Tarareaba una canción animadamente, mientras mis pasos recorrían la acera, acababa de salir de la escuela, las calles estaban desiertas y el cielo oscureciendo, me demore un poco más que la jornada escolar habitual, puesto que necesitaba una explicación concreta en mi proyecto de matemáticas.
Estaba segura que no había tardado tanto, pero no podía evitar pensar que mis padres se molestarían. Mientras caminaba fije mi vista en el cielo, era una tarde oscura, pareciera que pronto lloverá, por lo que era mejor apresurarme
Un poco insegura al no saber la hora con exactitud, detuve mis pasos abruptamente y de mi bolsillo trasero del pantalón, saque mi móvil, revisando la hora exacta que marcaba las 17 horas con 53 minutos. Y tal como lo pensé no era tan tarde e igual podía sentir el riño que me caería encima después.
Mientras aceleraba mis pasos, era evidente el eco de mis pasos sobre la acera, sin embargo un sonido sordo le acompañaba, por lo que mi única deducción precisa era el que alguien me seguía.
No pude evitar alertarme me en cuando caminé más rápido y escuché los pasos avanzar tras de mi, Pero todo empeoró en cuanto escuche un grito, una voz masculina algo ronca, no entendí lo que dijo, pero sin duda no era una buena señal, sin pensármelo mejor entre en pánico y comencé a correr.
Rapido!
No tuve mucho cuidado en cuanto a mi dirección, pero creí haber tomado el camino correcto. Ya que divisé a lo lejos la puerta de mi casa. Y siendo lo más ágil que podía, abriéndola para adentrarme asustada.
-Buenas horas de llegar jovencita- Escuche aquel tono sarcastico de mamá
-Lo siento... un profesor...debia... explicarme unos temas y.... nos demoramos demasiado.... -Le conte mientras respiraba agitadamente -
-¿Por que venías corriendo? -interrogo al parecer más relajada
- Tenia prisa porque... iba a llover pronto y... no me queria mojar - Dije calmando mi agitada respiración
- Bien, hija ya que estas aquí quería decirte algo importante, esto es necesario que lo escuches porqué...
La canción de Nirvana interrumpió nuestra conversación de paso terminando con ella, en cuanto mi mamá contestó.
-Hola?.... si.... claro - Dijo mientras asentía
Harta de lo mismo de siempre, no le tome importancia y subí a prisa camino a mi habitación, no era extraño en ella que interrumpa nuestras conversaciones por su trabajo, es más común de lo que aparenta.
Justo después de llegar a mi habitación, deje olvidada mi maleta junto a la puerta, sin prisa alguna me recosté sobre mi cama y me envolví en las cobijas, dejándome completamente cubierta me di vuelta, quedando sobre mi costado derecho, dándole la espalda a la puerta, planeaba hacerme la dormida, o al menos que, si mí madre entraba no comenzará a molestar por el desastre que tenia por cuarto.
Tal y como lo esperaba la puerta se abrió dejando ver un pequeño caminito de luz que provenía de la sala, escuche a mi madre suspirar y alejarse para luego nuevamente cerrar y dejar mi cuarto en completa oscuridad.
Poco a poco me quedaba dormida, mientras más me calentaba bajo las mantas de mi cama, más cómoda me sentía, pero al recordar que aún llevaba puesto el uniforme, preferí cambiarlo por mi pijama, con el sueño encima y los pies cansados, me dirigí camino a mi armario, tome lo primero que encontré y no me moleste por organizar mi falda o camisas de la escuela, después de todo apenas comenzaban mis vacaciones.
Sin más rodeos volví a la cama y no me negué en cuanto caí en los brazos de morfeo.
~☆~
ESTÁS LEYENDO
~ La muñeca de Daddy ~
Random-¿Porque debo llamarte Daddy? -Porque eso es lo que soy para ti, mi muñeca... ~☆~ Todos los derechos de autor reservados. Prohibida la copia y/o adaptación de la historia o alguna de sus partes. Está historia no maneja ning...