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Decir que a Taehyung no le gustaba abrazar a Jungkook sería quedarse corto. De hecho, le encantó. Mientras abrazaba al niño más pequeño, sintió que Jungkook se movía hasta que se giró para verlo.

Taehyung estaba enamorado de los ojos de Jungkook, eran de un hermoso tono ámbar y podía perderse en ellos. Pero desafortunadamente, la risa de Kookie lo sacó del trance y decidió levantarse.

—puedes ir a lavarte, y luego podemos hacer algo para comer.—dijo Tae

Jungkook se lavó rápidamente y se sentó en la cama mirando sus piernas colgando mientras esperaba que Tae terminara. Una vez que Taehyung terminó de lavarse, llevó a Jungkook a la cocina e hizo unos huevos, tostadas y dos tazas de naranja para que los dos comieran y bebieran.

Taehyung se colocó al lado de Jungkook en la mesa y Jungkook prácticamente devoró su desayuno desde que él estaba muriendo de hambre de la noche anterior.

La vista hizo que Taehyung sonriera al ver algunas migajas en las comisuras de la boca de Jungkook.

—Umm, ¿tengo algo en la cara?— Jungkook cuestionó con una inclinación de su cabeza, causando que Taehyung se calmara ante la vista.

—Sí... déjame limpiarte—Alcanzó y quitó las migas suavemente de la cara de Jungkook lentamente tomándose el tiempo para admirar lo lindo que era el chico. Cuando terminó, Jungkook se sonrojó, Tae agarró el brazo de Jungkook y salió de la casa.

Jungkook se dio cuenta de que probablemente debería estar en su casa ahora, y Taehyung se sintió un poco triste porque el chico tenía que irse.

—Está bien, ¿puedo acompañarte al parque y luego dejarte ir a casa? —Preguntó Tae. Jungkook asintió y dejó que Taehyung lo guiara.

cute |taekookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora