Capítulo 1

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¡Atrápalo Draco! ¡No dejes que se escape!

_¿Qué crees que estoy haciendo, Flint!-decia Draco mientras corridas tras un sujeto.

_Sólo atrapa al desgraciado-dijo Marcus algo agitado mientras intentaba seguir el paso a su compañero.

_¡Vuelve aquí desgraciado!-gritaba Draco tras aquel hombre que corría como si fuera un maratonista.

_¡Vete al diablo imbécil!-grito el sujeto tras meterse en un callejón.

Draco corrió y se metió en el callejón buscándolo con la mirada, sacó si varita del bolsillo caminado algo agitado por la intensa corrida.

_Sal de ahí desgraciado, será mejor que te rindas, o tendrás serios problemas.

Camino buscando en los arrendadores intentado encontra a aquel hombre. Quito una lonas, pero ahí no estaba, un ruido lo alertó y se dio la vuelta rapidamente.

_Sera mejor que te rindas, o juro que patiare tu trasero de una manera que ni imaginas.

_¡Aurorus!-gritó el hombre arrojando un hechizo contra Draco el cual esquivó.

_¡Protego!-gritó Draco soltando su varita para arrojarse contra el. Hijo de tu puta madre-insultó Draco mientras le propinaba un puñetazo en la mandíbula.

Ambos pelearon en el suelo durante unos minutos hasta que Marcus llegó junto a ellos, para hechizar aquel delincuente.

_¡Imovilus!-dijo Flint.

_Era hora que llegarás, ¿dónde diablos estabas Marcus?

_Ah, Me detuve a tomar un té en el camino-contestó algo agitado intentado recuperar el aire.

_Deberías dejar de comer, creo que eso está afectado tu rendimiento.

_Yo no soy él que come, desde que Lavander está embarazada me dan ganas de comer lo que ella come, No puedo romper el corazón de mi esposa.

_Claro Flint, lo que tu digas. Éste desgraciado me ha hecho correr como una damisela en apuros.

_¿Quién es el que debe dejar de tragar?-preguntó Marcus cruzandose de brazos.

_¿Ya viste esto?-señalo sus brazos. Esto es puro fierro y músculos, no como tu.

_¿Me estás llamando gordo?-preguntó Flint mirando a Draco enojado.

_No.

_Ya pasarás por eso cuando tengas familia, la vida de casado es muy pesada y no estoy gordo, estoy formado por músculos grandes. 

_Lo que tu digas, ¿te encargas de él?-señalo al tipo inmovilizado en el suelo.

_Claro yo lo haré. Oye no te olvides de la cena el viernes.

_Ahí estaré, tu mujer sabe cocinar un buen asado al horno, ¿habrá tarta de melaza?

_Claro, sabes que ella la hace especialmente para ti, ella te debe mucho.

_No es para tanto.

_Claro que sí. Tu me presentaste con ella, jamás imaginé estar casado y apuntó de ser padre, Draco te debo mi felicidad hermano.

_Ya basta, Me harás llorar.

_¿Enserio?

_No. Sólo bromeo Marcus, pero agradezco tus palabras, y ya sabes ese campeón es mi ahijado.

_Por supuesto que sí. No lo confiaría a nadie más-sonrió Marcus.

_Debo irme, quedé con Theo, hoy es su inauguración de su restaurante.

Papá suplente Donde viven las historias. Descúbrelo ahora