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Omnisciente

Para suerte de Rose, había un gran pizarrón con todos los horarios impresos y pegados, supone que era para aquellos despistados como ella que no saben ni en dónde está su cabeza.

Le tocaba ciencias sociales. No sabía que significaba exactamente la asignatura, pero sonaba feo.
Tuvo que caminar un gran tramo y buscar como loca los números de las aulas. Hasta que dió con la correcta.
Para su mala suerte se veían concentrados haciendo un trabajo.
Genial, ahora ya tenía un trabajo menos y un retraso en su primer día. Y tan solo en la primera hora.

Toca la puerta y espera unos segundos a qué alguien le habrá. Esos segundos fueron una eternidad.
Entonces la puerta se abrió y dejó ver a un compañero delante de ella y a la profesora observándola desde su escritorio.

Tenía miedo, demasiado.
Cuando iba a hablar una voz a su espalda se adelantó.

- ¿Puedo pasar?.-la voz era de una chica.
La profesora asintió.
- ¿Puedo pasar?.-se animo a decir ella y la profesora solo viró los ojos y asintió.
Se acercó al escritorio y antes de llegar vió a la chica que antes estaba detrás de ella.
Se sentó cerca de la puerta y tan solo llegó, recostó su cabeza en la paleta.

- ¿Qué deseas? -la voz de la profesora sonó delante suyo y ella la miró.

- Tuve un retardo, porque me detuvieron en la entrada.-entraga un papelito que decía "retardo" y una firma de lo que parece ser un tipo de maestro.

- Siéntate y has la actividad del pizarrón. Al final de la clase vienes para anular tu falta.

Ross asiente y se sienta a lado de la chica de hace rato. Saco su cuaderno y empezó a copiar la actividad.

La otra chica ni siquiera parecía moverse. Es más, Ross estaba pensando que había muerto, hasta que de la nada estornudo y alzó su cabeza para limpiar la punta de su nariz con la manga de su suéter.

- Salud. -dice Ross y se escucha un "gracias" muy bajo.

Después de eso volvió a dormir.
Ross termino tan rápido como pudo la tarea, mientras unos cuantos se levantaban para entregarlo.

Cuando por fin se decidió a pararse, tocaron la puerta.
La maestra, cansada, indico que la abrieran y así fue.
Dos chicos parados en la puerta con sudor en su rostro estaban parados en la puerta.

- ¿Podemos pasar?- pregunta el más alto.

- Llegan 15 minutos tarde. ¿Ya para qué entran?

- Por favor, profesora.-vuelve a decir el alto.- el transporte no pasaba.

La profesora hizo un movimiento para que pasaran y fueran a su escritorio.

- Denme sus nombres para poder anotarlos.
Los chicos se acercaron y hablaron en voz baja con la profe.
La mayoría de los alumnos estaban al pendiente de que sucedía.
Hasta la chica que estaba durmiendo se levantó y se reía de ellos.

Pensaron que les iba a regañar más, hasta que se escucha un:
-Pero ustedes no pertenecen ha este salón.

Y todo el salón se soltó a reír, claro que era una risa baja pues no quería que la profesora los regalará.

-¿En verdad?.- pregunta ahora el más bajo.

-Vayan a su salón, jóvenes.- les dice la profesora, que vuelve a su computadora como si nada.

Los chicos, con algo de vergüenza, caminaron hasta la salida.

Ross casi siente pena por ellos, si la situación no le hubiera dado tan igual.
Iba a volver a sus cosas, cuando la chica de a lado volvió a hablar.

-Que idiotas.-su cabeza estaba recargada en su mano y se reía muy bajito.

Ross miró a los chicos y ellos se detuvieron para quedala viendo con mala gana.
La chica parecía sorprendida de que hubiera dicho eso.

- ¿Lo dije o lo pensé?.- pregunta aturdida y abre los ojos como platos.

- Lo pensaste en voz alta.- dice Ross meditando lo que había pasado y con una mueca sarcástica.

-¿Siguen aquí? -pregunta la profesora y los chicos salen del salón con aire molesto.

Ross se levanta a dejar la actividad con la profesora y cuando vuelve la chica la estaba viendo.

- No parece que me ignores.- soltó sin más.

-¿Debería? -contesta Ross

- Me ayudaste.

- Solo conteste lo que pensé.-se encoje de hombros.

La chica solo sonríe y empieza a guardar sus cosas.

-Pues gracias, supongo.

-Pues de nada, supongo.

Ambas se miran y comienzan a reír despacio.

- Soy Carrie.- se presenta la chica durmiente

- Soy Rosé.- le extiende la mano y Ca se queda observándola.- es mi mano, no creo que te muerda.- sonríe

- No es eso, es solo que es un poco anticuado.-la estrecha con una sonrisa.- un gusto.

-Un gusto.

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HOLIS UWU.
Bueno, solo quería decir, en caso de que alguien les esto, que está historia es un demo.
¿Qué quiere decir?
Qué si se me pega la gana puedo cambiar algunas cosas de la historia, solo si es conveniente.
Así como todo su estructura.

Dicho esto, nos leemos. :3

WHAT IS LOVE?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora