Cambiando la historia... (Carlos De Vil)🐾❤️ |PAUSADA|

Capitulo 5: "¿Por qué no te gusto?"🙁

Narra Alexandra:

Carlos, Jay y yo seguíamos acostados en el suelo de nuestro dormitorio. Hasta que Jay se levantó y salió a "explorar" el lugar, o sea a robar, dejándonos a Carlos y a mí solos.

Esta es tu oportunidad de hablar más con él. No lo arruines, Alex.- pensé.

- Oye, Alex.- dijo el peliblanco girando su cabeza para mirarme.- ¿Con qué vas a dormir? Digo, no llegaste con alguna maleta, así que, supongo que no tienes ropa o pijama.- se levantó del suelo y me estiro la mano para ayudarme a levantar.

- Muy buena pregunta, Carlos.- dije aceptando su mano y parándome del suelo.- Ahorita voy a cosas perdidas, a ver si encuentro algo de ropa.- con mi mano libre me sacudí el polvo de la parte trasera de mi pantalón, ya que mi otra mano sigue unida a la de Carlos.

Carlos soltó mi mano, se dirigió a su/nuestra cama y se quitó su chaqueta.- ¿Qué tal si yo te presto ropa?- me volteo a ver con una sonrisa.- Para que duermas y para mañana. En lo que consigues algo.- dijo tan seguro de sus palabras que hasta que creí que no era él.

Me acerqué hacia él.- Me encantaría.- me senté en la orilla de la cama.- Pero, ¿no crees que tu ropa me va a quedar gigante?- pregunté con una sonrisa un poco burlona.

- Estoy seguro de que se te verá bien.- dijo sentándose a lado de mi y dedicándome una sonrisa.

Y aquí estamos, sentados en la orilla de la cama mirándonos fijamente con una sonrisa en nuestro rostro. Examinando cada detalle de la cara del otro, sin que nada o nadie más nos moleste.

Es increíble cómo tu vida puede cambiar en un instante. Hace dos meses estaba llorando por la muerte de mi ídolo, de la persona que me sacaba una sonrisa con tan solo subir una foto o verlo en la televisión, esa persona con la que me quería casar y tener una familia, pero desgraciadamente no pude ni llegar a conocer... O eso creí, porque ahora lo tengo frente a mí con una sonrisa en su cara.

- ¿Interrumpo algo?- dijo una voz masculina, provocando que Carlos y yo saliéramos de nuestro trance.

Carlos se paro rápidamente de la cama y dirigió su mirada hacia la puerta encontrándose con Jay.- ¿Qué? No, no para nada. Solo estábamos... Mmmm, nosotros...- dijo nervioso.

- Okay...- Jay paso y dejó las cosas recién robadas en su cama.- Alex, ya sé porque no quisiste dormir en mi cama.- se cruzó de brazos.

- Ya te dije el porqué, Jay.- me pare de la cama, me dirigí a una de las sillas de la mesa de madera que está en el centro de la habitación y me senté.

- Lo sé, pero no es porqué según me muevo mucho en la noche.- dijo Jay sentándose en la silla que estaba a mi lado.

- ¿Entonces por qué?- lo mire incrédula.

- Porque le gusto a tu amiga Miranda y no querías que se molestara contigo.- me guiñó el ojo.- Además de que te gusta Carlos.- dijo con una sonrisa cínica.

Narra Carlos:

- ¡¿QUÉ?!- grité sorprendido por lo que dijo Jay.

¿Yo? ¿Gustarle a Alexandra? No es posible. No me mal interpreten, Alex se me hace una chica muy linda, pero no creo que ella se fije en mí.
Solo mírenme soy un chico bastante inseguro, miserable, al que en vez de enseñarle a amar le enseñaron a robar. ¡Vaya! Ni mi mamá me quiere, creo. ¿Cómo es posible que Alex me quiera?