Iris dejo escapar un leve chillido cuando la luces de la ciudad fueron cortadas por un problema de cable, justo en ese entonces, se encontraba preparando la merienda para ella y su fiel mascota.
-No puede ser- Se quejo tomando su celular en la mesa de la cocina para poder alumbrar el lugar con la linterna - ¡Copito, no te vayas tan lejos!- alzó la voz lo suficiente para que su mascota la escuchara.
El pequeño felino de seis meses se acercó con rapidez a su dueña, sobando su cara por las piernas de la misma en muestra de estar ahí.
Iris sonrió al percatarse y tomo al gato entre sus brazos, no sin antes tapar la comida media hecha.
-Lo siento, Copito. Tu dueña no termino de preparar la merienda- dijo con tono delicado hacia su compañero fiel- ¿Qué tal unas chucherías y música para compensarlo?¿Huh?- le dedicó una sonrisa al felino.
El pequeño gato dejo escapar un maullido dando a entender a su dueña lo que significaba.
Su compañero era muy listo, más listo que los demás gatos que habia visto en su vida, si bien dirían que es porque es su mascota, la realidad era que el felino era algo "especial" en el sentido que hacía cosas que los demás gatos no se les ocurrían.
Y eso que Iris nunca entreno a su mascota por más que se le hacía curioso, el mismo felino parecía ya tener todo eso desde que nació aparentemente.
No le molestaba en absoluto, al contrario, la emocionaba.
La única cosa rara era que solo la escuchaba a ella.
Entro a la habitación alumbrando el lugar con ciertas chucherías en su boca empaquetadas, mientras en sus brazos tenía aún más, una bandeja, al felino y el dispositivo.
No fue fácil llegar a la cama, pero una vez que lo logro, dejo caer lo menos importante. Se sento e hizo un lado a su mascota, comenzó abrir lo que sería la comida de su compañero y tomo la bandeja para echar lo que correspondía.
-Ahí tienes - puso la bandeja en donde el pequeño podría comer, a lo que el felino salto para comenzar a gruñir mientras comía. -Despacio, sabes que estás en mi cama - Iris entrecerró los ojos.
Se acomodo mejor en su lugar y busco entre las músicas que había descargado no hace mucho en su celular, al encontrarlo, dió play moviendo la cabeza con cierta emoción.
Super Junior "Mr. Simple" comenzaba a resonar entre el lugar donde se encontraban.
La música era pegajosa y única, tenía un ritmo que a ella le gustaba.
Era como un flechazo directo a sus gustos.
Fue apenas unas semanas que empezó a escucharlos, sucedió cuando su felino cambio de canción accidentalmente al querer treparse a la mesa.
Ese día Iris estaba confundida, ya que el idioma era muy diferente a lo que escuchaba, pero le gustaba, por lo que investigo un poco más sobre está, encontrándose con nueve hombres activos en el grupo, aparentemente eran quince de trece...
Ah.
Eso era un tema que le tenía hecha revoltijo actualmente.
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¿Soy yo?...Una ELF [Re-Editando]
FanfictionIris al ser trasladada a otro cuerpo, un continente, un departamento que no es suyo, su vida cambiaría de golpe, conocerá a nueve o más chicos que la acompañarían en su casi soledad, pero en el transcurso de todo eso no imaginaria que habría un secr...