Estaba a punto de hacerlo cuando Amy detuvo sus manos y cerró los ojos.
- No puedo, enserio, no puedo –Se levanto-
- Pero Amy, ya habíamos quedado que solo seria esta noche –Tomo su mano-
- No es correcto, por más que lo deseemos los dos, no podemos –Se puso el bracier-
-Amy no puedes dejarme así –Se levanto de la cama-
- Solo olvidemos esto y listo –Poniéndose su camisa-
- Nunca podre olvidar esta necesidad de tenerte junto a mí, nunca –La junto a él-
- Liam, basta de esto, enserio no podemos –Se alejo de el-
- Solo dime que no lo deseas y me alejare, solo dime eso –Le dijo con un tono dulce-
- No puedo, porque mentiría –Salió de la habitación-
Liam sintió un gran enojo, se puso el pantalón rápido, sabía que ella necesitaba esto tanto como él, pero seguía resistiéndose al destino, era estúpido y inmaduro su juego, se amaban un día, se odiaban el otro, se divertían y al otro se deseaban, tal vez sea la confusión de sus sentimientos, de la situación entre ellos, pero de lo que debemos estar seguros es que ellos se aman, pero su amor es prohibido para ellos, pero en verdad, no lo es.
Liam termino de ponerse su ropa y fue a buscar a Amy, fue a su cuarto y escucho el ruido del agua de la regadera.
Amy solo pensaba en el gran error que había cometido, cayo y muy bajo, solo sus deseos eróticos habían dejado que sus pensamientos se fueran al cielo, esa noche había sido la mejor, aun que no quiera admitirlo, pero vamos, fue la experiencia más hermosa de su vida, los deseos de ser solo de él, de que el la tratara como la mejor de las rosas, Liam la había hecho sentir sensaciones nuevas, por primera vez un chico la había hecho sentirse de esa manera, Liam era un chico único.
Solo le pegaba a la pared, deseaba estar en otro lugar, en otro momento, donde solo pudieran estar ellos, y poder ser felices, pero eso siempre será imposible, Liam, interrumpió sus pensamientos, empezó a golpear la puerta del baño.
- Tenemos que hablar Amy -Recargado a la puerta-
- Liam vete, quiero estar sola –Dejando que el agua callera por todo su cuerpo-
- Se que te sientes culpable, pero tú no tienes la culpa, la tengo yo –Suspiro-
- No, la tenemos los 2, tu por hacerme sentir tan especial y yo por caer en tus juegos –Enojada-
- ¿Cuáles juegos? Solo fui sincero, que Ivan no te haga sentir de esta manera no es mi culpa –Riendo-
- Ivan es un chico con valores familiares, nunca haría esto –Enojada-
- Por favor, conozco a Ivan, se que lo único que quiere es sexo, te tratara como reina hasta que lo consiga –Serio-
- Ivan no es así, y mejor déjame sola, solo quiero estar sola, vete –Con un nudo en la garganta-
- No hasta que hablemos –Pegándole a la puerta-
- Ya lo estamos haciendo, ahora vete –Molesta-
- Me iré, solo porque estas muy alterada, pero mañana hablaremos, quieras o no –Le dio un golpe-
Liam miro la puerta y bajo la mirada, salió del cuarto, Amy no tardo en caer una depresión grande, las lagrimas no tardaron en empezar a caer, estaba desesperada, no tenía ni idea de cómo podría ver a Ivan a los ojos después de esto, a sus padres, y mucho mas a Liam, tenía que encontrar una manera de zafarse de todo eso, pero como.
Después de un raro de tranquilizo, y salió de la ducha, se puso la piyama de nuevo y se acostó en la cama, apago todas las luces, solo la luz de la luna y de los grandes edificios alumbraban su cuarto, miro a la ventana, no sabía qué hacer, tenía la idea de irse, pero a donde, no quería ver a Ivan en esos momentos, no podría ir con sus padres.
Se levanto rápido de la cama, se puso un short de libáis y tomo una mochila, metió un poco de ropa y lo necesario, salió de su habitación con el mayor silencio que pudo, bajo las escaleras y salió del departamento, estaba sola la recepción, perfecto, así nadie la vería salir, era de madrugada, pero New York se vive de noche, tomo un taxi y fue directo a casa de su mejor amiga, Vanessa.
ESTÁS LEYENDO
~♥365 Días junto a ella♥~
FanfictionLa familia McMillan Payne es como toda familia después de un divorcio, el señor Geoff Payne al divorciarse de su esposa Pattie Mallete encuentra el amor con la señora Sarah Gómez al conocerse vuelven a creer en el amor, ellos dos tienen hijos, por p...