Como ciego que a tientas busca señas en la arena
Desgarrando las yemas en el sin sentir de su alma.
Solo dolor entiendes porque solo dolor te enseñas;
Le llamas amor a una sed que te lacera y no da tregua.
De un palacio etéreo has hecho una morgue
A donde llevas estas letras a enterrarse, desorden
El aire astillado se respira;
Del hollín de ídolos,
Que a pesar de ti has tallado.
No tengo un pelo de sabio,
Aunque la vida me tome el tiempo
Una cana a la vez.
Lo sabes bien, hermano mío.
Escucha esta voz, que, agotada por la pena,
Te ofrece la mano.
Mano llena de callos;
actuado por un brazo cansado;
Descubriendo fuerzas en tu libertad.
Si al final de este sueño,
Tintado de sal marina,
Has de subir la mirada
Y encontrar la salida,
Muero por volver a verte.
Deja de entregarte a tu reflejo en medio de la tempestad.
Se te secan las venas, dando vida a jergas,
Que siempre fueron de otros
Conozco el malestar; no tengas miedo.
Las luces a lo lejos son estrellas, y tu su siervo
Rema conmigo, o solo, no me dejes;
Años de distancia, y pisadas en el suelo.
Se lo que buscas; yo te sigo; no te pierdo.
Dame la señal y echo el ancla hacia el cielo.
Montados sobre cuerdas enredadas en las manos
Suelta, hermano mío, y nademos otro rato.
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Versos lentos para momentos simples.
PoetryEste poemario sera publicado. creo. me da flojera corregir la ortografia. es casi medianoche y estoy cansado y me meti a esta pagina para ver si de algo sirve. me vale madres si les gustan o no, con que los haga pensar. -- Otto