Pᴀʀᴛᴇ Úɴɪᴄᴀ

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Como casi todas las mañanas después de completar una misión, Steve Rogers llega al Triskelion para entregar su informe final. Lleva las ropas típicas que acostumbra, una remera azul, pantalones claros y un saco de cuero. El capitán tiene asignada una oficina en caso de querer trabajar allí, pero no la utiliza mucho. Saluda a las personas que lo observan caminar. La mayoría le responde con una sonrisa.

Rogers llega hasta su oficina, se encarga de firmar y después sellar cada hoja de su informe antes de acercarlo hasta la encargada de entregárselos en persona a Fury. Agradece que aún le permitan reportarse con informes escritos a mano. Va avanzando en el uso de medios informáticos, pero aún no se siente del todo cómodo con ellos. Le sigue pareciendo que la tinta y el papel son elementos que lo ayudan a terminar los informes de forma más rápida y eficiente. Antes no había que elegir entre tantos tipos de letras o incluso los colores. No todos los documentos suelen llegar hasta el hombre con parche, pero por algún motivo bastante evidente, todos sus informes terminan en sus manos apenas son entregados. Las misiones del supersoldado suelen ser muy importantes para SHIELD. La organización no ha pensado en desperdiciar ningún talento del hombre que despertó luego de haber estado durmiendo durante aproximadamente setenta años.

De vez en cuando, acostumbra bajar hasta la sala de entrenamiento del edificio. Le recuerda a su época en la milicia. Los agentes de SHIELD toman el entrenamiento con seriedad. Siempre hay alguien en ese lugar. Cuando se acerca por el pasillo, el rubio se percata de que aquel no parece ser un día particularmente común. No, pues hay un grupo de agentes alrededor del tercer ring para lucha y entrenamiento cuerpo a cuerpo.

-Cap... -Brock Rumlow se acerca para saludarlo con un apretón-.¿Vienes por el reto? -pregunta con gracia.

Steve no sabe a qué se refiere. Así que intenta ver lo que está llamando la atención de todos.

-No estoy seguro de que alguien me haya mencionado un reto -responde con seriedad.

-Es algo nuevo, de apenas dos días atrás -le informa el líder del equipo STRIKE.

-¿En qué consiste? -se interesa cruzando los brazos.

Los vítores de los agentes presentes impiden que alguien pueda hablar. Algunos se apartan para que la agente Romanoff pueda bajar, permitiendo que Rogers pueda verla y a otro agente que ahora yace tirado en el piso. La pelirroja lleva puesta una remera sin mangas azul marino y una calza negra con detalles rojos. Natasha se acerca hasta el lugar donde había dejado su pequeña toalla y su botella de agua. Necesita recargar energías.

Otros agentes saludan al capitán ahora que todos dejan de estar pendiente de lo que sucede en el ring.

-Capitán Rogers, ¿ha venido por el reto? -una agente algo bajita, cabello castaño corto y ropa de entrenamiento se acerca con una plancheta y un bolígrafo en mano.

Steve utiliza unos segundos para recordar el apellido de la agente. Ya la había visto en alguna de las reuniones donde se analizan las estrategias para diferentes misiones.

-Agente Clark -la saluda-, le estaba diciendo a Rumlow que no he escuchado nada sobre un reto.

Ana Clark le sonríe con ojos brillantes. A ella le encanta presenciar verdaderos combates en los entrenamientos.

-Es sencillo. Se enfrentan a la agente Romanoff. Ella ha aceptado salir en una cita con la persona que la venza en un enfrentamiento cuerpo a cuerpo. Son cinco por día, tengo un último lugar libre -ofrece esperanzada.

La idea de una buena pelea con Romanoff llamaba poderosamente la atención del supersoldado. Aún no había tenido la oportunidad de pelear con ella, solo la había observado patear traseros con una gracia única.

¿Asustado, anciano? [Romanogers ] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora