Don't Let Me Go [L.S]

3- Arrepentido

En el camino derramó un par de lágrimas pero tuvo que deshacerse de ellas antes de llegar a la casa de Mitch y Sarah donde se encontraría con Clare y Adam también.

Siempre le agradó la decoración que le dieron a aquella casa, era tan acogedora y tibia, le encantaba estar ahí en invierno. Cuando aún estaba con Louis iban por lo menos una vez a la semana, al menos cuando ninguno de los dos debía salir a otras ciudades con sus respectivas bandas.

Sarah siempre lo recibía con té o leche tibia y galletas que Mitch había horneado.

"No te hemos visto desde hace tres días y de repente llamas convocando una reunión por algo urgente, ¿qué sucede?"

"Escribí tres nuevas canciones y necesito que las cantemos la próxima vez"

Adam era el único que aún no hacía acto de presencia y en cuanto aquello abandonó la boca de Harry se escuchó el timbre resonando en la casa. Mitch se apresuró a abrir y dejó notar a un Adam aparentemente exhausto.

"Perdón por llegar tarde pero anoche me llamó el dueño de un bar y quiere que toquemos el sábado"

"Perfecto. Tienen tres días para aprenderse tres canciones nuevas"

"Harry... no crees que estás actuando un poco ¿precipitado?"

"No lo sé, tampoco es que me importe mucho, les enviaré todo por fax en cuanto llegue a casa"

Abandonó aquella habitación de la casa y salió en busca de algo que pudiera calmarle los nervios.

••••

"Louis ¿estás seguro de esto?" Luke no pensaba lo mismo que Calvin, Oli y Nizam.

"Ah, deja que lo haga. Terminará de una vez por todas con algo que nunca debió iniciar" no sabía cómo es que se estaba conteniendo de lanzarle un golpe a Calvin justo en la cara.

Cerró la laptop rápidamente y se levantó de la silla.

"No, no lo voy a hacer, ustedes son unos estúpidos pero lo soy más por haberles hecho caso"

"¿De qué hablas Louis? Estás mucho mejor sin ese niño, de verdad, sólo termina con ese lazo que los une todavía de una vez por todas"

"No, yo me largo. No pienso seguir aquí" corrió a la habitación temporal que tenía ahí y llenó la pequeña maleta con la misma poca ropa con la que llegó.

"Lou, sabes que no tienes por qué hacer esto" lo observaba desde el marco de la puerta siguiendo con la mirada sus movimientos.

"Luke, no puedo, no puedo estar sin Harry. Sé que hemos cometido errores pero lo hemos arreglado otra veces y..."

"Louis, no te engañes, deja de repetirte lo que él te dijo. No querrá escucharte después de lo que le hiciste"

"Estás equivocado, ¡malditamente equivocado, ni siquiera lo conoces! ¡a ustedes nunca les importé realmente!"

"Eres libre de pensar lo que quieras de los tres idiotas que están en la sala, pero a mi no me incluyas en eso, sabes que yo te apoyé cuando nos presentaste a Harry"

Louis suspira y decide sentarse en la cama deteniendo sus movimientos. Se contuvo durante tres semanas, no derramó ni una lágrima durante todos esos días pero no podía seguir reteniendolas.