas "Hyveria". Había seis de ellas, intentando capturar a la tribu de hombresconejo mientras daban círculos en el cielo.

Finalmente, una de ellas tomó acción. Después de rotar en el cielo, se dirigió hacia una de las rocas donde algunos de los miembros de la tribu de hombresconejo estaban y la golpeó con su cola impulsada por la fuerza centrífuga. Junto a un sonido ensordecedor, la roca fue destruida y los hombresconejo salieron gritando.

Como si dijera "Los he estado esperando", el Hyveria comenzó a devorar las presas indefensas abriendo sus fauces. Apuntó a dos hombresconejo. Lo que fue dejado fue un cuerpo sin su cintura y un pequeño chico inmóvil que el hombre de la tribu intentó proteger.

Viendo esa escena, desesperación apareció en los demás miembros, ya que no sabían cuando serían presas del Hyveria... pero eso no fue lo que sucedió.

La razón era que había alguien que fue contratado para ayudarlos, el monstruo anormal que escapó del abismo...

-Bang-

Fue la única palabra que salio de la boca del peliblanco, para que momentos después varios aces de luz roja salieran de Nemesis destruyendo los cuerpos de los lagartos, mientras que el tenia una sonrisa que transmitia cualquier cosa menos confianza

Los hombres conejo al escuchar un ruido que parecía a los de las bestias se asustaron mas y voltearon hacia donde provenia tal sonido, allí lo vieron, vieron a tres personas sobre un vehiculo que se movia a alta velocidad

Entre las tres figuras, una de ellas la conocían bastante bien, desaparecio repentinamente por lo que fueron a buscarla, Ella sentía que era su falla que la tribu estuviera en el estado que está ahora; a pesar de que lo intento ocultar con su alegría, su expresión mostraba su angustia. Pensando en algo temerario, repentinamente había desaparecido. En ese momento, los Haulia cuidadosamente intentaron buscarla. Pero a pesar de que pensaron que serían aniquilados antes de encontrarla...

La chica con orejas de conejo venía a alta velocidad. Sus gritos hicieron eco en el cañón. La tribu de hombres conejo gritó "¡¿Shia?!" mirando hacia ese espectáculo increíble con sus ojos completamente abiertos

Esa chica agitó sus manos desde el vehículo. Podía verse alegría en su rostro. Los hombres conejo hicieron expresiones como si no creyeran lo que veían.

-Todos... ¡Traje ayuda...!-

Cuando escucharon su voz, finalmente creyeron que era real, y todos gritaron su nombre

--¡¿Shia?!—

Shiro se estaba irritando, ¿La razón? Shia luego de confirmar la seguridad de su familia se levanto de la moto, inclino su cuerpo hacia el peliblanco apoyando sus bien proporcionadas armas contra su cabeza, eso no habría molestado a Shiro, lo que si le molestaba era que la coneja estuviera saltando arriba y abajo con un "PiokoPioko", por lo que Shiro pensando rápidamente utilizo sus colas, una la utilizo para taparle la boca y la otra para sujetar sus brazos y su cuerpo atándola, para luego voltearse lentamente y mirar a la chica a los ojos, con unos ojos con ira pura