Opportunity /Giyu Tomioka/

Calma

El día estaba soleado y sin ninguna nube, un día muy especial y poco común. Podía escuchar a mis hermanos jugar afuera, a mis hermanas ayudar en la comida del día mientras mi madre me cepillaba el cabello. Todo muy tranquilo, pero no dejaba de sentir el impulso de nerviosismo dentro de mí.

— Hija estas muy tensa, relájate— Mama había puesto sus manos en mis hombros. —El peinado lo haremos después de comer. — Dicho eso se paró y se dirigió a la cocina donde estaban mis hermanas.

Aunque mamá me diga eso no puedo, mis nervios no paraban. Yo, Ai Minami, tercera hija de la familia me casare en una semana con el hijo del dueño de una finca del pueblo donde vivimos.

Personalmente nunca he visto a mi futuro esposo, mis padres fueron hace unos días donde el señor de la finca y arreglaron nuestro matrimonio. No tengo nada en contra de este acuerdo, sé que esta unión puede traer prosperidad a mi familia, especialmente a mis hermanos y hermanas menores, podremos vivir tranquilos sin la preocupación de la hambruna ni las temperaturas extremas. Mi familia es humilde, vivimos algo alejados del pueblo ya que tenemos campos que cuidar, pero debido a ser numerosos miembros de familia siempre escasea algo. Por eso el casarme es mi mejor opción, para todos, como mis dos hermanas mayores, es mi camino por seguir.

—Hija a comer, se nos hará tarde —.

—¡Voy! —me pare y fui donde mis hermanos a comer al jardín. Nuestro jardín a diferencia de nuestra casa era grande, mama y yo lo cuidamos para que en primavera florezcan los arboles y flores, es una vista muy bonita y única de ver.

—Hermana te ves bonita como siempre —.

—¡Cuando vayas a vivir a la finca serás como una princesa! —.

—Gracias pequeñas —.abrace a mis dos hermanas que se habían acercado al salir. Aiko y Mika mis dos hermanas menores, nos llevamos dos años de diferencia, y a diferencia de mí, tienen el pelo color negro como nuestra madre y ojos verdes como nuestro padre.

—Apúrense se enfriará todo—.

—Que eres pesado Joji, si ya vamos—. mis hermanos menores, Joji y Kioshi ya estaban sentado alrededor de la roca que hacia de mesa para comer, al lado se encontraba un fuego con ollas.

—Huele muy bien, que cocinaron hoy niñas—.

—La carne que nos envió el señor de la finca, se nota que es de buena calidad mamá—. me senté y mamá fue repartiendo la comida, realmente olía muy bien.

—Gracias por la comida —.

Almorzamos tranquilamente a excepción de mamá que de vez en cuando iba a ver al bebe, Masaru es nuestro hermano menor, va a cumplir un año en unos meses. Papá llego en medio de la comida y se nos unió al rato.

—Ai, conseguí que nos prestaran una carreta para ir al pueblo así llegaremos más rápido, así que ve adelantándote y arréglate—.

—Si padre —me pare de la mesa y fui con mamá para que preparara mi peinado y ponerme el yukata. Nuestro padre es bastante severo por lo que esta bastante preocupado por esta unión, todo debe salir bien. Hoy iremos todos a la finca para hacer los preparativos y conocer a la familia de mi prometido.

—El yukata te queda precioso Ai, enorgulleces a la familia — Mamá me sonrió y todos los nervios de la mañana se disiparon, tengo 16 años, pero debo hacerme cargo de esto.

—Si están listas vamos, debemos llegar lo antes posible— Grito papá desde afuera.

Mire a mamá que me tomaba de la mano y nos dirigía hacia la carreta.