Date a Princess

Cap.11~Alerta:rival en el amor.

[ 7:30, tu habitación... ]
    Sonó el despertador y tú, perezosamente, alzaste tu mano para apagarlo. Tras todo un día en la playa junto a Tohka, tu querida Tohka, te sentías realmente agotado. Tú te incorporaste un poco y quedaste inmerso en tus pensamientos.
    Kuro entró por la puerta, que estaba entreabierta, y comenzó a sobarse en tu pierna.

    Buenos días, Kuro... - dijiste algo cansado.
    ¡ (Tu nombre) ! - se escuchaba a Tohka - Vamos a desayunar. Se hará tarde.
 
    Tú bajaste a desayunar. No tenías buena cara hoy, lo primero que pensaste fue que sería solo cansancio.

    ¿Estás bien, (Tu nombre) ? No pareces el mismo de siempre - te dijo Tohka preocupada por tí.
    No te preocupes, Tohka-chan. Solo es cansancio, en cuanto me haya puesto en marcha para el día estaré mejor - le contestaste.

    Ella lo dejó así, por el momento y tras desayunar no se separó de tí hasta llegar a la clase. Allí te saludó tu mejor amigo, quien te confundió con un no-muerto debido a tu aspecto.

    Clase, a sus asientos. Tengo algo que anunciarles - dijo la profesora, que acababa de llegar - Hoy tendrán una nueva compañera. Pase por favor.

    Apareció por la puerta una mujer de cabello corto y blanco y unos bonitos ojos azules. Ella se situó junto a la profesora.

    Buenos días - dijo con voz calmada - Mi nombre es Origami Tobiichi. Un placer estar con vosotros.
    ¡Vaya! Es una belleza - se escuchaban a los chicos de la clase.
    Muy bien, señorita Tobiichi - dijo la profesora - Hay que buscarte un asiento.

    La chica comenzó a mirar toda la clase cuando de pronto te vio. Ella se quedó mirándote, no sabes por qué.

    (Ahora mismo debo de parecerle el fantasma de la clase) - pensaste para tí debido a tu estado.

Ella volvió a dirigirse a la profesora.

    Me gustaría sentarme en aquel lugar, detrás de ese chico - dijo señalando el pupitre vacío que había detrás de tí.
    Muy bien, de acuerdo - dijo la profesora - Toma asiento pues.

    La muchacha se sentó y se mantuvo en silencio durante toda la clase. Al dar la profesora por finalizadas las clases, ella se acercó a ti.

    Hola, ¿te importaría enseñarme el Instituto? Acabo de llegar aquí - dijo con voz dulce.
    ¿Yo? - confirmaste sin saber qué decir.
    Sí, creo que de todos, tú me has caído muy bien.
    (Tu nombre) no puede. No se encuentra bien, quizás otro día - dijo Tohka con un tono algo molesto mientras iba a tomarte del brazo.

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     ¡Hola a todos! Si, lo sé. He estado un siglo sin aparecer, pero es que la pereza me puede.

    Como compensación esta semana trataré de actualizar todos los días. Y en uno de ellos habrá doble capítulo. Porque en verdad, vosotros, queridos lectores, se lo merecen.

    ¡Que les vaya muy bien!