σ
I just want to start again,
And maybe you could show me how to try,
And maybe you could take me in,
Somewhere underneath your skin?
What do you say to taking chances,
What do you say to jumping off the edge?
Never knowing if there's solid ground below
Or hand to hold, or hell to pay,
What do you say?Sólo quiero empezar otra vez,
Y quizás tú puedas mostrarme cómo intentar,
Y quizás tú puedas tomarme
¿En algún lugar debajo de tu piel?
¿Qué dices de tomar riesgos?
¿Qué dices de saltar desde el borde?
Sin saber si hay tierra firme abajo,
O una mano para sostener, o un infierno que pagar,
¿Qué dices?- Lo siento, debo irme temprano hoy, necesito estar en casa antes de la medianoche porque es el cumpleaños de...
- Ya lo hablamos, Beca. Podrás ir cuando el equipo lo disponga.
Quien había hablado era el director de la película que estaba rodando. Pocas veces le tocaba hacer los turnos nocturnos, y jamás se había quejado, pero justo ese día necesitaba marcharse temprano. Chloe cumplía años, y era una costumbre saludarla a la medianoche. No quería decepcionarla. Pero su director no tenía intenciones de mandarlos temprano, y eso empezaba a inquietarla. Había visto su reloj decenas de veces en sólo una hora, y la irritaban los errores durante la filmación, algo que frecuentemente la hacía reír. Había desilusionado a Chloe muchas veces esos últimos meses, por lo que le había prometido que estaría en casa a la medianoche el día de su cumpleaños, que no iba a fallarle, pero ahí estaba otra vez, trabajando hasta tarde, sin poder liberarse de esas horas extras a las que estaba obligada por ser la protagonista de la película. Quería llamarla, pero no sabría qué decirle. Guardaba la mínima esperanza de llegar a tiempo, deseaba terminar antes y conducir hasta su casa, deseaba que el reloj se detuviera y tuviera que sumar otra desilusión a la pelirroja, que estaría esperándola en el departamento.
La última vez que miró el reloj, estaba a treinta minutos de la medianoche, y aún faltaba filmar una escena. No llegaba, y debía enfrentar el hecho de hablar a Chloe para decírselo. No tenía tiempo ni para pensarlo, o para dar vueltas al asunto y posponerlo, ya que solamente contaba con escasos minutos antes de regresar al set para seguir con el proceso de filmación.
Chloe atendió su llamado con la esperanza de escucharla decir que estaba en camino, pero, una vez más, no era eso lo que pasaba. Escuchaba otra vez las explicaciones, y trataba de entenderlas, de ponerse en el lugar de Beca, de lo difícil que era controlar sus tiempos, de lo importante que era su carrera y lo poco que podía resignar si quería estar entre los mejores artistas del momento. Lo intentaba, en verdad lo hacía, pero a esa altura ya estaba cansada. Cansada de entender, cansada de escuchar, cansada de esperar. Terminó la llamada sin despedirse, y se fue a la cama. Beca, a grabar. Ya era frecuente, y Beca veía un panorama bastante complicado de cara a su relación para los próximos días, pero había cosas que se le escapaban de las manos, y sabía que su vida estaría llena de renuncias constantemente. No quería que Chloe fuera una de ellas, pero por como estaba todo, estaba muy cerca de tener que tomar una decisión respecto a ellas dos.
Cuando condujo hasta el departamento, pasada la medianoche, imaginó muchas posibilidades. No quería aceptar que su relación pendía de un hilo, y tampoco podía aceptar que tendría que elegir entre su sueño de ser actriz y la persona que más había amado en todos esos años. Tenía proyectos en mente, y quería cumplirlos a todos con Chloe a su lado. Pero era egoísta pedirle que siempre estuviera esperándola. Como esa noche, cuando la encontró dormida en el sofá, envuelta en una frazada liviana, y con el control remoto casi de almohada. Ni siquiera pudo despertarla. Tomó asiento a su lado, y clavó la mirada en un punto fijo de la pared. No quería llorar, pero sus lágrimas cayeron sin permiso. Porque a pesar de todo, siempre había intentado estar en casa a tiempo, siempre había deseado poder correr a ese departamento y darle un abrazo, terminar su día en sus brazos, sin discusiones absurdas ni reproches en medio de la cena.
- Lo siento tanto, Chloe.
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(Re) Escribir nuestra historia.
FanfictionChloe Beale, Beca Mitchell. Dos historias de vida. Dos historias distintas. Dos historias entrelazadas, pero con caminos separados. Una sobreviviendo el día a día. La otra exitosa y con sueños que no paran de cumplirse. Sin embargo, la vida las pond...