EL VERDADERO SENTIDO DE LA VIDA

Supongo que se han hecho alguna vez estas preguntas: ¿cuál será mi objetivo en esta vida? ¿para qué vine al mundo? ¿cierto? Bueno, son preguntas que cada ve que algo no me sale bien me hago. Es la hora y después de tanto tiempo no he logrado hallar las respuestas, de hecho tomé la decisión de no gastar mi vida tratando de encontrarlas y les aconsejo que tampoco lo hagan.
Esta vez, les quiero contar la historia de Saul, un joven que decidió quitarse la vida con un acto de valentía o quizá de cobardía, es normal que exista ese conflicto cuando alguien decide ahorcarse; ¿Tú qué piensas? ¿es valiente por el gran valor que se debe tener para hacer eso o es cobarde porque encontró la manera más fácil para huir de sus problemas? No lo sé, es otro enigma que quizá nunca resolvamos.

Bueno, retomando el tema principal, Saul era un joven de 24 años, inteligente, piel morena, alto y con muchos sueños y metas por cumplir, era un desempleado más de este «país de oportunidades» meses atrás había cometido el error de tener relaciones sexuales con su novia sin utilizar protección, por lo que esta había quedado embarazada, le tocó llevarla a su casa y contraer matrimonio con la madre de su futuro hijo; para su mayor suerte o desgracia aunque no debería llamarlo así, ya que un hijo siempre será una bendición, su ahora esposa le llegaría con la noticia de que no están esperandl un solo bebé, sino tres.
¿Sorprendidos? Yo también lo estoy; la esposa de Saul estaba embaraza de trillizos, ¡sí! ¡trillizos! Imaginen ustedes la gran impresión de este hombre, con tan solo 24 años se iba a convetir en padre de 3 hijos, desempleado y sin ningún tipo de ingreso económico, excepto por el miserable sueldo de su padre que a duras penas alcanzaba para pagar los servicios y uno que otro alimento.

Además del montón de sentimientos encontrados que experimentaba Saul, se hacia estas preguntas: ¿Sería este el objetivo de mi vida? ¿traer a tres niños indefensos a sufrir? O ¿ellos serán mi fuerza para seguir luchando?
Tendría que pasar el tiempo para que Saul hallara esas respuestas.

Pasado el tiempo del embarazo, Saul viviría una de las primeras tragedias que se le venían encima; el día del parto su esposa Diana, muere después de haber dado a luz a sus tres hijos, todos sabían que era muy riesgoso y que las probabilidades de que saliera bien del parto eran casi nulas. ¿sería este el inicio del espantoso camino desdichado que vivirían Saul y sus hijos?

Pasaban los meses y para Saul era cada vez más dificil mantener a sus hijos que por cierto eran idénticos a él.
Se había endeudado con el banco, prestamistas, amigos, familiares y vecinos; su vida era un caos cada vez más grande con el pasar de los días.

Cinco meses después, llega Saul a su casa y encuentra a su madre llorando sobre el pecho de uno de sus hijos.
-¿qué pasa, mamá? Pregunto con voz temblorosa.
-¡no respira, Saul, el niño no respira! ¡está muerto, está muerto! Gritaba su madre.

Me tocó hacer una pausa para no llorar después de haber escrito esto.
Infortunamente uno de sus hijos murió por causas más que obvias, desnutrición crónica gracias a la mala alimentación.
Por la muerte de su hijo, le fue abierta una investigación por el bienestar familiar, de hecho le iban a quitar a sus otros dos hijos.
Para su mala fortuna a los dos días de haber sepultado a su hijo, uno de sus dos hijos no aguantó la enfermedad y también murió desnutrido.

Saul se sentía tan culpable, todos lo señalaban; los bancos no dejaban de llamarlo, los prestamistas lo tenían amenazado de muerte, perdió a sus amigos, ¡lo perdió todo! A su último hijo vivo se lo había llevado el bienestar y a él estaban a punto de meterlo a la cárcel.
Tantos problemas, tantas cosas, lo llevaron a tomar la fatídica decisión de quitarse la vida, el 17 de junio del 2016, siendo las 3:45 p.m. de la tarde decide entrar a su cuarto con una soga que colgaba en una de las columnas de la casa y en menos de un minuto acabó con su vida, no dejó una carta, nisiquiera una nota, las razones de su decisión eran muy evidentes.

Aún hay muchas preguntas en mi cabeza y me imagino que ahora en la de ustedes también. ¿Qué tanto merecemos la vida? ¿a qué vinimos a este mundo?
Talvez mi amigo Saul se fue con la idea de que solo vino al mundo a sufrir y a hacer sufrir a los demás.

Su hijo ya tiene tres años, fue adoptado por una familia adinerada, y me cuenta doña Gladys (mamá de Saul) que es el vivo retrato de su hijo, bien parecido, alto, moreno, ojos cafés, inteligente y lleno de vida.

FIN
Autor: Pedro Villadiego B.