Te amo.

227 15 2
                                    

Estábamos en el cuarto de Diego, acostados. Estábamos viendo una serie pero cuando mire a Diego el ya estaba profundamente dormido. Sin darme cuenta una sonrisa se formó en mis labios.

—Diego Ortega, ¿cómo puedes ser tan perfecto hasta durmiendo?—dije con una sonrisa enorme en los labios.

Diego es la primera persona que me hace sentir así. Tan vivo, tan feliz. Nunca había querido tanto a una persona como quiero a Diego. Y a pesar de el poco tiempo que llevamos saliendo, siento que lo amo. Ni yo me lo creo, nunca imaginé amar a alguien, menos a un chico, pero lo que menos me importa de Diego es que sea un chico. Diego es único, realmente único. Les puedo apostar que nunca van a conocer a alguien tan único como Diego Ortega. Diego es perfecto.

Pero de repente un bostezo interrumpió mis pensamientos.

—al fin te despiertas Diego. Pensé que te tendría que despertar a besos—dije en un tono burlón.

—de haber sabido no me hubiera despertado, plangomangano.

—Diego, ¿te cuento algo?— dije mirándolo a esos ojos tan hermosos que tiene.

—dime.

—se que yo no suelo ser muy cursi y casi no demuestro mis sentimientos. Pero quiero decirte que te amo, te amo Diego—dije pasando saliva.

—Mateo yo...

—dejame terminar Diego. 
Pues eso, te amo Diego. Tal vez pienses que soy intenso porque llevamos poco tiempo saliendo y ni siquiera nos hemos dado un beso. Pero es que Diego, tu eres una persona tan hermosa, tanto por fuera como por dentro. Eres la única persona que logra hacerme sonreír hasta en los peores momentos. Me cambiaste la vida Diego.—dije con los ojos llorosos.

—Mateo, realmente no se que decir. Nunca me habían dicho cosas tan hermosas. Enserio muchas gracias. Y, ¡yo también te amo Mateo Symanski!, ¡te amo!—dijo casi llorando.

Estaba tan feliz de haber escuchado eso. ¡Diego me ama!
Después de eso yo solo me quedé mirando a Diego, podría hacer eso todo el día. Diego es arte.

—¿por qué te me quedas viendo así?—dijo con una sonrisa en sus labios.

—es que eres tan hermoso Diego, eres arte.

—eres un cursi plangomangano. Por eso te amo— Dijo abrazandome.

—gracias por existir—dijo.

Después de eso simplemente nos quedamos abrazados, sin decir nada. A veces el silencio dice más que mil palabras y ese silencio decía de todo. A veces un simple abrazo transmite más amor que miles de regalos y caricias.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Sep 07, 2019 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Matiego One shotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora