Capítulo 13 "El deber de un Astral"

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La enorme deidad, un dragón de color dorado brillante y rugidos ensordecedores, se alza sobre la ciudad destrozando los edificios más altos sólo con el movimiento de su alargado cuerpo.

Faust: *Asustado* Esto es... ¿Cómo ha llegado aquí?

Zeon: *Estirando las piernas* Esto es una situación de emergencia. Kuro, vayamos a ayudar.

Kuro: *Golpeándolo cómicamente* ¡¿Acaso vas a hacer frente a esa mole tú?!

Zeon: *Sujetándose la cabeza* ¡AY! ¡No! Pero hay que ayudar a la gente que se vea afectada por los destrozos. A antes empecemos, menos probabilidad de que haya víctimas habrá. En estos casos hay que ser rápidos y eficientes, ¿no? O eso me dijo Ray.

Kuro se sorprende al escuchar las palabras de Zeon. Aún lo considera un egocéntrico, despreocupado y bueno para nada, pero acaba de dar de lleno lo que hay que hacer con sus palabras.

Kuro: Sí. Tienes razón. Hay que movilizarse.

Zeon: *Mirando a Faust* ¿Puedes moverte, fogones?

Faust: *Enfadado cómicamente* ¡¿A quién llamas fogones?!

Zeon: Sí, lo estás. ¡Vamos!

Zeon y Kuro cogen carrerilla y saltan concentrando el Koma en sus piernas para no recibir daño al caer. Dejando a Faust atrás, los dos comienzan a correr a toda velocidad una vez tocan el suelo, esquivando y dejando atrás a los demás alumnos que han salido a ver qué está ocurriendo.

Cranell: *Sorprendido* ¿Zeon?

Verde: *Desde la ventana* Je. Nada mal, Zeon. *Saltando* ¡Yo también me apunto al rodeo!

Hana: *Rezando* (Por favor... Que todo salga bien...)

Alumno 1: ¡Todos! ¡Hay que ocultarnos rápido!

Alumno 2: ¡Los Astrales de la ciudad se encargarán del dragón! ¡Nosotros no seremos más que un estorbo!

Una chica de vestido elegante se ríe levemente, llamando la atención de los que se encuentran en esa aula. La chica, de pelo castaño y recogido en un par de coletas bajas, alza su cabeza y, dejando ver su bonito rostro junto a sus enormes ojos azules, comienza a hablar con autoridad.

???: Aquellos que sean capaces de luchar deben ir a ayudar a los civiles, no a combatir contra la Deidad.

Alumno 3: E-Es cierto. Dannia tiene razón. Nosotros también somos Astrales como ellos.

Alumno 1: Pero... Ese monstruo da mucho...

Dannia: *Poniéndose en pie* Es normal que una Deidad así de miedo. Es un miedo que cala profundo, que te hiela la sangre y los huesos. Pero los Astrales existen para hacer frente a este tipo de amenazas. ¡Varios Astrales están jugándose la vida para salvar a la ciudad de este ataque sorpresa! Y ahora pregunto, ¿sois Astrales o cobardes?

Alumno 2: Yo...

Dannia: ¡Es una sola Deidad! ¡Y nosotros un equipo completo! ¡Apoyáos en vuestros compañeros y salid ahí a demostrar lo que valéis! ¡Tenemos que demostrar que nuestra generación será la más memorable en la historia!

Los demás alumnos, motivados y alentados por las palabras de Dannia, lanza un grito de guerra al unísono y comienzan a salir del aula tanto por puertas como por ventanas, quedando ésta vacía en segundos.

Dannia: *Riéndose tapándose la boca* Vaya, vaya. Realmente mi discurso ha funcionado mejor de lo que esperaba.

Zeon y Kuro, por su parte, han motivado también a varios alumnos que estaban observando desde el patio del instituto, siguiéndoles en su carga hacia el dragón.

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