PRIMER ENCUENTRO

TERCERA PARTE

y sublime admiración, y se sentía poseído de veneración ante aquél que ostentaba el sello divino de la belleza. Leandro era un fotógrafo ( y en el fondo de todo fotógrafo hay un pintor), un artista de la fotografía. De aspecto común y corriente ; sencillo en el trato ; cabello un poco largo , y piel trigueña , de abundantes vellos. Había realizado varias exposiciones tanto en la ciudad como fuera de ella , en especial sobre la naturaleza : paisajes, llanuras, ríos, atardeceres, aves surcando los cielos , y también personas, predominando los jóvenes . Como gran admirador de la belleza en todas sus manifestaciones, embelesado contemplaba a Francisco quien, de vez en cuando, dirigía sus miradas hacia otras direcciones, cuidando así que las demás personas no los sorprendieran y al punto los juzgaran mal . Leandro se daba cuenta que había comenzado a amarlo con fuerza arrolladora. Mirar a Francisco era para Leandro como una oración . Se sentía purificado . Encarnaba para él el sosiego, la paz, el orden.

- Por eso te amo - se lo confesaba - , porque tengo una necesidad enorme de pureza. Te deseo con toda mi alma, porque eres un signo de rectitud.

Pasaron uno, dos, varios buses, hasta cuando ya no pasó ninguno más , teniendo Francisco que dirigirse a tomar otro de una línea diferente. Como se hacía tarde, abordó el primero que pasó . Esa noche Leandro se sintió el hombre más feliz, y dio gracias a Dios por tanta dicha.