•Marvel• [one shots]

Agente

Sobre cómo Coulson sigue enamorado de la misma mujer, a la que no puede ver, como a muchas otras personas, que piensan que él está muerto.

-

¿Y Coulson? 

-Está fuera. - respondió la severa voz de la agente May -Volverá para esta tarde.

Nadie preguntó más. Así era la vida de un agente. Siempre habían secretos.

Todos pensaron que estaba cumpliendo una misión, estaba en alguna reunión, o hasta quizás se encontraría con Nick Fury, pero no. Todos pensaban de forma errónea. Siempre cuando había un día para escaparse lo hacía. No podía dejar de visitarla, dejar de protegerla en silencio, sin que ella o ninguno se diera cuenta. Desde la vez que tuvo que involucrarla en una misión y ponerla en peligro, sentía cada vez más la necesidad de verla y mantenerla a salvo. Sabía que era algo incorrecto, no tenía el derecho de hacer eso, era hasta algo egoísta, pero a veces ser un poco egoísta por uno mismo no era tan malo.

"Si la vida fuera más simple. Ella sabría que yo estoy vivo y quizás podríamos estar juntos" 

Phil conocía sus horarios. Sabía que ella no tenía nada que hacer hoy. Sabía que hoy no tenía práctica con la sinfónica; sabía que ella se levantaría a la misma hora de siempre para salir a trotar; sabía que devuelta a su departamento pasaría por la lavandería y quizás por un café, el cual tomaría mientras revisaba las noticias en el periódico; sabía que ellos podrían verse una y mil veces, que siempre debería explicarle lo sucedido, ella lloraría y le diría que se lo extrañaba mucho, pasarían el día juntos, para después de unas horas volver a borrarle la memoria, eliminar las últimas horas, hacerla pensará que estaba dormida, que una vez más había soñado que él volvía. 

-¿Entonces nunca moriste? 

Él negó con la cabeza.

Como era de costumbre ella se lanzó a sus brazos. Él la apegó más a su cuerpo, aspiro su aroma, se relajo y olvidó que era ser un agente por unos segundos. Pensó en cómo hubiera sido su vida si nunca hubiera "muerto" o si realmente hubiera muerto. 

-Estoy aquí, y siempre lo estoy, aunque no me veas, cuando sientas que alguien te está mirando, soy yo... protegiéndote...

"He estado aquí, nunca me fui. He presenciado tus conciertos, yo te salve aquella vez, siempre he mantenido tu departamento protegido, al igual que a ti, por lo que cada mes al venir, después de disfrutar unas horas, las mejores horas junto a ti" Coulson le tomó las manos a la chelista "Debo borrar estos recuerdos. Todo por protegerte, por qué te quiero mucho, no quiero ponerte en riesgo y menos quitarte la maravillosa vida que tienes."

Los ojos de la mujer chorreaba a mares, igual que las veces anteriores. 

Coulson se preguntaba una vez más que sería lo que pasaría si no eliminará sus pensamientos al final de todo. Si pudieran seguir viéndose y volver a ser más que amigos, como ya una vez lo habían sido. Lamentablemente conocía el riesgo, y no lo correría, ya que uno de sus mayores posibilidades era exponerla. 

Se sentaron juntos en el sillón de la sala a hablar sobre la vida. Habían veces que la mujer repetía la misma historia que antes, pero a Phil no le importaba, cuando estaba con ella nada importaba. Se mantuvieron así casi por toda la tarde, hasta que ella cayó rendida ante el sueño en los brazos de su enamorado. Coulson la tomó entre sus brazos de forma delicada, intentando no despertarla. La llevó a su habitación y la tendió en la cama.  Le quitó los zapatos y la cubrió con la manta. 

El agente busco en su bolsillo el pequeño aparato. Cuanto sufría al hacer esto. Le dolía demasiado, más que cualquier decisión, más que perder a un agente, esto era como volver a perder su vida. 

Fitz-Simmons habían hecho un pequeño aparato que borraba las memorias de un individuo pero solo por 24 horas o menos. No había servido mucho en misiones pero para él era totalmente útil. Dudo unas cuantas veces antes de apretar el pequeño botón frente a su hermoso rostro. Una luz parpadeo. El hombre cerró los ojos por unos segundos. 

Estaba hecho.

Ella no recordaría este encuentro, al igual que los anteriores.

Phil Coulson le dio un último beso en la frente a la talentosa música. 

"Volveré" susurro para sí mismo.

Salió de su habitación dejando la puerta cerrada tras de él.

"Quizás algún día, después de que todo esto acabe, podré volver por ella. Irnos a un remoto lugar, quizás a una isla y vivir juntos, como alguna vez lo soñamos" 

Él no quería amarrarla. No podía obligarla a esperara a alguien quién, se supone, nunca podría volver. Coulson sabías que cualquier día de estos ella podría enamorarse, casarse, formar una familia en donde él no sería parte. Pero así era su vida, unas cosas por otras. 

"Quizás yo también debería dejarlo ir..."

Y así como miles de otras veces, ella despertó sintiendo su presencia; sintiendo que él la acompañaba, recordando sus sueños, donde ella y él se abrazaban en la sala de su casa; recordando que él se había ido, ido al más allá, que nunca volvería, que era algo totalmente imposible; recordando el pasado; dejando más de una lágrima salir; pensando que a él le gustaría verla feliz; pensando en que quizás lo debía dejar ir...

La mujer aparece en un capítulo de la primer temporada de agentes de SHIELD y es mencionada en Avengers.