Historias Paralelas

Pesadilla

Minutos después llegó Erick.

- Aquí está – dijo mientras le entregaba la prueba a Sophy.

- Bueno iré a hacerme la prueba, lo mejor es salir de dudas ahora mismo.

<Sophia tomó la prueba y se fue al baño, espero los minutos que decía en las instrucciones de la cajita, cuando Erick entro si aviso y tomó la prueba en sus manos.

- Es positivo, es positivo – dijo él mostrándole la prueba.

- Es positivo – dijo ella con una sonrisa fingida, sintiendo el corazón a mil por hora.

- Bueno amorcito, al parecer funcionó todo lo que hicimos este tiempo, ya no te desharás tan fácil de mi – dijo como quien sabía que esa situación sucedería.

- Al parecer estoy embarazada - dijo ella con algo de tristeza

- Alégrate, al fin tendremos un bebé, ya deberías pensar en renunciar a ese trabajo, ya no es necesario - dijo él con voz triunfante.

- Esperemos un poco por favor, cuando el embarazo este avanzado lo dejaré - dijo ella resignada.

- De acuerdo pero solo hasta el sexto mes, por lo pronto debemos programar una cita con el doctor para empezar tus controles.

- llamaré mañana mismo para agendar un cita - dijo sophy.

Esa noche sophia no pudo dormir, no podía creerlo todos sus planes se estaban viniendo abajo, no entendía cómo es que logro salir embarazada, había estado tomando sus pastillas puntualmente.

Varios días después, en su cita con el médico, le confirmaron que efectivamente estaba embarazada y que tenia 3 semanas de embarazo, Erick estaba Feliz, pero Sophia aun no lo asimilaba. Era viernes, le habían dado el día libre en el trabajo a Sophia, llegaron a su casa justo para almorzar.

- Bueno es oficial, estas esperando a nuestro hijo, pero ¿porque no estás feliz?, no me digas que arruine tus planes? - dijo con un tono de burla.

- ¿perdón? a qué te refieres - dijo ella algo intrigada.

- Crees que no sabia que te cuidabas y tomabas esas malditas pastillas, tan tonto me crees?, pero al parecer tú fuiste la tonta que no se dio cuenta que las cambie, solo has estado tomando vitaminas todo este tiempo - dijo tomándola bruscamente de la mandíbula.

- Eres un desgraciado - dijo ella encendida en furia safandose de su agarre. - cómo te atreviste!

- Para comenzar tú eres mía y yo hago lo que quiera contigo, te dije que tendríamos un hijo y se está cumpliendo, nunca te libraras de mi me oíste! - dijo el tomando su brazo con fuerza.

- Suéltame maldito infeliz, me das asco, estoy harta de ti, así esté embarazada no me quedaré aquí ni un día más, y olvídate de este niño porque solo es mio no quisiera que tenga un padre como tú! - le gritó ella sacando toda su frustración contenida.

- Tú de aquí no te vas - dijo él agarrándola fuertemente de los dos brazos para luego abofetearla.

Erick estaba como un loco, empujó a sophia contra la pared, esta vez no tendria contemplaciones, le dio golpes en el rostro y cuando ella trató de huir por la puerta, él la volvió a lanzar contra el suelo, pero esta vez sophia tropezó con la mesa del comedor y perdió la conciencia.

En la noche despertó, en su habitación con un dolor insoportable, pero había un hombre que no reconocía hablando con su esposo, al parecer era un doctor particular, por que escucho que le daba unas indicaciones a Erick