"¿No recuerdas nada?" Efectivamente, y aunque el se sorprendiera era así, es como si hubieran vaciado todo mi cerebro, al salir del hospital Andrew (que descubrí que se llama así y no Shaggy) fue a por mi, ayudándome en todo lo que pudiera.
Así supe lo que había pasado la última vez, yo estaba defendiendo una chica la cual iba a ser abusada y me enfrenté contra el matón que la acosaba y al parecer gané, pero después llego con su gente y me atacaron, casi morí y mis padres al creer que no saldría de esta se fueron de la ciudad... nadie sabe donde y si vendrán en algún momento.
Él me ha estado explicando todos los sucesos poco a poco en lo que apenas va del día, miro la hora, 10:30 am y es como si supiera toda mi vida gracias a mi amigo, al parecer el me conoce mejor que yo, vuelvo al barrio y todos se sorprenden, me reciben amablemente y me preguntan por mi accidente y lo asustados que estaban porque iba a ser desconectado para donar mis órganos... espera ¿accidente? Andrew me dijo que me intentaron matar y ellos dicen que fue un accidente...
-No puedo creerlo, creí que se llevaban mal .-murmuro una chica bajita, tocó mi brazo y me atrajo hacia ella-. No deberías estar tan tranquilo Chris, no es como parece, yo estuve contigo antes del accidente.
¿Entonces no es quién parece? No lo entiendo, alguien que dice que es mi mejor amigo y esa chica extraña que dice que nos llevábamos mal ¿a quien creerle? Agito mi cabeza, solo es un mal momento y ellos quieren gastarme una broma, parpadeo y es ahí cuando veo todo de nuevo, una chica con un vestido blanco tomando mis manos, su nombre... su nombre era delicado, como ella... Al.. ¡Alyssa! Abro los ojos de golpe y me tambaleo.
-Hay algo que no encaja... de eso estoy seguro, ¿Alyssa? -Menciono el nombre que había escuchado en mi mente y la chica bajita se voltea sorprendida-. ¿Tu eres Alyssa?
-¡Creí que no lo recordarías! Andrew nos contó a todos que perdiste la memoria y que lo mejor sería no traumarte con lo que te había sucedido, a la noche venme a visitar.
Me siento confundido, mareado, Andrew la mira feo y ella solo se encoje de hombros, me toma del brazo y me lleva a su hogar, él está molesto no lo sabe disimular, cierra la puerta de golpe y empieza a murmurar algunas palabras entre dientes, no se que dice pero me ha llegado a asustar, lo nota y me sonríe... ¿He hecho algo? Se va, va hacia la cocina pero regresa con unas latas frías.
-¿Quieres? -Se encoje de hombros y me pasa una-. Lo mínimo que puedo darte después de un largo tiempo en cama es una cerveza bien fría de esas mierdas baratas.
-No sabía que tenías tal lenguaje .-Abro la lata y le doy un trago, esta amarga-. Entonces... ¿Me intentaron matar o fue un accidente?
El escupe el sorbo que le había dado a su cerveza, se pone a toser como loco tratando de recuperar el aire, se aclara la garganta y se acomoda el cabello, me mira y suspira.
-Yo tampoco sabría decirte, pero fue ambas.
-No puede ser, tu me dijiste seguro que alguien me había intentado matar, ¡Lo dijiste con seguridad!
-¡Maldita sea! ¡Lo sé! Pero ahora que no recuerdas nada puedo tener a mi amigo de vuelta... ¿No es así? ¿Esta vez no podrías no traicionarme? ¿Eh? ¡¿Eh!?
-¡Detente! Me estás asustando....
El se para del sofá de golpe y tira la lata lejos, es un monstruo, no lo reconozco, se acerca a mi con una sonrisa escalofriante, me coloco de pie temblorosa mente y mire la lata... hice lo que cualquiera persona con sentido común haría... ¡Le tiré la lata en la cara! Y corrí... corrí hasta que salí de la maldita casa, logré correr varios metros hasta que me caí, mis piernas no daban más, miré atrás y ya no lo veía... ¿Quién carajos era ese maldito psicópata? Ya veo, Alyssa tenía razón, el no es mi amigo.
Veo la hora, 14:50 pm y el sol pega como si no hubiera un mañana, después de descansar me pongo lentamente de pie y me dirijo a la casa de ella a paso lento pero seguro, no hay señales de vida en la calle pero llegando a su casa se escucha un poco de musica de bar y unos ¿gritos? No, no son gritos... más bien son gemidos, diablos... con razón ha dicho que la visitara en la noche pero no tengo donde esconderme, suspiro, debe ser terrible que alguien no te deje tener sexo en paz.
Golpeó la puerta, no hay respuesta. Vuelvo a golpear esta vez de manera más intensa hasta que por fin un chico abre la puerta, me mira con desagrado y molesto, la verdad hasta yo miraría a cualquiera de esa manera, le toco el hombro para pasar y me empuja afuera.
-Eh, ya, déjame pasar
-¿Estas loco? Vienes a interrumpir y... ¿quieres que te deje pasar? Eres bien idiota .-Comenta molesto tronandose los dedos-.
-Mira tu greñas locas o me dejas pasar o tendré que pasar a la fuerza, no tienes otra opción .-Antes que me diera cuenta el sujeto tira un puñetazo hacia mi cara pero era demasiado evidente así que pude esquivar, como supuse estaba solo con una toalla cubriéndose desde la cintura hacia abajo-. Esto me va a doler más a mi que a ti.
Una vez que le... bueno... sería como "machacar" o aplastar las bolas, entré a la casa y cerré la puerta, dirigiéndome a la habitación del segundo piso, donde escuchaba cada ciertos segundos como llamaba a ese idiota.
-¿Al? Ah, aquí estás, con razón me has dicho que te visite a la noche, tenías gente ahora ¿no?
-Uhm... si, pero también era para hablarte sobre los riesgos que corres aquí
-Tranquila... ya no es necesario que me digas, creo que Andrew casi me mata en su casa.
-¿¡Cómo!?

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Nefelibata
RawakAquel día algo cambió, nada será lo mismo y los tiempos se repetirán.