Untitled Part 7

4 1 0
                                    


Tengo muchos sentimientos encontrados. No puedo pensar en otra cosa que no sea el daño que ha causado aquel hombre que tengo delante. Aquel hombre que dice llamarse mi padre. Quiero gritar. Quiero gritarle por hacer daño a su familia, ha destrozado mi familia. No tiene derecho de venir y presentarse así. Tiene la mirada fría, sin ningún rastro de culpabilidad. Quiero habar. Pero en estos momentos no me sale la voz.

_ He venido a hablar contigo_ me dice al momento que se sienta en uno de los sillones. En un momento pienso que me va a pedir perdón por todo lo que pasó. Pero eso a continuación me lo desmiente._ he venido a pedirte de que no presentes cargos en mi contra. Para que trates de convencer a tu madre de no hacerlo.

_ ¡¿Qué?!... es increíble lo que me estas pidiendo. Pensé que venias a pedirme perdón. Pero lo único que te importa es que no presente cargos contra ti..._ replico casi gritando.

_ Rous. Déjate de niñerías y cumple con lo que he venido a pedirte ¿ok?_ responde con el ceño fruncido.

_ De verdad que no te reconozco. Tú no eres mi padre. Eres un.... Eres un..._ en ese momento mi madre entra en la sala.

_ ¡¿Qué haces aquí?!_ dice mi madre al tiempo que se acerca a Roberto. No merece que lo llame padre.

_ Ya me voy._ dice al tiempo que voltea para mirarme_ Ya sabes lo que tienes que hacer. Quiero responder pero no puedo. Apenas me doy cuenta que estoy llorando. Así como se merece que no lo llame padre. También se merece que no derrame ninguna lágrima por él, aunque no pueda evitarlo. Por mucho que me haga la fuerte, en verdad esto que está pasando últimamente en mi vida me está afectando mucho. Y es muy doloroso saber que la persona que más querías en el mundo, termina destruyéndote.

_ Rous..._ me dice mi madre tocándome el hombro al notar que no le respondo_ ¿Estás bien?

_ Si_ respondo al momento que me levanto por un vaso de agua. Pero en ese instante todo el cuerpo me pesa y siento que mi cerebro se desconecta de este.

Marcos

Cuando llego a mi casa, todavía no estoy seguro si estaré soñando. Por fin después de tanto tiempo de esperar. Por fin me decidí besar a Rous. Ese momento que quiero volver a repetir. Volver a sentir sus labios sobre los míos. Esa chica me tiene loco, la adoro, es por eso que en esta cita le voy a pedir que sea mi enamorada. Estoy seguro que me dirá que sí. Pero tengo que preparar una sorpresa. Pero... ¿Qué sorpresa? Tengo que comenzar ahora si no quiero que se me haga tarde para ir a recoger a Rous. Como una señal del cielo. Veo en mi mesa una cajita de madera, me alegro de hacerla comprado cuando ni siquiera sabía que iba a hacer con ella.

Cuando termino de hacer el regalo. Me meto a la ducha. Apenas son las 5:30. Así que me tomo un tiempo bajo el agua caliente para aliviar un poco los nervios. Y la ducha sí que me ayudó mucho. Para cuando termino de cambiarme son las 6:15. Así que me apresuro al salir de mi casa y cojo un taxi. En el trayecto me voy imaginando de cómo va a ser la cita que tanto he deseado desde hace mucho tiempo. Cuando por fin llego a la casa de Rous, tengo muchos nervios. No sé si estaré bien vestido. Llevo un yean negro, una camisa blanca, casaca negra, y unas zapatillas que a mi parecer más parecen zapatos.

Me sorprende ver la puerta abierta. Sé lo mucho que Karen cuida la seguridad de su casa y tengo un mal presentimiento. Me apresuro a pagarle al taxista y me bajo del carro lo más pronto posible. Cuando abro la puerta me encuentro a Karen sujetando a Rous en el suelo. ¿Qué ha pasado?....

InterminableWhere stories live. Discover now