Vocablo envenenado

25 3 0
                                    

Serpientes insensatas quieren pillarme desprevenido para poder echarle su veneno a este vino que tengo en la lata de la cual yo he bebido, lo que pasa es que estas no se habían cartado de que yo lo tenía previsualizado porque se les noto a la legua que intentaron hacerme un insensato, que perdiese los estribos y solo vocalizase estupideces, pero antes de decir lo que tú dices y creerme que con ello todos son mis esbirros y putas, mientas escribo garabatos, prefiero explicarte lentamente que el veneno de vuestro vocablo que vuestra boca segregó no me aflige, porque mientras que vosotros con cuatro tontería que digáis levantáis a una muchedumbre de la grada que grita que subáis a la cumbre, yo con unos versos melancólicos que escribo consigo sacar a una persona de su hunde.

 Y mientras mis recuerdos se hunden en un profundo sueño del cual espero no despertar, recuerdo aquellos momentos en los cuales he estado con esas erratas que me han llamado rata por ser como era sin conocerme de veras, y te digo de verdad que al principio vas a pensar en poner tu vida a subastar, pero según entiendas que no hay nada más valioso que uno mismo y que la gente que quiere comprarte es la que se mete contigo, sin sentido alguno, porque de su reflejo ya se han aburrido y en vez de buscarse nuevas facetas suyas prefieren meterse con las tuyas, ya que es más fácil reprochar los fallos ajenos que los de uno mismo, haciendo así más ameno el dolor que sentimos y creando así un cinismo lleno de contradicciones y controversias por querer tener una razón efímera que el único confín de esta es la de ser preponderante ante las demás, percatate que lo único que haces es engañarte a ti y dañar a personas que se convierten en unas víctimas presas de su inocencia.

Y es que llevo demasiado tiempo con la sensación de una presencia que batalla entre si ¿sí? o si ¿no?, entre sí aguantarme o despacharme, entre sí soy yo u otro más de los entes que nos observen despreciablemente mientras intentan nadar en su mar pero no son capaces, porque prefieren mantener la apariencia de ser dichoso y feliz a intentar por algún medio desahuciar del interior el tapón que hace de su mar un paramo de vegetación mustia, donde cada pequeño lago es un infierno y aveces sentir estar entre medio de aquellos paramos.

Divagando entre tantas decisiones y opciones las cuales me hacen pensar tan extraño de mi que en ocasiones siento que ojalá el ocaso me llevase hasta un hueco fúnebre en el cual se van juntando esas máscaras vacías que velan porque una paloma consiga sobrevolar sus cabezas

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jan 08 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Poesía de papelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora