Magia o Actuacion

Capitulo Especial III

Allí estaban todos mirándose intensamente sin decir una palabra, el ambiente se tornaba tenso ninguno sabía muy bien de que iba el asunto pero si los chicos pensaban que ellas eran las mismas de antes, estaban totalmente equivocados.

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- ¡Suéltame! - exigió Nata jalando fuertemente del brazo hasta que soltó su agarre, no se veían pero sabía perfectamente que se le habían señalado los dedos - ¿quién te crees que eres? 

- Antes no me hablabas así - respondió el - antes eras rebelde - se fue acercando a ella con la intención de tocarle la cara - antes te la jugabas para estar conmigo

- Me la he jugado demasiadas veces - dijo haciendo la cobra para  evitar que le toque - ¿y sabes que? - ahora era ella la que lo desafiaba y no precisaba de una varita para ello - me di cuenta de que era la única que lo daba todo y que dejaba todo para poder estar contigo

- ¿A que te refieres? -  preguntó el

- ¿Quien discutió con los chicos de su casa? ¿quién viajaba para que nos viéramos? ¿quien aparto sus sueños para estar contigo? - respiró hondo - me cansé, me cansé de todo 

- ¿Es por Iván? - preguntó cuando estuvo a punto de irse - ¿te dio algo que yo no te di?

- Ni siquiera lo nombres - ahora con la varita en mano y apuntando, en sus ojos brillantes de algo que ni siquiera ella sabría lo que era, ¿amor? ¿odio? ¿lastima? y el corazón latiendo fuertemente contra su pecho - no eres ni la mitad de hombre de lo que es el; tu no has hecho ni una cuarta parte de lo que el hizo por mi.

Dicho esto se fue al comedor donde se reunió con las demás, los ánimos estaban en el mismo estado que el suyo a ninguno le hacia la más mínima gracia que estuvieran juntos pero no había más remedio.

- ¿Tenéis algo con ellos? - pregunto la profesora Mireya - perdona si me meto donde no me llaman

- No, tranquila - dijo Nata calmando el ambiente gélido - sí y no - en su cara se formo una interrogación - tuvimos algo con ellos

- ¿Pero vosotras sabéis quienes son? - exclamó - si son super famosos

- Nosotras también lo eramos - dijo Noe - pero el punto aquí es que no son lo suficiente hombres como para afrontar a una mujer

- Por cierto -interrumpió Fany - yo que tu tenía cuidado con el auror de Australia

- ¿A que te refieres? - preguntó la chica extrañada mirando hacia la mesa, un chico rubio totalmente de rasgos australianos la estaba mirando - ¿Cam? - el chico miró hacia otro lado en el mismo momento que oyó su nombre provocando las risas de todas las de la mesa. 

Mireya la profesora de defensa que venía de Ilvermorny se volvió tímida de repente y no pronuncio palabra alguna durante el desayuno. Tras esto, los chicos se reunieron en el despacho de la directora.

- Bien, os habéis dividido para impartir clase - todos asintieron aunque algunos no estaban conformes - la sala de los menesteres está disponible ¿os acordáis de donde encontrarla no?

- Claro profesora - exclamó Fany - recuerde que pasamos las horas ahí ensayando

- Y haciendo de las vuestras - siguió el profesor Longbottom, ellos sonrieron - bueno a lo que íbamos la sala de los menesteres es vuestra, el campo también está disponible, el bosque y los terrenos de hogwarts.

- Exacto - siguió el profesor Eslava - por el momento dejaremos el castillo asegurado los propios profesores y seguiremos impartiendo clase como de costumbre.

- Si veis algo extraño no dudéis en utilizar a los fantasmas del castillo, las armaduras y los cuadros - terminó la profesora - ya han sido informados.