Entre Tú Y Yo [Lawlu]

8- Último día

  A la mañana siguiente, Luffy se despertó por el gran sofocón que le estaba dando el abrigo de Law. Aunque debía reconocer que,había dormido muy calentito y cómodo.

¿Qué hora era?¿Las ocho?¿Ocho y media? No importa. Se dio la vuelta como sus fuerzas le permitían y se quedó observando un rato a la presencia que se encontraba al lado suyo. Que se encontraba dormido en una posición muy incómoda.

Y recién ahí se dio cuenta de las terribles y profundas ojeras que poseía este. Debía admitir que le daban un toque lindo pero de verdad,nunca, nisiquiera su padre, había tenido tantas ojeras como el chico que se encontraba frente a sus ojos.

  Se centró ahora en sus tatuajes. Sus brazos y manos,le dió un leve escalofrío al leer la palabra "Death" en sus nudillos,pero le quedaba muy bien. Aunque un poco tenebroso y sádico para un futuro médico.

Dudó si despertarlo o no porque cómo mencionamos antes,se encontraba en una posición extremadamente incómoda,en la cuál él también se había dormido una que otra vez y no se sentía lindo despertar con el cuello y la muñeca torcida. Era feo e incómodo.

  No había descartado la idea de levantarse y acomodarlo como debía. Luego recordó su "pequeño" detalle y volvió al mismo dilema.

  Volvió a acomodarse,está vez mirando el techo. Plenamente blanco. Demasiado para su gusto,tanta claridad solía irritarle a decir verdad. Pero tanto tiempo en el hospital,ya se había acostumbrado.

  Pensó.
Pensó hasta que una frase volvió a su recuerdo.

«El velorio de Ace será el domingo» No sabía si Sabo lo había dicho de esa forma,pero claramente era mañana.

Mañana.

Mañana vería "Por última vez" a su hermano mayor. Aunque así le veía Sabo. El sabía que las pesadillas no lo iban a dejar dormir en un tiempo. Ya le había pasado bastantes veces desde su entrada al hospital.

—Hey ¿Todo está bien?— lo interrumpió una voz,una voz grave, perteneciente al moreno que acababa de despertar.

—Oh,despertaste—dijo un poco asustado y pasó sus manos sobre su rostro. Y fue ahí cuando notó sus manos algo húmedas—Yo...¿Cuando fue que...?

—Oh,no te preocupes,suele pasar en éstos casos.—afirmó el mayor levantándose del sillón color café, mostrando una pequeña mueca de desagrado al sentir su cuello volver a su posición normal. Se levantó y le tendió un pañuelo.

—Gracias— dijo una vez que eliminó todo rastro de lágrimas—¿Te duele?

—No mucho,me he dormido unas dos horas más o menos,para asegurarme de que no tuvieras ninguna pesadilla. Veo que dormiste bien.

—Vaya que sí,hace tiempo no dormía tan bien.

—Me alegro.

¿¡Cómo era posible que aquel ser durmiera tan poco!? Claro que,se notaba que no dormía mucho como él solía hacerlo. Pero era realmente sorprendente.

Al rato llegó Sabo con una bandeja para el desayuno, traía consigo un juego de naranja natural,unas tostadas con mermelada de durazno, un té verde para acompañar y una taza de café.

—¡Sabo!—gritó emocionado el pequeño,lo cual extrañó al rubio, hacía tiempo no lo vea tan feliz.

Hasta que Luffy cayó en cuenta de lo que traía Sabo consigo.

—¡Comida!—gritó aún más fuerte, dejando sordo a Law durante unos milisegundos.

Sabo se sentó en un costado de la camilla y le tendió la bandeja a su hermano menor. También tomó la taza de café y se la acerco al ojigris.

—¿Sin azúcar verdad?—dijo Sabo irónicamente,con una sonrisa ladeada.

Él,por su parte no dijo nada y tomó la taza de café.

—Oye,Law.—Habló más serio.

—¿Mm?— dijo restándole importancia a la conversación.

—Te daré la dirección de mi departamento,el Lunes ya comienzo a trabajar y pues...No quiero dejarlo solo.

En ese momento Law olvidó algo sumamente importante: La universidad.
¿Cómo carajos iba a hacer para cuidar a ese crío? Se dijo a sí mismo.

Sabo al notar la cara de Law pudo deducir lo que estaba pensando.

—Trabajare por las tardes si es lo que te preocupa. Luffy comenzará la universidad por las mañanas, igual que tú.

Eso lo tranquilizó un poco. Aún así todavía tenía miedo de lo que podría llegar a pasar. Terminó su café y pensó,otra vez.

—¿Cómo...se supone que supiste que me gusta el café sin azúcar?

Puede que haya sido demasiado estúpido de su parte siendo Trafalgar Law el que emitía la pregunta,pero en verdad, nisiquiera su difunta abuela podía hacer esas brujerías.

—Oh,me lo acaba de decir el Doctor Rosinante.—Dijo sutilmente.

—¡Ese desgraciado..!—Law se alteró,le había dicho que estaría con Lami el fin de semana— Ya regreso.

Salió lo más rápido que pudo de la habitación y bajó a secretaría clínica, allí se encontraba su tío hablando animadamente con un par de enfermeras.

—¡Co-Cora- San!— lo tomó fuertemente por el cuello de la camisa—¿¡Donde es que dejaste a...!?

—¿A Lami?— Lo interrumpió.—Está con Kid,tenía ganas de estar con él así que la llevé allí.

—¿¡Qué!?

—Law no tienes que exagerar tanto,tiene 15 años. Además sabes que la pasa genial con Kid y Bonney.

El moreno no sabía que decir en ese momento,su única debilidad.
Lo único que podía ablandar a ese misterio, cínico y sádico ser,era su hermana.
Su hermana y Corazón.

  Y puede que a veces sea sobreprotector. Pero tener a un integrante de la familia en mal estado con una enfermedad mortal no era agradable.

Y si no se inventaba una solución rápida, ella,su única familia biológica.
Moriría.