Solo un día más

Capitulo 1

Percibi el sonido de la licuadora que procedia del piso de abajo y luché  contra el poder que la sabana y mi comoda cama ejercia sobre mi.

Escuché mi puerta abrirse y me cubrí de pies a cabeza con la sabana al escuchar a mi madre acercarse a mi.

-April, mueve tu trasero de la cama ¡Ahora!-.

-Mi trasero quiere quedarse en cama-exclamé mientras sin la menor delicadeza ella me arrancaba la sabana del cuerpo-Puedes dejarlo dormir por favor?-.

-Tienes que poner en la secadora la ropa que se esta lavando-Dijo mi mama dirigiendose a la puerta.

Abrí los ojos y salí de la cama, mientras mi mente alejaba el sueño podia sentir el peso de la realidad sobre mi, el peso de su recuerdo.

Peter.

Mientras me miraba en el espejo del baño lo recordaba detras de mi, abrazandome por la cintura diciéndome al oido que me amaba.

Ya no habia lagrimas en mis ojos, el recuerdo de su presencia solo provocaba un dolor sordo, me sorprendí a mi misma cuando despues de 3 dias seguidos de lagrimas simplemente no lograban salir de mis ojos ninguna mas. Lo que vivimos no fue como esas historias que se leen en los libros con una pasion desenfrenada, ni corriente electrica ante el minimo contacto fue solo una ilusión que se convirtio en realidad, un chico y una chica que luego de meses de amistad reflejaron algo mas, algo que se convirtio en amor. No nos amamos al instante que nuestras miradas se encontraron ni a los dias de nuestro encuentro ,fueron necesarios meses de amistad y muchos mas de noviazgo para entender que habia amor entre nosotros y que era de verdad, ese tipo de amor que te atrapa cuando quieres devorar el mundo entero por que eres joven pero no tienes ni las capacidades ni los medios por que eres para muchos solamente una niña.

Sali de mi trance mientras me alejaba del espejo, me duche y salí envuelta en una toalla a mi habitación.

Me puse unos jeans algo desgastados, una camiseta sencilla de color cafe, una chaqueta y unos zapatos bajos cerrados.

Baje las escaleras con la esperanza de encontrar a mi madre pero ya se habia marchado.

Observe el desayuno que me habia preparado y me comi solo la mitad, no soy lo que se podria decir gorda mi cuerpo es de talla normal, quizas para la vista de las anorexicas puedo tener un problema de sobrepeso pero para el resto de gente con sus 5 sentidos bien colocados mi cuerpo es simplemente normal , es solo que esta mañana el apetito no esta numero uno en mi lista. Dejé los platos en los fregadero esperando llegar antes que mi madre para poder lavarlos sin que se me considere como la suciedad convertida en ser humano.

Es necesaria toda mi fuerza de voluntad para poder colocarme la mochila al hombro y dirigirme hacia la puerta, en el camino hacia ella solo puedo pensar al lugar que tengo que ir, la universidad puede ser un lugar comun y sin importancia para muchos, un lugar en que centra en la educación y la formacion de tu futura carrera, pero para mi es el establecimiento en el que se encuentran todos aquellos que alguna vez fueron mis amigos y hoy en dia no son mas que seres con quien comparto unos pasillos en comun.

Cierro la puerta detras de mi y ya no hay marcha atras.

Me dirijo a mi auto, un escarabajo como muchos lo llaman y para mi es la bendición de no tener que coger un bus colectivo o el metro.

Enciendo la radio y me pongo en marcha hacia mi destino.La escuela era agradable cuando mi centro de atencion eran los proyectos que realizar, las clases que tomar y que planes podria hacer el fin de semana con mis 2 mejores amigas, Camila y Sophia.

Camila con su pelo castaño, sus ojos color miel y su tez bronceada es indudablemente bella pero es tristemente opacada por su timidez tan singular de ella. Camila es lo opuesto a Sophia, esta es siempre muy altiva y sociable, siempre imponente, de tez blanca, ojos verdes y cabello de color rubio con un degradado azul intenso.