I

476 38 18
                                    

La jornada transcurría como siempre,agotadora a más no poder,el sol calentando y absorbiendo las fuerzas y energías de su gente siendo esto tomadas como pereza por los capataces quienes golpeaban sin piedad alguna con sus gruesos látigos la humanidad ajena,era obvio aquella sonrisa de satisfacción al sentir el dolor y sufrimiento ajeno,el no podía hacer nada,se sentía impotente,ver como su gente recibía semejante castigo deshumanizado.

Veía sus rostros,aquellos rostros morenos de los capataces,con aquellas vestiduras raras,con aquella faldita blanca,con el torso desnudo que era atravesado por una cuerda de cuero donde ponía el latigo,aquella indumentaria que cubría su cabeza del sol hecha de tela blanca y en forma de un trapecio triangular truncado,pero lo que le llamaba la atención además de su actitud inhumana era aquellos ojos,esos ojos cuyos bordes eran muy negros,como si se los pintarán,como si fueran mujeres,un delineado que pasaba los alrededores de los ojos haciéndolos ver más grandes...

-QUE MIRAS ESCLAVO!!

Aquello lo asusto,no tuvo de otra que mirar atrás y ahí estaba,uno de los capataces que veía,su mirada era despectiva y de cierta manera transmitía la repugnancia de verlo a el,sus ojos hicieron conexión con los otros haciendo que el contrario frunciera el ceño,su mirada de piedad había sido tomada por una desafiante desatando una furia incontenible,el tenía el latigo sobre su cabeza...solo un impulso con fuerza bastaría para desgarrarle la piel y hacerlo sangrar sin piedad,el solo cerraba los ojos con fuerza esperando lo peor,cubriendo con sus manos su rostro...

En ese entonces,en ese breve instante en que esperaba el castigo se escuchó la voz de otra persona ahi.

-QUE HACES PERDIENDO EL TIEMPO CON ESE ESCLAVO,VIGILA A AQUEL OTRO!!

El abrió lentamente los ojos observando a quien el otro capataz apuntaba,era un anciano,uno muy cansado que apenas cargaba una de las tantas piedras y que inclusive se tropezaba y era ayudado por otros más jovenes,el hombre que se disponía a golpearlo se fue en aquella dirección,su corazón se estremecía,se contraia y latía a mil por hora,el miedo y el coraje se apoderaban de el.

Un alarido de dolor salió de aquel anciano,el solo observaba con dolor cerrando los ojos,imaginando aquel dolor sobre su cuerpo,escucho el 3er latigazo sobre aquella piel que había pasado la ropa de aquel hombre,su ser decía a gritos que debía intervenir pero no lo hacia,no faltó aquel valor hasta que se hizo presente el 4to latigazo,tomó valor.

A paso apresurado dejando de lado lo que hacía se fue en aquella dirección tomando de la muñeca al causante de semejantes gritos de dolor,el contrario lo miro furioso forcejeando con el,otro capataz lo tumbo al suelo con un empujón y entre ambos los latigazos llovieron sobre el mientras veía con sus ojos cristalizados como las mujeres se llevaban al anciano el  cual ni se inmutó en darle las gracias ni por lo menos mirarlo.

Ahí estaba su cuerpo tirado en el suelo,manchado de barro,con la ropa rota,con su espalda desprendiendo aquel líquido carmesí sobre lo que quedaba de sus vestiduras y sobre el árido suelo.

Apenas se incorporó de pie,salio de la vista de los demás y de los mismos capataces e inicio su travesía a su casa.

Cada paso era tedioso,sus piernas habían sufrido aquel flagelo,su piel abierta exponiendo el músculo al sol y a la vista de todos,cuando llegó a la ciudad de su pueblo se desplomo,se desmayo.

El dolor era inimagibable,su piel había sufrido bastante,su cuerpo apenas había sacado fuerza necesaria para caminar un poco y salir de las obras.

Una mujer con sus dos hijos y con uno en camino,se podría decir que tenia 6 meses lo llevo a su casa,los pequeños lo recostaron boca abajo mientras buscaban ungüentos para sus heridas y una nueva ropa.

Su pueblo estaba conformado por gente agradecida y de bien y por otras desagradecidas que le hechaban la culpa de su esclavitud empezando a alejarse de Dios y creyendo en las deidades ajenas.

Había sacrificado su bienestar por un de los suyos,había sufrido tanto los latigazos para que el mismo ni siquiera lo vea,se sentía triste pero ahora solo estaba sumido en la inconciencia por el dolor.

Aferrándose a aquel recuerdo de su libertad,deseando tocar aquellas tierras que se les había prometido hace mucho...

Aquellas tierras de Canaan...

🌹❤Es Sólo un Secreto❤🌹(Egipto&Israel) [COMPLETA]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora