Capitulo 1

604 40 12
                                    

Eva

¡Hoy es el primer día de clases! Me siento muy bien.
Voy a volver a ver a Ana, mi mejor amiga desde que éramos niñas, ambas de 16 hoy en día. No sé cómo podemos ser amigas, ella es todo lo contrario a mí, pero bueno, así es la amistad, ¿no?

-¡Hija! - exclamó mi madre. -¡Baja que se te va a hacer tarde! -.
Salí de mi ensimismamiento y me dirigí al baño para bañarme.

Después del baño, me arreglé de manera normal, como siempre, ya que no soy de esas chicas que el primer día se visten «Wow» para impresionar a todos. Con que me sienta cómoda estoy bien.

Me coloqué una remera holgada color rosa, unos jeans y una chaqueta fucsia. Bajo las escaleras y voy hacia la cocina donde se encuentra mi madre.

-Hola Ma!!- le doy un beso en la mejilla

Mamá: Buen día, hija, ¿lista para tu primer día?

-Siempre lo estoy- le sonrió a lo que ella me da una mirada divertida

-Bueno, ve que se te hará tarde- me tira un beso y sube arriba de seguro para cambiarse ya que seguía en pijama

Terminé de desayunar y salí para la escuela.

Iba caminando mientras escuchaba mi canción favorita: Happier. Me gusta mucho caminar escuchando música, es como si me olvidara del mundo por un rato.
Se me había hecho tarde debido a que me perdí en mis pensamientos otra vez, así que venía caminando rápido. Por concentrarme en eso, no vi que alguien venía delante mío, chocando y cayendo de espaldas contra el pavimento.
Miré a la persona con la que había chocado. Era un chico alto vestido totalmente de blanco y negro algo que me pareció muy raro más a mi que me encanta todos los colores menos esos dos.
Lo miré esperando a que se ofreciera a ayudarme ya que se me había caído mis cuadernos, pero solo me miró con una mirada de desaprobación para luego irse sin más.

Me pareció muy mal de su parte, ya sé, fue mi culpa por pensar tanto y no mirar por donde camino pero por lo menos me podía haber ayudado a levantarme. Busqué mi celular para mirar la hora, ya era súper tarde así que fui rápido y golpeé la puerta como ya todos estaban adentro.

-Tarde el primer día, señorita- abre la puerta el profesor y me mira serio

-Lo siento, profesor. No volverá a pasar

-Eso espero- dejándome entrar

Por suerte, el asiento al lado de Ana estaba libre así que fui con ella.
Toda la clase ignore por completo todas sus preguntas de por qué llegue tarde, mi cabeza estaba en otro lado. En el choque con ese extraño chico, no podía borrar su mirada en mí.

¿Quién es él?

¿Por qué no dejo de pensarlo?

¿Por qué fue tan grosero conmigo?

¿Por qué despertó tanto mi curiosidad?

La campana me devolvió a la realidad

-Hey, ¿estás viva?- Moviendo su mano para que le haga caso

-Sí, ¿qué paso?- intento concentrarme en la conversación

-¿Por qué has llegado tarde?

-Ah, es que cuando llegaba choque con un chico extraño afuera

-¿Quién es?

-Ni idea

-Bueno, concéntrate en esta otra clase, por lo menos

-Qué tenemos ahora?

-MATEMÁTICAS!!

Ana amaba esta materia yo, en verdad, la odio pero no me quejo igual tengo buenas calificaciones.
Caminamos hacia la siguiente clase y ahí se encontraba el aburrido profesor de matemáticas, en verdad, odio esta clase. Espero no dormirme.

*Clases después*


En ninguna clase me pude concentrar ni un poquito por ese chico, mejor dicho por ese extraño, y si es algún loco que me embrujo para luego llevarme con él a un bosque para matarme

Ay, Eva si que eres tonta

-Eva y si vamos a mi casa a ver películas todo el día, luego hacemos la tarea juntas- exclama Ana con cierta emoción

-Me parece muy bien, espérate llamo a mi mamá y le preguntó- saco mi celular y empiezo a llamarla

Escucho todo el reproche de mi mamá por no decirle más antes pero finalmente acepta con la condición de no tardarme tanto.

Empezamos a caminar hacia la casa de Ana pero ella propone comprar unos chocolates.

Solo existe una cosa en la cual nos parecemos y es la obsesión con los chocolates, ¿quien no se obsesiona con eso?
Ella para en una tienda a comprar mientras yo voy al parque que está a la vuelta. Me siento en una banca cerca y me coloco los auriculares.
De pronto se me viene a la mente otra ves la imagen de ese chico, tenia algo en su mirada que despertaba mi curiosidad.

Pero...¿qué era?

Siento como que tiene algo oscuro en el. No sabes ni quien y ya estas diciendo eso, te pasas Eva.

Minutos después llega Ana sacándome de mis raros pensamientos.

-Qué te parece si comemos los chocolates aquí, después vamos a casa para hacer la tarea y dejamos las pelis para otro día- lo dice mientras se sienta a mi lado y me pasa un chocolate

- Sí, está bien- lo agarro y empiezo a comer

- ¿Qué más sabes del chico raro?- se da vuelta, mirándome fijamente

-Nada, a penas chocamos se fue, me da igual- digo restándole importancia pero en el fondo sé que quiero saber de él

- Debemos averiguar- pone su cara divertida a lo que yo niego. Ana está loca

*Horas más tarde*

Me pasé toda la tarde con Ana y cuando ya estaba por ocultarse el sol decido ir para mi casa.
En todo el camino me pasé escuchando música y mirando el paisaje de los atardeceres de la cuidad de Buenos Aires.

Ya estaba por llegar a mi casa y justo en la casa de al lado veo al chico extraño sentado, solo, afuera.
Estaba tan tranquilo con los auriculares, dibujando algo en un cuaderno.

Sentí lo mismo que hoy a la mañana
¿Quién era? Se veía alguien muy raro y antisocial, ¿será que le hablo? No, mejor no. Paso de largo y entro a mi casa.
¡Pero debes disculparte, Eva! ¿Ay, qué hago?

No se olviden de darle a la estrellita, muchas gracias por leer❤️

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

No se olviden de darle a la estrellita, muchas gracias por leer❤️

Nada Me Impide Amarte...💖Donde viven las historias. Descúbrelo ahora