♡ 𝑬𝒙𝒑𝒍𝒊𝒄𝒊𝒕 → 𝑱𝒊𝑪𝒉𝒆𝒐𝒍.

🍭Eleven🍭

SeungCheol fue el primero en despertar a la mañana siguiente.

Pintaba para ser un buen día pues por primera vez en mucho tiempo no abría el ojo por culpa de un dolor de cabeza enorme y con necesidad de cambiar las sábanas de su cama...bueno, tal vez si tendría que hacerlo, pero esta vez por una buena razón.

Dejó un beso en la cabeza de Lee JiHoon y se levantó con cuidado para no despertarlo, recogió la ropa que estaba regada por el suelo y "puso la ropa interior en la parte en la que debía estar," lo demás no le servía ahora; fue al baño para acomodarse el cabello y lavarse el rostro hasta que algo llamó su atención.

"Podría usarlo con mi novio," suspiró observando el bote de jabón de burbujas.

Wow, wow, esperen...eso sonaba bastante extraño.

Su novio, Lee JiHoon era su novio, su pareja...si lo pensaba un poco, nunca había imaginado que su relación iba a alcanzar ese punto.

Cuando eran más jóvenes y se besaron por primera vez "por accidente" y después volvieron a hacerlo estando ebrios, acordaron que no irían para más, solo sería una especie de desahogo entre ellos.

Sin embargo, una cosa llevo al sexo y a la oportuna evolución de su relación, SeungCheol lo agradecía, pues siempre había sentido algo por el chico que aún dormía ajeno a lo que el hacía en su departamento.

"JiHoon-ah, despierta," habló suave acariciándole el hombro.

"N-no puedo, me duele todo," contestó volteando el rostro hacia la almohada.

"Te cargo," sonrió y JiHoon soltó una risa que bien podría ser confundida con la de una colegiala.

"Cargame," extendió los brazos y después hizo una mueca de molestia. "Auch."

"Tan pequeño y quejumbroso," el de cejas grandes lo tomó en sus brazos y sintió como ambas pieles se erizaban al hacer contacto. JiHoon escondió la cabeza en el cuello de SeungCheol, de pronto sintiendo algo de pena por estar desnudo y por el video que había mandado, pero estaba bien, Choi estaba con él.

"¿A donde vamos?" preguntó mordiendo el cuello color canela.

"De seguro a la calle, estamos perfectos y listos para salir ahora, ¿no lo crees?" bromeó mirándolo.

JiHoon rodó los ojos. "Te daré un baño. ¿No crees que estás pegajoso?"

"Pegajoso y sucio, bastante...pero huelo a ti, Hyung," suspiro cantarín.

"Pues ahora olerás a jabón de naranja."

El más alto abrió la puerta del baño dando un pequeño empujón con el pie, para dar unos cuantos pasos más y dejar a JiHoon dentro de la bañera que había preparado y se arrodilló junto a él.

"Hey, buenos días," exclamó dándole un pico veloz en los labios.

"Buenos días. Gracias por esto, SeungCheol"   JiHoon lo miró con profunda gratitud, tal vez era un pequeño gesto, pero para él, significaba mucho. "Está calentita."

Ambos se miraron por un instante, un poco extrañados de que en verdad estuviera pasando algo como eso.

"Mojate la cabeza, para que pueda lavarte," ordenó con un leve rubor en las mejillas. Ji obedeció y hundió la cabeza por unos segundos, cuando salió, volvió a sonreír y se estiró para abrazar a su novio del cuello.

"Vas a mojarme," se quejó.

"Pero quiero besarte."

Jihoon tomó el labio inferior de SeungCheol entre los suyos, succionando levemente. No tenía prisa de nada, sólo quería besarlo un rato.

El mayor se inclinó un poco adelante y cruzó los brazos en la espalda de Jihoon, pegando ambos pechos y salpicando agua.

El beso tomó la intensidad adecuada para que ambos pudieran entrelazar y jugar con sus lenguas. Su Hyung era tan buen besador, tan guapo y tan encantador...y ahora era solo para él.

"Ya, debemos ir al estudio," recordó separándose de él. "Lavame el cabello."

SeungCheol le dio una rápida lengüetada a los labios del rapero de voz aguda y se estiró para tomar el shampoo. Le dio un apretón a la botella para sacar lo suficiente y comenzó a masajear los bellos mechones castaños de Jihoon.

También frotó su espalda con una esponja y se aseguró de que no quedasen rastros de algún fluido corporal ajeno a él en ningún lado.

El joven líder se limitaba a reír cuando Choi rozaba alguno de sus puntos sensibles y eso era como música para sus oídos.

Estaban bastante seguros de que iban a ser muy felices juntos.