Aún veo sus rostros...

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Desperté con nerviosismo, los ojos llorosos y un ligero dolor en el cuerpo. Había tenido una pesadilla, una donde volvía a verlos, ya eran cinco días seguidos, May dijo que sólo debía esperar a que saliera de mi cabeza y todo estaría bien, pero ya han pasado meses desde ese dia, pero aún podia verlo claramente, como si estuviera vivo aun.
Baje a la cocina, donde ya me esperaba un olor muy peculiar, un desayuno perfecto, hot cakes, tocino y un perfecto chocolate caliente con 5 mini malvaviscos asomándose por la cubierta.
Me senté y tome mi plato, comenzando a comer.

Peter: May, enserio, eres la mejor cocinera del mundo

May: Gracias, Pete. Hoy es un día especial, ¿Recuerdas?

Es cierto, lo había olvidado, hace dos semanas en la Preparatoria habían recibido un informe sobre que se haría un examen de conocimiento, aquel con el mayor puntaje, podría ir a estudiar a una Preparatoria en Paris. Sabía que no lograria ser el más alto, Michelle es más inteligente que yo, así que sabía que si alguien se iría a París sería ella. Aún así debía estar ahí para ella, se convirtió en una muy buena amiga, sinceramente comencé a sentir algo por ella, sin embargo, con todo esto pasando podría ser que nunca la vea hasta después de mucho tiempo.

May: Peter, ya es tarde.

Peter: Si - dije comiendo lo más rápido que pude - Nos vemos, May

May: Se te olvida esto - me lanzo una mochila de un rojo brillante - No querrás irte sin ella

Peter: Por supuesto, gracias May - tomé la mochila y salí corriendo -

La mochila no era nada más y nada menos que la Araña de Hierro, la cual tenía tal modificación, permitiéndome no solo cambiarme sin perder mi ropa, si no también guardar mis libros y cuadernos.

Corri lo más rápido que pude, hasta que me di una bofetada mental por no recordar que soy Spider-Man, pulse un botón brillante en el centro de la mochila y una armadura brillante me cubrió mientras corría, lance una telaraña con cada brazo en lo más alto de dos edificios, retrocedí tensando las telarañas, di un salto y salí volando atravesando media ciudad por los aires, empecé a caer y antes de tocar el suelo, dispare otra telaraña y comencé a columpiarme, después de un par de minutos llegué a la escuela, que para mí mala suerte ya había cerrado las puertas, entre por el techo y me escabulli sin que nadie me viera, cuando estaba en la entrada de mi salón, me quite la armadura, y justo cuando estaba por entrar sentí una mano en mi hombro

Flash: Hola Pito Parker - dijo haciéndome girar para verlo de frente - ¿listo para tu golpiza matutina?

Peter: Oh vamos Flash, tienes el descanso para hacerlo, déjame entrar a clase y luego... - no termine mi oracion ya que Flash ya me había tomado de la chaqueta, cargandome hacia un casillero, encerrándose en el - ¿Enserio? Tenía que ser en uno pequeño, lo que me faltaba

Flash: Adiós, Parker, jajaja - dijo yéndose de forma burlona -

Peter: Bien, era de esperarse, ¿Ahora que haré? - dije para empezar a pedir auxilio - ¡Ayuda! ¿Alguien? ¿Nadie? Bien, entonces no queda de otra - patee la puerta del casillero la cual salió volando, la tomé del suelo y la uni de nuevo, aparentando que aún servía, en casos como este agradezco que los pasillos no tengan cámaras- bien llegaré tarde de nuevo

Toque la puerta de mi salón, donde me recibieron con burlas, el profesor algo molesto me concedió la entrada y me senté en la parte de atrás, ¿Y Ned? Bueno, tal vez se quedó dormido, mire a mi alrededor y observé a Michelle, la cual me dedico una pequeña sonrisa, se la devolví.
Las horas pasaron, y las clases eran como siempre, tocaron el timbre indicando el receso, esta vez estaría solo en una mesa.

Juntos los dos (SpiderBug)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora