φWhen the rain comes, I'll be your shelter.
When the wind blow, we'll be together.
When the storms they rise, I'll be right here by your side.
And I'll sing
I'm gonna love you, forever I do.
I'm gonna spend all my days with you.
I'll carry your burdens and be the wind at your back.
I'm gonna spend my forever, forever like that.Cuando llegue la lluvia, seré tu refugio.
Cuando sople el viento, estaremos juntas.
Cuando suban las tormentas, estaré aquí a tu lado.
Y voy a cantar
Te amaré, siempre lo haré.
Voy a pasar todos mis días contigo.
Llevaré tus cargas y seré el viento a tus espaldas.
Voy a pasar mi "para siempre", para siempre así.- Yo no voy a verlo, hazlo tú.
Chloe le pasó el sobre con el sello de la universidad a Beca. Estaban en el auto esperando que Alison saliera de su clase de ballet para llevarla a casa donde Aubrey y Stacie las esperaban para celebrar un nuevo aniversario de casadas. Chloe había recibido la correspondencia ese día, y tomó todos los sobres antes de salir del edificio y meterse al auto. La carta de la universidad estaba ahí, pero se sentía incapaz de leerla por sí misma. Había sido citada a una entrevista un mes atrás, y fue su primera visita a las instalaciones del enorme campus. Además, conoció la nueva casa de Beca, y a algunas de sus amigas. Estuvieron allí por siete días, lo suficiente para saber que se acostumbraria rápidamente al clima, a las playas, y claro, a la compañía de Beca.
Ese día estaban en Atlanta, y se habían comprometido a buscar a Alison de su clase para pasar más tiempo con ella, que tenía un especial cariño por ambas. La niña sabía que posiblemente sus tías vivirían un poco lejos, pero también sabía que podría ir a visitarlas en las vacaciones y le hacía mucha ilusión conocer la playa.
- Dame esos papeles.- la actriz casi le arrancó de las manos el sobre y empezó a abrirlo.- Diga lo que diga creo que lo hiciste bien.
- Eso no me tranquiliza.
- Lo sé. Pero necesitas escucharlo.- sacó la hoja blanca, impresa con fuente negra y empezó a leer.Nos dirigimos a usted a fin de informar que luego de las instancias de evaluación correspondientes al mes de octubre del corriente año, el Consejo conjunto al equipo de profesionales de selección de la Universidad, ha decidido aceptar su solicitud para estudiar en las instalaciones de nuestra honorable Casa de estudios...
- ¡Lo hice, Beca!
- Espera, hay más...Nos complace informar la disposición de otorgarle una beca completa para sustentar sus estudios desde su inicio hasta su culminación, y por ello adjuntamos las bases y condiciones para el mantenimiento de la misma bajo el nuevo régimen de la Universidad. Sin otro particular, nos despedimos con un cordial saludo, Consejo Superior de la Universidad del Sur de California.
- ¡Beca!- la alegría de Chloe era desbordante, y Beca no pudo evitar reír ante su reacción.- ¡Lo hice!
- Te lo dije...
- ¿Puedes dejar de decir "te lo dije" y darme un abrazo?
Claro que Beca la abrazó, aún en medio de la incomodidad que implicaba darle un abrazo dentro del auto. Había pasado por muchos momentos con Chloe, pero ese se sentía inmensamente especial. La sonrisa de la pelirroja era auténtica, de esas que pocas veces había experimentado en la vida, pero por la que estaba completamente agradecida. Se merecía esa alegría, se merecía la idea de volver a empezar luego de todo lo malo que había pasado, se merecía su oportunidad en la Universidad, una que, por esa vez, no desperdiciaria.
El festejo de esa noche fue por partida doble, y aunque esa noticia significaba que los días de Chloe estaban contados en la ciudad, Stacie y Aubrey no podían estar más felices por ella.----
La vida en Los Ángeles era realmente diferente a cualquier cosa que Chloe había experimentado en el pasado. Con Beca filmando una película de época junto a Paul Freid, ella dedicaba mucho tiempo a la universidad y podía tomarse toda la mañana para estudiar en el silencio de la enorme casa en la que estaban viviendo.
Hablaba con Stacie y Aubrey frecuentemente, también con Alison. Las extrañaba muchísimo, al igual que su vida en Atlanta, pero era feliz, y no se arrepentía de ninguna decisión tomada antes de llegar a la ciudad de las estrellas. Beca había insistido en buscar una asistente nueva, y la liberó de ese puesto para que estuviera completamente enfocada en sus estudios.
Todo parecía fácil la mayor parte del tiempo. Despertar temprano, ir a caminar juntas, partir a sus respectivas responsabilidades luego, y regresar a la casa para compartir las últimas horas del día antes de ir a la cama. No era una rutina inflexible, estaba sujeta a los huecos de tiempo que cada día les daba, y se permitían cambiar un poco, inventar nuevas cosas, experimentar nuevas experiencias.
Una vez a la semana, Chloe asistía a terapia de forma voluntaria, porque sentía que eso le hacía bien. Beca viajaba de vez en cuando, por una o dos semanas para filmar o participar de programas donde era la invitada. Ya habían aprendido a convivir con eso, y la pelirroja aceptaba quedarse en casa durante ese tiempo. Estaban creando una relación nueva, una relación sana, sin dependencias, donde ambas podían explorar cada fase de sí mismas en libertad. Beca pudo evitar hablar de ellas por un largo tiempo, y aunque no se ocultaban al salir a la calle, nadie le preguntaba sobre la misteriosa y hermosa chica que la acompañaba a eventos, que tomaba su mano en el supermercado, o que se recostaba en su hombro cuando iban al cine. Hizo formal su relación en redes sociales para su siguiente cumpleaños, cuando compartió una foto de ambas en la nieve de Maine, aunque para entonces ya era un secreto a voces.
Aceptó finalmente su trabajo con Alfonso Cuarón, y ayudó a Chloe a conseguir una pasantia mientras tanto. Trabajar con Cuarón no era cualquier cosa, sumaba muchos puntos a un currículo, y además le permitía aprender al lado del mejor. Sin mencionar, claro, que estaba cumpliendo un sueño antes de graduarse.
El último receso de invierno que tuvo lo aprovechó para viajar hasta Atlanta a pasar las fiestas con sus amigas, visitar a la Sra. Osment y tomar un par de días de descanso junto a Beca. Pocos, porque ambas debían regresar cuanto antes y retomar sus rutinas. Ella tenía algunas asignaturas para terminar, y Beca ya estaba pensando en el rodaje de una película para la plataforma de Netflix que la tenía como protagonista.
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(Re) Escribir nuestra historia.
FanfictionChloe Beale, Beca Mitchell. Dos historias de vida. Dos historias distintas. Dos historias entrelazadas, pero con caminos separados. Una sobreviviendo el día a día. La otra exitosa y con sueños que no paran de cumplirse. Sin embargo, la vida las pond...