Sophia a sus 27 años se casó muy enamorada de Erick un hombre de 35 años, él llenó su mundo de ilusiones y de mucho detalles, los primeros meses de su matrimonio se fueron a vivir a noruega, donde ella se le dificultaba el aprender el idioma de aquel país, si bien es cierto ella era una estupenda traductora dominaba el inglés y francés, pero eso no era suficiente para las personas que vivían allí, habían días que se sentía impotente por no poder comunicarse apropiadamente con su familia política y en más de una ocasión tuvo malentendidos con cada uno de ellos. Una noche de cena familiar su suegra se refirió a ella peyorativamente donde no dejó dudas de que aquella mujer de avanzada edad la odiaba y odiaba el hecho de que su hijo mayor se haya casado con una latina. Los días para Sophia habían sido duros hasta este punto; lejos de su familia y amigos, en un país que se le hacía completamente extraño, extrañaba su tierra cálida donde estaban los que amaba y donde se sentía como un pez en el agua. Esa noche Sophia dejo el comedor y subió a su habitación donde lloro desconsoladamente, pero su flamante esposo ni siquiera se inmuto, solo subió a ver como estaba después de que su familia se hubiera marchado.
- ¿Puedo saber que te pasó? Por dejaste el comedor de esa manera, fue muy grosero de tu parte para con mi familia.
- Erick! Tu madre me insulto y tu ni te dignaste a decir ni una palabra para defenderme, ¿Cómo crees que me siento después de todo esto?
Nunca estas de mi lado, siempre minimizas todo, dime ¿de verdad me amas? - !porque no lo parece!
- Solo fue una broma que hizo mi madre, no sé porque estas tan sensible, ¡y no es que yo minimice las cosas lo que pasa es que tu sueles exagerarlas! Sophia no eres una niña para que salgas corriendo.
---Sophia con los ojos llenos de lágrimas comenzó a llorar por toda la rabia contenida, sabía que ya no era una niña para huir, que ella decidió irse a aquel país extraño y que quizá fue una decisión apresurada creer en el amor que Erick le juro, quizá sus lenguajes de amor eran de códigos distintos y nunca se llegarían a entender-- No, no soy una niña Erick, soy una mujer que merece respeto y lealtad por parte de su marido que le juró amor eterno frente a un altar, no a un niño que aún se oculta bajo las faldas de su madre!
- Sintió arder su mejilla – él la había abofeteado – y comenzó a gritar a empujarlo, ¡cómo te atreviste! – dijo ella con furia
- Erick con todo el remordimiento en su conciencia solo atinó a abrazarla y pedirle perdón, - "lo siento mucho amor, perdóname, amor yo no quería, no volverá a pasar"
- ¡Suéltame! - Sophia fue directamente al closet y comenzó a guardar sus cosas – se acabó ya no aguanto un día más!
- ¿Que? ¡No! Sophia por favor no te vayas amor, perdóname, mira haré lo que tu quieras, pero no me dejes – Erick se aferró a su cintura y comenzó a llorar como un niño desconsolado – "por favor... Sophia yo te amo, pero no me dejes" – dijo sollozando
- Mudémonos, mudémonos lejos de tu familia, así como yo estoy lejos de la mía exijo las mismas condiciones para los dos – lo dijo fríamente pensando que él nunca accedería a tal petición.
>Hubo un gran silencio durante unos minutos, ninguno dijo nada hasta que Erick se levantó del suelo y dijo "tú ganas nos mudaremos lejos de mi familia">
Sophia no lo podía creer estaba anonadada, no sabía que decir o hacer, solo atinó a quedarse sentada al lado de la cama, cuando de repente Erick se acercó a ella y la besó, le susurro al oído que la amaba que no podía vivir sin ella – Sophia no tuvo fuerzas para negarse a él y terminó cediendo – y se entregó a la pasión de su esposo aquella noche.
A la mañana siguiente Sophia despertó seguía algo aturdida, todo le parecía tan irreal y poco creíble aunque la noche anterior todo terminó en un desastre no sabe porque no se fue de esa casa, siempre se había prometido así misma que nunca permitiría que ningún hombre la golpeara, se sentía estúpida por haber permitido que sucediera, por haber accedido a tener intimidad con Erick, "fue un error" se lo repetía mentalmente, no debió pasar, - no debí dejar que me toque -.... cuando se levantó de la cama encontró en el velador junto a la cama estaba el desayuno y un pequeño ramo de flores - Erick realmente se estaba esforzando por obtener su perdón – pensó Sophia... cuando de repente su esposo entra a la habitación raudamente diciendo - "me transfirieron de sucursal en la compañía"
- ¿Amor, estas bien? ¿No es lo que querías? Pues finalmente nos iremos a vivir solos tu y yo, ambos lejos de nuestras familias. – lo decía con tanta naturalidad como si la discusión de la noche anterior hubiera sido solo una pesadilla, como si nada hubiera pasado.
- ¿A dónde iremos? – preguntó con asombro saliendo de sus pensamientos.
- Pues la única vacante disponible para un traslado es Seúl en Corea, el sueldo es muy bueno y la compañía nos proporcionará una casa y bueno sé que en corea puedes sobrevivir con inglés, ¡ah! y ambos tendremos clases de coreano pagadas por la compañía – le dijo él con mucha emoción
-sorprendida con tremenda noticia ella solo pudo atinar decir – ok, si ya lo decidiste, nos mudaremos– por un lado, se sentía aliviada de irse lejos de su horrible familia política especialmente de su suegra, pero no sabía porque esa noticia le producía un sin sabor, como si hubiera algo extraño en todo ello. Deseó con lo más profundo de su ser que ese cambio fuera para bien, que su matrimonio logre fortalecerse y de una vez por todas logren formar una familia.
- ¿Cuándo nos vamos? – pregunto
- En una semana, necesitan urgentemente un gerente de tecnología y comunicaciones, recuerdas que hace un par de meses tuve que viajar a Corea – le dijo como si no le importara- pues las cosas se han tornado más tensas con el cliente por allá y el director quiere que vaya a retomar las negociaciones que al parecer se han visto interrumpidas por una mala gestión.
- Entonces tú ya has estado en corea varias veces – refuto la latina como quien trata de averiguar más.
- Si, un par de veces he viajado allá, pero solo ha sido algo temporal, pero esta vez si todo sale bien estaremos allá por unos 5 años, además conozco bien al cliente con el que trataré al parecer solo quiere negociar conmigo – dijo como arrepintiéndose de lo que dijo.
- Suena como si fueran amigos – dijo Sophia sin creer el 100% las palabras de Erick.
- Amigos no, pero el cliente ya ha venido a Noruega a negociar personalmente, pero creo que el desea que yo sea el que maneje su cuenta, pero desde allá.
- ¿Cómo haremos para irnos, qué haremos con la casa y nuestras cosas? Esto tomará más tiempo, no creo que estemos listos en una semana.
- No te preocupes por ello, esta casa ya la puse en alquiler y bueno la casa que nos den en Seúl esta equipada, estaremos en una zona céntrica y segura. Solo necesitamos llevar nuestra ropa, cosas de uso personal y laptops.
- Está bien – musitó poco convencida pero aliviada.
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Chicas espero que les guste el fic, un poco de paciencia y ya aparecerá nuestro rico morenaso, digo RM. =)
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Historias Paralelas
FanfictionSophy es un chica genial de 27 años, 1.62 cm de altura, no era muy alta pero tenia un pelo ondulado precioso, destacaban sus ojos color caramelo y cada vez que usaba tacones y faldas en tubo atraía más de una mirada, era una latinoamericana que dis...