"Hola Machi, estoy vigilando a Hisoka como me lo pediste, por ahora no se ve muy sospechoso. Por otro lado, durante la primera etapa del examen del cazador conocí a un chico que quiere vengarse de la araña, parece que su familia fue atacada por noso...
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Miré la foto de mi objetivo en mi celular y después vi a la persona que estaba a unos metros de mí. Veamos... ¿Cabello rojo? Listo. ¿Alto como un poste de luz? Listo. ¿Parece recién salido del circo? Indudablemente listo. Definitivamente es él.
Observé disimuladamente cómo Hisoka entraba a una habitación a la que ya habían entrado unas veinte personas desde que llegué.
Mmmm, no pensé que el nuevo miembro del Ryodan fuera tan... excéntrico. Aunque ahora que lo pienso, no tengo una razón válida para sorprenderme. Bonolenov es literalmente una momia boxeadora llena de agujeros y Uvo parece un cavernícola con esteroides.
Meh, me acostumbraré.
Esperé unas cuantas horas a que llegara más gente para no parecer sospechosa y cuando una chica estaba entrando en la habitación la empujé hacia adentro y le di un golpe seco en la nuca mientras cerraba la puerta detrás de mí. La atrapé antes de que cayera al suelo y la senté en una de las tres sillas del cuarto.
Me quité mi vestido y empecé a intercambiar mi ropa por la suya.
Miré su cuerpo un segundo y apreté sus trabajados bíceps ligeramente.
—Señorita, tener buenos músculos no es suficiente para ser cazadora. Ni siquiera viste venir mi ataque—Terminé de ponerme su blusa y me puse su gorra— ...Aunque es verdad que yo soy demasiado genial, así que tiene sentido que no tuvieras oportunidad contra mí.
Examen del cazador.
Sólo una de cada diez mil personas puede encontrar el lugar del examen, el cual varía cada año, al igual que sus fases.
Suspiré jocosa y marqué el número de Machi. Ahora, ¿qué debería hacer con esta chica? No la maté, ¿verdad?
Le tomé el pulso y la pelirrosa atendió el teléfono.
—Mei, ¿cómo vas con tu misió-
—¿Machi-neesan? —La interrumpí sonriendo.
Mei Komachine, diecisiete años; hermana menor de Machi Komachine y miembro no oficial del Gen'ei Ryodan.
—Ya te dije que no me digas así, tonta—Pude notar su voz un poco avergonzada y mi sonrisa se ensanchó—. ¿Qué quieres?
—Ya estoy en el examen, Hisoka entró hace unas horas—Dije mirando a mi alrededor—. Ya que lo localicé podrías acreditarme la mitad de la paga, ¿no? —La escuché bufar del otro lado y al mismo tiempo la habitación en la que estaba empezó a descender. Oh, ¿es un ascensor?
—Te depositaré un tercio, cuando termines el examen te daré el resto.
—¿Eeeeeeeh? Machi, ¡necesito ese dinero cuanto antes! Debo pagarle a Feitan o me cortará en cachitos...—Mientras hablaba coloqué el cuerpo de la chica bajo la mesa y la até provisionalmente con los cordones de sus zapatos.
